•06•

15.6K 1.4K 1.8K
                                    

Sábado, 12:30 PM/ 26 días antes de la presentación.

— ¡Midoriya!— Mina llegaba junto a las otras chicas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— ¡Midoriya!— Mina llegaba junto a las otras chicas.

— Ashido-san...— El peliverde sonrió. Esperaba que nada malo le pasara.

— En mí no funciona esa sonrisa de inocentón.— Empujó a Iida fuera de la mesa, sentándose frente al pecoso y con ayuda de las demás mandó a volar a Todoroki.— No soy como mis compañeras que vinieron a pedirte que entraras al grupo...— Observó sus uñas despreocupada y regresó la vista al chico.

— ¿De qué hablas?— Izuku se encogió en su lugar. Mina realmente le daba mucho miedo.

— Primero, no le puedes contar a nadie de tu participación. Segundo, Toru nos contó lo de tu decisión.— Su sonrisa era algo forzada.— Midoroya... Si desde el principio yo era la que te pedía el favor de entrar...— Tronó sus dedos.— Entrabas, sí o sí. Así que...— Hizo una pausa y robó una de las papás a la francesa del plato del peliverde.— Debemos comenzar con tu entrenamiento.

— ¿Qué tengo que hacer?

— Hoy, después de salir de la academia, te vas a cambiar y vamos a entrenar alejados de aquí. Paso por ti a las 3:40, tienes 20 minutos.— Volvió a sonreír antes de levantarse e irse de nuevo con las chicas, sin darle oportunidad de hablar.

— ¿Qué fue eso?, Midoriya.— Iida, que fue sacado por la chica rosada, volvió a su lugar.

— Las mujeres de nuestro salón están cada vez más locas.— Todoroki regresó con su plato de soba.

— ¿Qué quería que llegó tan apurada? — Se puso nervioso, no le gustaba mentir.

— Quería...— Pensó por unos instantes.— Que le explicara un tema de inglés en la tarde.

No muy convencido, Iida siguió comiendo. El de cabellos verdes resopló aliviado.

Las clases pasaron rápidamente. Era una mañana que se perdería en la memoria de todos.

— ¡Deku-kun!— Todas venían corriendo detrás de él. La hora de su juicio había llegado o así lo pensaba.

— Hola...— No se detuvieron.— ¿A dónde van?

— Yo que tú, empiezo a correr. RECUERDA QUE TIENES HASTA LAS 3:40, NO PIERDAS TIEMPO...— Gritó la de cuernitos, mientras se alejaba. Al mismo tiempo, el chico empezó a correr. Tenía miedo de que si no estaba listo, le hicieran algo.

Llegando al segundo piso, alistó lo primero que encontró y se dio un baño rápido, quedando con tiempo para llevar su ropa a la lavandería del edificio y encontrándose con Todoroki.

— Creo que ya es costumbre que nos encontremos en todo momento...— El pecoso tenía sus manos ocupadas. Llevaba la ropa de casi toda la semana.

"𝑨𝒏𝒊𝒎𝒂𝒅𝒐𝒓" «𝑫𝒆𝒌𝒖𝒃𝒐𝒘𝒍» (En Mantenimiento)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora