⚓Interpol⚓ Larry Stylinson. [Omegaverse]

Two.

El ojiazul estaba sentado en una de las sillas esperando a que dijeran su nombre para pasar a la oficina del director de la estación de policías.

Habían demasiados olores ahí dentro, que lo marearon apenas entró. Habían detenido a dos chicos que parecían que se habían bañado con marihuana y que no estaban muy lejos de él. Además de que eran ambos alfas y emitían un olor que a su omega le desagradaba.

Así que estaba esperando a que dijeran si nombre para que el saliera de ahí y que su nerviosismo no aumentara.

—William Terry.—dijo una omega saliendo de la oficina del director.

—Soy yo.—dijo el ojiazul levantándose de la silla y viendo las miradas que le daban los alfas que olían a marihuana.

—Puedes pasar a la oficina.—dijo ella señalando la oficina.

—Gracias.—contestó el ojiazul caminando hacia la oficina e ignorando los comentarios que le lanzaron los alfas drogados.

Entró a la oficina y encontró al director de la policía acomodándose sus lentes para ver unos documentos.

—Buenos días.—saludó el ojiazul parándose enfrente del escritorio.

—Buenos días. Tomé asiento.— dijo el alfa señalando la silla que estaba enfrente de él—. He revisado su expediente y me sorprendió que haya sido transferido a New York cuando tenía un buen empleo ahí.

—Lo sé.—dijo el ojiazul con una sonrisa—. Pero me han dicho que había una vacante aquí y no pude desaprovechar la oportunidad.— empezó diciendo el ojiazul—. Hacia tiempo que buscaba un empleo aquí en New York ya que mi novio vive aquí. Y por fin lo he encontrado, además de que podemos pasar más tiempo juntos.—el ojiazul sonrió y dijo: —. Verlo solo en los fines de semana no es suficiente.

—Ya veo.—respondio el alfa quitándose los lentes—. Hace tiempo mi hija hizo lo mismo. Los jóvenes de ahora hacen todo por amor.

—Usted me entiende.—dijo el ojiazul sacando su celular—. Él es mi novio, su nombre es Edward y se ve tan lindo.—dijo el ojiazul enseñándole la foto a él alfa viendo que éste la miraba detenidamente.

—Veo que se aman mucho.—dijo el alfa—. Pues lo único que me queda decir es que es usted bienvenido joven William.—el alfa se levantó y extendió su mano.

—Muchísimas gracias, no le voy a fallar.—dijo el ojiazul tomando la mano del alfa.

—Karen le mostrará su oficina, es un gusto tenerlo aquí.—el alfa lo acompaño hacia la puerta y la abrió—. Y espero no haya ningún problema.

—No las habrá señor.—contestó el ojiazul caminado hacia la joven omega—. El director me ha dicho que me mostrarás mi oficina.

—Acompañame.—dijo la omega levantándose y empezando a caminar con sus zapatos de tacón de aguja.

Louis sabía que si utilizaba algo así terminaría fracturandose los pies.

Llegaron al final del pasillo en donde había una puerta de color café oscuro. —Está será tu oficina.—dijo la omega abriendo la puerta—. Espero no tengas problemas en adaptarte aquí.

—Gracias.—dijo el ojiazul recibiendo un asentimiento y después quedándose solo en la oficina.

Caminó hacia el escritorio y empezó a revisar lo que había ahí. No había nada que lo ayudara, así que saco su portátil y empezó a leer lo que le debería de hacer.

Sacó los papeles y los metió en una caja que había ahí. La oficina estaba muy desordenada así que necesitaba algo de limpieza, ordenó los papeles y los fue colocando en el mueble que habían ahí, además de que también revisó todo lo que había.