-No recuerdas nada?- pregunto poniendo un plato de huevo estrellado y pan tostado enfrente mío -Ayer parecía que no comiste nada-
-Gracias, recuerdo haber salido con Thomas, llegamos a un Pub, al cual entramos con facilidad, también recuerdo haber tomado algo, pero no estoy segura de lo que era… espera, y Thomas? por que me trajiste tu aquí?- pregunte mientras probaba la comida con cuidado, esperando no vomitar por lo mareada que me sentía
-De alguna manera termine en ese lugar también, y al verte bailar sobre la mesa semidesnuda tuve que intervenir, bueno, creo que no tengo nada que hacer aquí- camino hasta la entrada dejándome desconcertada, algo estaba mal
-Theo!- dije involuntariamente, a lo cual el se asomo levemente en la entrada de la cocina -am…- no sabia que decir, había sido muy estúpido de mi parte detenerlo -Sobre tu trabajo…?-
-Tengo lo necesario, nos vemos luego- dicho eso escuche como salió de mi casa, me pregunto si seguirá molesto por lo que dije la ultima vez que hablamos, me pregunto que pasara por su mente exactamente, pero nunca hay manera de saberlo
Al terminar el desayuno me sente en la sala y prendi el televisor mientras intentaba hacer memoria sobre lo que había pasado ayer, pero después de varios minutos con un dolor de cabeza me adentre en la cocina en busca de una aspirina o quizá la caja entera, me subí sobre el pequeño mueble para poder abrir las puertas y explore entre todas las botellas de alcohol llenas, vacías, algunas que podría jurar llevaban ahí años, de mi madre, mi mano bien se encontraba en el fondo, mientras que aquellas botellas de vidrio chocaban con mi brazo, se sentían bastante frías, y mientras mas movía mi mano, las botellas chocaban provocando varios ruidos agudos, bastante insoportables en mi opinión, estaba apunto de bajar del mueble cuando mi mano por fin sintieron una pequeña caja hasta el fondo, mi dedo corazón apenas y lograba tocar la orilla, intente acercar la caja un poco mas, provocando que se calera hasta que después de varios intentos lo logre, con un poco de cuidado intente sacar la caja, pero mientras extraía mi brazo, provoque que dos botellas cayeran, una directo al suelo y otra se rompió sobre el mueble donde estaba, pasándome a dejar pequeñas cortadas en las piernas y en mi brazo izquierdo, con cuidado baje esperando no pisar ningún vidrio, menos por el hecho de que andaba descalza, una vez fuera de la cocina camine hasta el baño para enjuagarme las heridas y vendarlas un poco, no estaban sangrando demasiado, y solo se sentía un pequeño ardor, supongo que nada grave, con escoba y recogedor regrese hasta la cocina y comencé a recoger los pequeños vidrios, mis manos se encontraban bien, las escasas cortadas que había adquirido se cubrían por algunos curitas que había encontrado en el baño, lo mejor seria cubrirme con algún pantalón largo y guantes, aunque dudo que sea interés de alguien.
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Golpee la puerta con fuerza, llevaba varios minutos afuera, me importaba poco el no haber desayunado o lo frío que se encontraba en ambiente, esta vez no me iría de aquí sin una respuesta, aunque esto durara días, segundos atrás pude notar como a través de la cortina me había visto y al notar que se trataba de mi no volvió a acercarse a la puerta, me importaba poco el ser molesto para ello o para los vecinos, toque con mayor fuerza hasta que segundos después escuche unos pasos acercarse a la puerta, la cual se abrió después, entre con brusquedad con una sola cosa en mente, encontrarle y saberlo todo
-Theo, que haces aqui?- pregunto mi madre con sorpresa
-Donde esta?- dije en un tono algo molesto
-Sabes que el no quiere hablar contigo…- su tono era paciente y parecía triste
-Tengo que aclarar esto, si no lo hago pronto, simplemente… no me lo perdonaría-
Después de ver a Luna hacer el ridículo en aquel pub, volví a tener aquella sensación de lo que paso con Stella, solo que esta vez fue mucho mayor, aquella decepción, tristeza, el shock y no saber que hacer y todo eso expresado como ira, aquella ira que ciega a la mayoría de las personas al momento de actuar y no les deja pensar sobre lo que están haciendo, habla sido un chico bastante estúpido al hacerles caso y dejar que me alejaran de Stella, la única persona que podía considerar familia, pero no dejaría esto así, ya no mas. Camine hasta el estudio de Robert y abrí la puerta apenas tuve la perilla en mi mano, al entrar lo encontré tranquilamente leyendo un libro, como si yo no estuviera ahí
-Quiero que me digas donde esta, y no me pienso ir de aquí sin una respuesta- dije tirando el libro que este tenia en las manos
