VI

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Me di la vuelta rápidamente cuanto sentí su tercer dedo y le di una patada en la cara lo más rápido posible, el hombre perdió el equilibrio y cayó al suelo, se levantó y me sujeto del cuello

- Mocoso - dijo mirándome con odio y tirándole al suelo, me levanté rápido por si quería intentar tocarme pero solo se fue y suspire, intenté acercarme a mi ropa que estaba algo lejos, solo logré alcanzar mi capa roja y me la puse para cubrirme, intente usar la alquimia pero no lo conseguía y eso me estaba frustrando.

Cálculo que ya habían pasado casi dos o tres horas y la puerta de metal sonó de una forma chillona, habían entrado cuatro hombres con máscara sin expresiones y unas capuchas largas cubriendoles por completo, uno se acercó y me sujeto del brazo, el otro también, vi que otro saco una especie de líquido rojo y me dijo " "bebe"...me negué, me sujetaron de las piernas y me obligó a beber el líquido, sabía mal...era un sabor...extraño...tenía el sabor de hierro... Era sangre mezclada con agua.... Cuando reaccione la escupí sobre la máscara del tipo que me dió el líquido, me dio un golpe y se retiraron, limpie las gotas que estaban en la comisura de mis labios y miré...¿Que estaba pasando?.

Ya habían pasado tres meses, lo sabía por qué le preguntaba a uno de esos hombres el tiempo, ellos aparecían con frecuencia.

En este lugar pasé cosas horribles, literalmente, aparte de que me obligaron a beber ese líquido me obligaban a comer carne cruda, o en algunas ocasiones traían a una persona y lo asesinaban frente a mi, cortándole alguna extremidad o abriéndole y lo torturaban hasta que yo no podía aguantar, era terrible escuchar los gritos de esta gente, a mi me usaban para experimentar con una especie de líquido extraño el cual hacia que mi cuerpo entrará en una especie de calor insoportable, no entendía que eran lo que querían y para mí suerte ese hombro no volvió a atacarme...

Estaba intentando dormir pero no podía, pensando en la droga que intentaban ponerme, en la gente que moría frente a mi sin siquiera poder hacer algo, también me torturaban a mi pero intentaba aguantar el dolor... algún día hablaría de ello, esa noche la puerta se abrió

- Mira...es la última advertencia, si sigues siendo rebelde, esta persona muere - mencionó el hombre lanzando aún niño de 7 años al suelo, lo levantó de su cabello, vi el miedo y el dolor en sus ojos, sus ropas estaban rotas y era delgado

- DEJALO EN PAZ!!!- grité enojado

- Eso no será posible - el hombre golpeó en el estómago al niño haciéndole toser sangre y lo tiró al suelo subiéndose encina de el y apuntó de apuñalarle l

- DETENTE...por favor...- mencioné, no quería que ese niño muriera

- ¿Harás lo que te pida? - Mencionó sonriente...el desgraciado ganó, baje mi cabeza y mi cabello tapo mi rostro y pasó por encima de mis hombros

- S-Si...Haré todo lo que me pidas - mencioné, mordí mi labio inferior con rabia

- Bien - se acercó a mí mientras agarraba al chico del brazo bruscamente y lo lanzaba a otra esquina - para sellar el contrato - agarro mi cabello y lo cortó, veía como mi pelo largo caía al suelo y no pude evitar soltar lágrimas - Ese es el contrato, déjame ponerte esto porque definitivamente ahora te volverás mi mascota - mencionó poniéndome una cadena en el cuello cerrada con un cantado, definitivamente me había vuelto un animal. El hombre se fue cerrando la puerta y sentí los paso del niño

- ¿Estas bien? - me preguntó tembloroso

- S-Si...¿Tú estás bien? - levanté mi cabeza para verle el rostro y le sonría para que entrará en confianza, su cabello era irregular de color castaño, su piel era blanca y sus ojos azules, se veía el miedo en el

- S-Si...lo siento...

- No te disculpes, yo decidí esto por cuenta propia...si puedo salvar a una sola persona entonces ...vale la pena estar en éste lugar - miré a otro lado queriendo evitar la mirada de él.

Para salvar al niño debía dejar que él hiciera todo lo que quisiese conmigo y si... Definitivamente deje que me tocara...si no era yo sería el, mientras Hideki dormía yo lloraba en silencio...quería protegerlo y así pasaron tres meses más.

Hideki me despertó, abrí mis ojos y los vi llenos de lágrimas, sentí el olor de algo quemándose, sentía calor miré por una pequeña abertura debajo de la puerta que iluminaba de una forma poco usual, escuchaba a la gente correr desesperada

-¿Que pasa? - le pregunté

- No lo sé...pero me asusta el ruido - mencionó, la puerta comenzó a abrirse y escondí al chico detrás de mí, entró un hombre que para mí mala suerte no podía reconocer, pero sabía que era alto, escuché el chasquido de sus dedos y las velas que habían alrededor se encendieron

- ROY !!- Grite, mis ojos se humedecieron y el corrió hacia a mí

- Edward - me abrazó y yo correspondí...había soñado tanto con que llegará él...y ahora estaba aquí - Debemos salir - mencionó levantándose

- No puedo..Estoy encadenado - mencioné, Roy se acercó a mí cuello y con el calor rompió el cantado y la cadena se calló, luego a mi pie y rompió la cadena, pero no soltó el brazalete que lo rodeaba la zona, se encontró con el chico

-¿Quien es el?- el chico se aferró más a mí

- Es mi amigo - dije, ese azabache me cargó sobre sus brazos y le dijo al niño que se quedará detrás de él, comenzó a caminar eliminando cualquier obstáculo que podría haber en el camino.

Por fin la pesadilla en ese espantoso lugar termino.
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Habían pasado tres días, yo aún seguía en el hospital por mis heridas, por las drogas que me habían echo ingerir y por las múltiples violaciones de ese sujeto durante tres meses, Hideki estaba viviendo con mi hermano a petición mía y no se llevaban mal, el era un niño muy bueno, ayudaba a Alphonse en todo, el me había contado que sus padres le habían dejado en la calle, llevaba hay casi dos meses hasta que aparecieron los sujetos y los llevaron a ese lugar, por suerte me asegure de que esos hombres no le hicieran nada, prefería todo el daño para mí.

La noche de mi tercer día aquí apareció Roy y me abrazó con fuerza, acarició mi cabello cortó, porque si, me lo cortaron hace tres meses y no había quedado muy regular por lo cual tuve que volver a cortarlo, yo lo abracé nuevamente, me sentía protegido a su lado, sentía que alguien me protegía a mi, eso era lo que deseaba, que alguien curará mi infierno y ese era Roy

- Yo...Roy ...- quería decir algo pero no podía

- Shh...No sabes cuánto te extrañe - me dijo sin romper el abrazo, abrazo en el cual ambos nos sumergimos, está sensación era hermosa....

Pero...











































No siempre...










































Existen los finales felices.

Enamorando A Roy ; TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora