Teen.

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Los días siguientes no fueron los mejores para Louis.

Tenía pesadillas todas las noches en donde se repetía una y otra vez la muerte de Ian.

Su jefe le había dado quince días para que pudiera recuperarse ya que lo necesitaba y además se había disculpado con el por mandarlo a un lugar en donde no recibió apoyo necesario. También Todd había hablado con él y le había dicho que contaba con él. Sabia muy bien que Todd estaba pasando lo mismo que él ya que conocía perfectamente la amistad que ambos alfas tenían.

Harry había sido una gran ayuda, el pobre alfa se levantaba y lo consolaba a altas horas de la noche. También le había tenido vergüenza ya que el alfa sí tenía que ir a trabajar y por su culpa, llevaba ojeras al trabajo todos los días.

—¿No necesitas nada?— el ojiazul rodo los ojos cuando el rizado preguntó eso.

—Estoy bien Harry, ya desayune algo. No tienes de que preocuparte.— dijo el ojiazul pasando sus dedos por una fotografía enmarcada que estaba en la mesita.

Era una foto de ellos, más bien la primer foto que se tomaron juntos. Ellos la habían enmarcado ya que haría mas "realista" su relación. Aunque nunca la había visto realmente y... se veían muy bien juntos. Además de que Harry se veía muy guapo en esa fotografía, y ahora mismo Louis la amaba.

Hey, ¿estás bien?— preguntó el rizado por el teléfono.

—¿Eh?— dijo el ojiazul confundido.

Te he estado hablando pero no me contestabas, ¿estás bien?— preguntó de nuevo el rizado con preocupación.

—Estoy bien, solo que me distraje con una fotografía.— explicó el ojiazul dejando la fotografía en su lugar, ni siquiera recuerda haberla tomado.

Llegaré en unas horas, si necesitas algo no dudes en llamarme, ¿si?

Una sonrisa apareció en el rostro del ojiazul cuando el rizado dijo eso. La verdad era que sentía las "típicas mariposas" en su estómago cada que Harry decía algo como eso. Era muy lindo la forma en la que se preocupaba por el y la forma en la que siempre le decía que cualquier cosa, que lo tenía a él.

—Lo sé y te lo agradezco mucho.— dijo el ojiazul apretando más su teléfono celular—. Nos vemos más tarde, ahora te dejaré trabajar.

De acuerdo, nos vemos.— se despidió del rizado para luego cortar la llamada.

Louis se quedó mirando el teléfono un largo tiempo para luego dejarlo en la mesita. Eran las diez de la mañana y hacia demasiada calor, aunque no era muy lógico ya que el cielo estaba nublado y había estado lloviendo en la madrugada.

Caminó hacia el baño cuando sintió un tirón en su abdomen, ¿pero qué rayos?

Sentía su cuerpo arder, sus piernas estaban temblorosas, sus mejillas comenzaron a sonrojarse y comenzó a sudar.

No era posible... ¿cómo se había olvidado de algo tan importante?

Su celo.

Estaba entrando en celo. Pero era imposible, faltaban al menos un mes más. Y luego recordó que lo habían sedado en el hospital cuando murió Ian. Una vez había leído que ese sedante tenía algunos químicos que hacían que su celo se adelantara y no lo había creído por que había pasado una semana del "accidente" y no había tenido señales de nada.

Ahora estaba muy seguro.

Tenía que hacer algo, se metió al baño y abrió la llave de la regadera parándose debajo de ésta con todo y ropa. Necesitaba algo que le ayudara a calmar ese calor que sentía por dentro y que mejor que el agua helada que salía de la regadera.

⚓Interpol⚓ Larry Stylinson. [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora