Bad Boy |Jjk

Capítulo 22| Mi salvador.

— Shhh, tranquila. Soy yo, Jungkook. ¡Auh! ¡¿Por qué me pegas?!— dijo alarmado, susurrando.

Al acostumbrarme a la poca luz, pude observar como se sobaba las zona afectada.

— ¡Me asustaste!— susurré dándole varios golpecitos en el pecho y el seguía quejándose. Me fijé mejor en el lugar en donde estábamos y era debajo del escritorio de Hye, no lo había visto debido a la escasa luz.

En ese instante caí en cuenta de que estábamos demasiado cerca, tenía mi espalda erguida contra uno de los laterales del escritorio, en cambio a Jungkook lo tenía en frente en la misma posición que yo, excepto que el estaba más cerca sin apoyarse por completo. Mis piernas estaba flexionadas a sus costados, mientras el, estaba en posición de indio con las piernas cruzadas.

— ¡¡Donde están mis queridos amigos!!— me encogí en mi lugar al escuchar la voz de Tae acercarse por el pasillo, si el entraba y prendía la luz... sería nuestro fin. Escuchamos un ¡libre! de parte de Lisa, y una maldición por parte de Taehyung. Faltaban cuatro, sin contarnos a nosotros dos.

Jungkook se acercó más a mí, lo miré con los ojos bien abiertos. Pero que descarado...

— No digas nada— me hizo una seña con sus dedos que aguardará silencio — si el entra puede que haya una posibilidad de que no nos vea, estamos del lado que no se ve desde la puerta. Así que calla.

La manija se comenzó a mover, mi cuerpo se alertó y comencé a moverme desesperadamente.

¡Estupida, solo es un juego!

La escasa luz que entraba por el pasillo, se apagó derrepente, miré buscando una explicación a Jungkook pero el estaba igual o peor de confundido que yo. Hasta que escuchamos varios gritos provenientes de abajo.
Me asomé un poco para ver hacia la ventana que daba a la calle y todas las luces estaban apagas. Era un corte de luz en todo el vecindario.

— ¡No salgan de sus lugares, será más divertido asi! ¡Pueden esconderse en otro lugar, contare otra vez!— Dijo entusiasmado y algo macabro, espero la afirmación de los demás y así fue,  obviamente no dijimos nada, pues Taehyung estaba detrás de la puerta y eso sería arruinar nuestro escondite.

Quizás se convenció de que no había nadie aquí, pues al terminar de contar se oyeron los paso de el alejarse para otro lado.

— Será mejor que me vaya a otro lugar, esto es raro...— intenté salir, pero las manos de Jungkook tomaron las mías y las colocó a los costados de mi cabeza, no dijo nada ni yo tampoco. Estaba en completo shock, otra vez regresó aquel cosquilleo en mi estómago.

La distancia era tan poco que podíamos escuchar la respiración del otro. Sus manos bajaron acariciando mis muñecas, ¿qué hacía?. Carraspeé tratando de alejarme pero el hizo más presión con sus dedos. Acercó su cuerpo al mío hasta que nuestros pechos chocaron, el quedó entre mis piernas arrodillado. Gracias a que el mueble era un poco alto, Jungkook no chocó contra el, su cabeza apenas rozaba contra este. Dejó salir una suave risita al verme tan inquieta.

— Quedate quieta, sino nos encontrarán.

No otra vez...

No cuando ya lo habíamos olvidado...

Acercó su rostro a la cuenca de mi cuello, y dejó un casto beso en mi cuello, me removi incómoda, y volvió a reír ronco, sentí un cosquilleo en la piel de mi cuello producto de su respiración y risa. Quería alejarlo pero mientras más lo intentaba más presión ejercía sobre mi cuerpo. Otro pequeño beso fue dejado esta vez en el comienzo de mi mandíbula, a diferencia del otro este fue más húmedo y duradero, luego otro en mi mejilla, y por último en el lóbulo de mi oreja que al alejarse ocasiono un fuerte chasquido.