Enamorando A Roy ; Terminada

XI

Abrí mis ojos poco a poco, estaba algo desorientado, sentí las manos del adulto alrededor de mi cintura, me dolía un poco el cuerpo, aún que no era tanto, era soportable.

Estaba feliz, no se podía comparar esta sensacion con las otras, esto era hermoso.

Me moví un poco alejando las manos de él de mi cintura y me senté en la cama, me dolía un poco la cabeza, mire el desastre que había en la habitación y no pude evitar soltar una sonrisa.

Me levante de la cama y camine a la ducha, allí estuve un bien rato bajo el agua pensando, reflexionaba, reflexionaba como la vida era realmente un misterio, todo puede ser bello y color rosa y de un minuto a otro te encuentras en la prilla del infierno y cuando crees que eres salvado algo interfiere haciendo preguntar...¿Aún sigo en la brazas de la oscuridad o estoy en medio de una cascada dorada de sueños?....Eso era lo que yo pensaba en este momento.

Termine de vestirme y salí del baño, note la ausencia de Roy en el cuarto, comencé a buscarlo hasta que escuche su voz en la sala, hablaba por teléfono

- Te dije que si...Tranquila....Lo sé, lo sé, pero es la univa opcion para salvarlo....a mi me dolera dejarle sólo - ¿De que hablaba? - Bueno...nos vemos - le mire cortar y me acerque con la toalla en mi cabeza

- ¿Quie era? -Cuestione, él me miro y contestó con el típico "nadie que importe".

Sabía que algo me olcutaba, cuando psabamos los pocos días en Francia de forma divertida, siempre acaba an el día con un semblante triste, lo mismo sucedió cuándo nos acostamos por primera ves de esa manera, su mirada era triste.

Aún que intentaba investigar cuando el salía por brebes minutos no podia encontrar nada, quería saber la razón de su preocupación.
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Los días en francia acabaron, estabamos de vuelta en Amestris, claro que no desperdiciamos el viaje y compramos todo lo que pudimos. Durante esos días yo y Roy nos acostamos sólo una vez, solo esa noche y habia sido hermoso.

Cuando recordaba mis gemidos, su cuerpo o esas cosas me ponía nervioso...supongo que era normal.

Mi hermano y Hideki junto a otros chicos me preguntaba n como fue el viaje a Francia, simplemente contestaba que estuvo bien, que era lindo y la comida era deliciosa, claro que no les diría que habiamos tenido relaciones...sería raro.

Las únicas personas que sabían de la relación que tenía con Roy eran aquellos idiotas de la apuesta, mi hermano y Hideki.

Los dias pasaban normales, bueno..."normales", porque ahora lo normal era ignorarme, verme con tristeza y aparentemente sentir lástima, ya se cumpliría casi cuatro meses de ellos y aún no entendia que pasaba.

Siempre ignoraba los susurros de la gente, solo escuchar mi nombre de esos rostros triste me dolía bastante y me daba miedo el saber por que.

También había pasado un mes desde el viaje a francia.

Ese día lo pasa en casa de Roy leyendo algunos libros y comiendo. El tomaba vinos refinados y elegantes, causandome algo de gracia, luego de eso me besó metiendo su lengua en mi interior y sentí el amargó sabor de boca.

Esa misma noche salimos a cenar

Mierda...no debimos

La cena era tranquila, me perdía en sus ojos, no por su felicidad, si no que por si tristeza, jamás me queria decir por que estaba triste.

Cuando osabamos esas noches a solas, sintiendo nuestras pieles también se ponía triste y solo queria saber porque

- Roy ¿tu me amas? - pregunté