Sexo con mi Profesor

Capítulo 2

NOTA: Editado la parte del vestuario de Verónica y Elizabeth, también la escena de la presentación de Camila, será para otro capítulo que tmb editaré, y por último agregué algunas escenas, espero eso no les moleste, quería editar lo más antes posible, para no hacerlo cuando termine el libro.

En multimedia vestido de Elizabeth.

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Entrando a la casa

—¿Donde estaban señoritas?— dijo mi
mamá seria.

Casi me muero, ni bien entramos ya estaba aquí, es una bruja mi madre.

—Tía Franchesca, hola— le da un beso— veníamos del mall, hoy vamos a ir a una fiesta— dijo la muy fresca.

Dios qué confianza, bueno es Verónica Miller que se puede esperar.

—¿Y a quién le pediste permiso, Elizabeth?— dijo mi mamá arqueando una ceja.

—Es mi culpa tía, le dije que me acompañara, porque ese tipo de fiestas me aburre, pero es de mi prima y me insistió que vaya— dice Vero con cara de niña.

Se me olvidaba decirles, Vero es como una hija para mi mamá, logra convencerle y mi madre confía mucho en ella. Sí solo supiera quien es en realidad Verónica Miller...

—Si es así, entonces puede ir Elizabeth, pero recuerden que nada de tragos, y venir a una hora correcta— dice mi mamá.

—No se preocupe tía, la está dejando en buenas manos— dice Vero.

—Si lo sé querida— dice mi mamá confiada— Elizabeth sube rápido a tu cuarto y ordenalo, qué cuando te fuiste lo dejaste desordenado.

Sí, señora— dije de modo militar.

1 horas después de limpiar

—Ahora sí vamos a cambiarnos— dice Vero entusiasmada.

—¿Qué otra opción tengo?— dije sacando mi vestido.

3 horas después

Insistí en solo ponerme rímel y labial, pero Vero me maquilló más excesivo de lo normal, pero me quedó bien.

—Ahora sí vayamos a la diversión— dice Vero abriendo la puerta y vibrar el abre puertas de su auto.

•••

Llegamos a lo qué vendría a ser la "fiesta", un bar, con varias personas, fumando, teniendo relaciones "sentados", algo que ya me acostumbraba a ver, desde qué iba a este tipo de lugares, ahh se me olvidaba, no soy virgen, lo perdí a los 15 con mi ex novio.

Entramos al bar, y la mayoría de hombres nos miraban como presa, yo solo iba detrás de Vero como una niña pequeña y asustada de estos depredadores pervertidos.

—Yeah, sí vinieron, o mejor dicho haz venido Liz— dice Joan guiñandome el ojo y dándome un beso en la mejilla.

—No jodas a mi bebé, Joan— dijo Matt apartandome de Joan.

Matt Tesen, uno de los chicos populares de la prepa, mi mejor amigo.

—Hola mi pequeña Liz— dice Matt dándome un beso en la cabeza.

—Que acaramelados por Dios, sí solo querían estar ustedes dos, vayan a un hotel— dice Camila.

—Ya bueno, no estemos aquí apartados de todos como si fueramos una peste, vamos a bailar nenes— dice Verónica.

Fuimos al centro a bailar, pero sin antes beber algunos chupitos, y así dejar de ser la aburrida Elizabeth Jones.

Bailamos demasiado, y sentía una que otra mano en mi cintura, pero lo dejé pasar, porqué no estaba consciente ahora mismo, ni de la persona que estaría penetrandome con la mirada.

Terminó la ronda de chupitos

—Más, más— digo jadeando.

—Dios Liz estás súper sexy cuando dices eso, me calientas nena— dice Joan acercandose a mí.

—Estaré borracha, pero ni loca me acostaria contigo Joan olvídalo— digo poniendo mi mano en su pecho.

—Bueno me rindo, pero si quieres una metedita llamame te estaré esperando— dice guiñándome un ojo.

—Idiota— digo.

Giré en torno al lado opuesto y me encuentro a una Vero encima de la encimera bailando con dos negros, mañana amanecerá en silla de ruedas

Comencé a bailar otra vez, hasta que el deber me llamó.

—¿A donde vas? ¡No te puedes ir!— dice Matt jalandome el brazo.

—Si quieres que me cague aquí, entonces me quedo— digo.

—Esta cagona, anda al baño y haz lo que haces las 24/7, eso te pasa por tomar mucho— dice soltandome.

Le saco el dedo medio

—Púdrete— digo encaminandome al baño.

Entro al baño y me dirijo a un espacio, salgo y escucho a una chica llorar, me acerco y se encuentra arrodillada delante del water.

—¿Estás bien? ¿Necesitas algo?— digo preocupada.

—Sí estoy bien, y solo necesito que te vayas— dice.

—Ya, cuando llame al de seguridad que hay una loca aquí, ¿Le dirás lo mismo?— digo extendiéndole mi mano.

Se ríe

—Lo siento por mi forma de actuar— dice limpiando sus lágrimas— estoy así porque acabo de enterarme que estoy embarazada— dice adolorida.

—¡Que gran noticia! Pero porque estas así y no brincando de alegría— digo.

—Porque mi bebé no tendrá padre— dice triste.

—¿Por qué lo dices?— digo arqueando una ceja.

—Soy una prostituta, una mierda de mujer, y el hombre con el que una vez me enamoré, ahora resulta que tengo un hijo suyo. Tiene esposa y solo me quiere como su juguete de diversión mientras la esposa está en su casa— dice— me siento mal por la señora, pero nunca supe que tenía esposa, hasta que mi amiga me lo contó y lo ví con mis propios ojos; se encontraban en un parque con él y sus 2 hijos— dice llorando— no quiero destruir a esa familia.

—Hijo de puta, pero estás siendo muy blanda, encáralo, no es tu culpa de salir embarazada y mucho menos de que tú seas la causa que ese matrimonio se rompa— digo— es tu hijo y mínimo es la responsabilidad de él encargarse.

—No lo va a hacer, tengo miedo— dice.

—No tengas miedo, si él fue consciente que lo que hizo estuvo mal, pues que tome cartas en el asunto— digo.

—Lo intentaré, gracias por consolarme y ayudarme— dice.

—De nada, soy Elizabeth espero volver a verte, pero en otras circunstancias— digo sonriendo.

—Soy Kattia, y sí, espero volver a verte— dice felíz