⚓Interpol⚓ Larry Stylinson. [Omegaverse]

Three.

Ambos chicos se levantaron temprano ya que era sábado y sería el único día de trabajo que tendrán ya que mañana no trabajaban.

Desayunaron algo de cereal con leche ya que se les había hecho un poco tarde y necesitaban estar en sus oficinas muy temprano.

Habían ya estado conviviendo con sus 'sospechosos' como ellos le decían, el ojiazul era el que tenía una gran ventaja ya que Ian siempre lo buscaba para hablar. Le llevaba algún postre y se ponían a platicar de cosas sin sentido. También Louis había hecho una amistad con Karen, la secretaría del director de policías. Hablaban cuando ambos estaban desocupados y bromeaban mucho.

—Hoy es sábado así que sales a la una de la tarde. Vendré por ti a esa hora.—dijo el rizado estacionando el auto en frente de la estación y quitándole el cinturón de seguridad al ojiazul para luego agarrarlo del cuello y jalarlo a un beso.

Eso era una de las cosas que habían comenzado a hacer. Harry ya no salía del auto pero aún así lo besaba. Aunque si podría pasar gente y verlos, pero eso era un poco imposible. Además que solo se besaban cuando estaban enfrente de la estación de policías ya que debían demostrar de que eran una 'pareja perfecta' y que eran personas normales.

—Nos vemos más tarde Louis.— el rizado dejo un último beso en sus labios.

—Nos vemos más tarde Harry.— contestó el ojiazul agarrando su mochila y saliendo del auto para caminar hacia la estación de policías.

En cuanto entró supo que algo estaba muy mal ya que estuvo a punto de caer cuando un montón de policías pasaron a su lado y lo empujaron, pero no le dio tiempo de protestar cuando cada uno de ellos se subió a una patrulla y salían de ahí.

—¿Qué ha pasado?—preguntó el ojiazul a Karen.

—Han robado un banco aquí cerca. Se cree que son las mismas personas que robaron el cargamento de armas aquí.—le contestó la omega mirando hacia todos lados para ver si no venia nadie—. Me dijeron que un policía está involucrado pero aún no saben quien es.

—¿En serio?—preguntó el ojiazul haciéndose el sorprendido.

—Si. Pero no le vayas a decir a nadie que te lo he dicho.—dijo ella para luego agarrar una carpeta y salir corriendo hacia la oficina del director de la policía.

El ojiazul caminó hacia su oficina y en ella vio que había una nota sobre el escritorio. La leyó y la hizo una bolita para luego tirarla a la basura. Alguien sabía demás y trataba de ayudarlo pero... ¿quién era esa persona?

Se dijo así mismo que no tenía por qué estar preocupado por eso. Harry los atraparia a cada uno de ellos y nunca haría algo para dañarlo.

Así que saco su portátil y empezó a buscar los archivos de los casos anteriores que habia tenido el trabajador social. Había mucho trabajo que hacer aunque no lo han utilizado en el tiempo en el que ha estado trabajando. Solo ha tenido que ordenar papeles y su oficina que estaba hecha un desastre.

Estuvo tan sumido en sus cosas que no se dio cuenta en el momento en que entró Ian con un vaso con café y una caja de donas en las manos.

—¿No te aburres de estar solo ahí sentado pasando archivos?

El omega saltó y su ritmo cardíaco aumentó. —¿¡Qué te pasa!? ¡Podría haberme dado un paro cardíaco! —gritó enojado el omega mirando mal a el alfa.

—¡Lo siento! Pero pensé que al menos te habías dado cuenta de mi existencia.—dijo el alfa dejando la caja de donas en el escritorio al igual que los vasos con café—. Todavía que te traigo donas.