Sotus: Hiraeth

11. Amienemigo

Kongpob

Kongpob permaneció sentado en su consulta durante una hora, pero ningún paciente fue dirigido hacia él. Sus pasantes le habían enviado mensajes de que se recupere pronto en lugar de encontrarse con él directamente, por lo que no se verá obligado a hablar por cortesía.

Esperó durante una hora más, aún no se le acercó ningún paciente, incluso trató de ofrecer un servicio voluntario para atender a los pacientes, pero fue enviado de regreso a su consulta. Suspirando en derrota, Kongpob decidió regresar a su departamento. Parece que nadie va a dejar que trabaje, lo que está bien así descansará ya que en estos días se estaba cansando demasiado fácilmente.

Kongpob caminó hacia el estacionamiento, estaba a punto de alcanzar su auto cuando vio a una niña con un micrófono y un hombre con cámara corriendo en su dirección. Estaba un poco sorprendido cuando lo llamaron

"Sr. Kongpob Suthiluck, ¿verdad?", Preguntó la niña. Kong asintió vacilante. La chica le hizo una señal al camarógrafo, un micrófono fue empujado instantáneamente en su cara.

"Los internautas están alborotados, ya que se especula que te has ganado el corazón de nuestro helado príncipe de una noche, ¿qué quieres decir sobre este rumor?", Preguntó.

"Disculpe. Creo que se ha equivocado de persona". Kong dijo, aunque estaba conmocionado y sorprendido por la cámara que parpadeaba en su rostro, ¿qué rumor? ¿Y quién era el príncipe de una noche?

Unos pocos reporteros más se unieron a la primera chica, más micrófonos fueron empujados en su dirección, todos los ojos lo miraban expectantes con la esperanza de que derramara algo de materia prima para una noticia sensacional.

"Entonces, ¿qué tienes que decir sobre este asunto Khun Suthiluck'"

Kong no pudo hablar. Las cámaras capturaban su perfil sobresaltado. Kong estaba pegado a la puerta de su auto.

"¿Puedes contarnos un poco sobre tu relación y la de Arthit Rojanapat?"

"¿Eres su novio?"

"¿Eras novio de Arthit Rojanapat?"

"¿Cómo lo conociste?"

"¿Quién se propuso?"

Le bombardearon preguntas de izquierda y derecha. Kong se sintió como un ciervo atrapado en los faros mientras estaba de pie como centro de atención de la horda de periodistas.

"Disculpen ..." Sook llegó abriéndose paso entre la multitud de reporteros acorralando a Kong.

"Lamento muchísimo decirles que se vayan, pero este es un hospital y su gente está incomodando a nuestros pacientes. Por favor, piensen en ellos", apeló Sook.

Algunos reporteros se fueron al escuchar esto, algunos aun se quedaron "Sr. Suthiluck" - un reportero nuevamente trató de hablar con Kong.

"Señora, debo pedirle que se vaya de inmediato, esto es un hospital", dijo Sook con severidad.

Aunque los periodistas parecían abatidos, al menos desocuparon el estacionamiento.

Sook tomó las llaves de Kong y abrió la puerta del auto diciendo "entra, yo conduzco", dijo.

"Puedo conducir Ai Sook, todavía estás de servicio".

"Me tomé dos días de permiso, conduciré y mientras tanto lees esto" Sook le dio el periódico mientras Kong se deslizaba en el asiento del pasajero.

Sook condujo el auto mientras Kong leía el periódico en silencio. "Entonces es por eso que me arrinconaron", respondió Kong muy tranquilo. Sook estaba un poco asustado de verlo tranquilo. Kong debería enloquecer, no mantener la calma.