[Konosuba x Go toubun] ¡Dios bendiga a estas maravillosas quintillizas! 2

1 - ¡¿Qué está pasando aquí?!

Anteriormente en "¡Dios bendiga a estas maravillosas quintillizas!", Kazuma fue teletransportado nuevamente al mundo real luego de que se lo pidiera a Eris. En este mundo tomaría el papel de un chico estrella que tiene como trabajo enseñarle a cinco hermanas mellizas cabezas huecas. Debido a cierto inconveniente, el chico debía decidir si quedarse en este nuevo mundo o volver con sus amigas de aventuras, escogiendo sin ninguna duda la primera opción. Pero lo que el joven no esperaba es que, por algun motivo, sus compañeras del otro mundo lleguen hasta él en busca de explicaciones. Ahora ¿Qué es lo que sucederá?

— ¡Ven aquí y afronta tu castigo, Basuma! — Gritó Megumin.

— ¡Ya te he dicho que me dejes en paz! — Respondió violentamente el joven — (¡¿Qué diablos hago ahora?! No parecen cansarse nunca, a pesar de que llevamos corriendo bastante tiempo)

— ¡Con esto de detendrás de una vez! — Vociferó la diosa del agua — ¡Sacred Create Water!

Aqua se detuvo para apuntar al chico, y una aura celestial la rodeó completamente. Pero, para sorpresa de ella y de sus acompañantes, el disparo nunca sucedió. Viendo esto, Kazuma no pudo hacer mas que echarse a reír.

— ¡JA! ¡Idiotas, la magia no sirve en este mundo!

— ¡Bajaste la guardia, estúpido! — Aprovechando esto, Darkness se abalanzó y atrapó de una vez por todas a su viejo compañero. 

— Ahora tendrás que acompañarnos y contestar todas nuestras preguntas... — Dijo la maga.

—  ¡O-Oigan, es-esperen un momento! — Kazuma comenzó a ser arrastrado contra su voluntad hacia una las aulas vacías, para acto seguido ser atado a una de las sillas — ¡No hace falta ser tan du... Auch!

—  ¡Cállate de una vez! — Ordenó con firmeza la peliazul — Bien, comienza a hablar...

— ¿Sobre que quie...?

— ¡No te hagas el tonto! — Interrumpió nuevamente Aqua — Dinos cómo y en que momento llegaste aquí. 

— ... (Suspiro) Esta bien, supongo que en esta situación no tengo otra opción.

Kazuma comenzó a contar como fue que llego a este nuevo mundo gracias a Eris, así como tambien les comentó que ahora vivía en este lugar sin problemas y sin demasiadas molestias.

— Y eso es todo lo sucedido ¿Contentas?

— Sabía que ocultabas algo... — Dijo entre dientes la diosa.

— Si, si... Lo que digas. ¡¿Ahora podrían explicarme como diablos llegaron hasta aquí?!

— Sencillo. Después de que desaparecieras, Aqua comenzó a buscarte por todos lado de manera desmesurada. Una vez que encontró información, nos trajo a nosotros dos junto a ella para vengarnos y llevarte de vuelta — Explicó Megumin.

— ¿Cómo diablos conseguiste información? ¡¿Y cómo que llevarme de vuelta?!

— Fue bastante fácil. Al irte así como si nada, rompiste nuestro contrato, por lo cual pude ser libre de volver al reino de los dioses. Una vez allí, le pregunté amablemente a Eris si sabia algo sobre ti, a lo cual no tuvo ningún problema en decirme la verdad — Satou dudaba seriamente que la manera en la que la peliazul consiguió la información fuera pacifica — Y sobre llevarte de vuelta es lo obvio. Tú no tendrías que estar aquí, sino derrotando al Rey demonio. Así que te llevare de vuelta junto a las demás para que completes tu misión... con el pequeño detalle que ya no estaré para ayudarte.

— Pues eso de que no vas a ayudarme me suena mas a una recompensa que a un castigo.

— ¡¿Qué dijiste?! — Aqua tomó por el cuello de la camisa al joven.