TODO CAMBIA INJUSTAMENTE ©

Capítulo 7

Arriba biblioteca del insti, Wattpad no  me dejó poner la imágen del gimnasio :'( , en el otro capítulo lo pondré.

Genial lo último que quería era quedarme más tiempo en la escuela y más en una aburrida biblioteca.

Salí del salón y me encontré a Liam recargado con los ojos cerrados en la pared contraria se veía muy relajado su semblante está libre de preocupaciones y sus manos metidas en los bolsillos de sus pantalones, me pregunto porque se habrá cambiado supongo que sus papás deben ser muy importantes o tener un trabajo muy bien pagado para meterlo a esta escuela, no era por presumir pero sólo hijos de personas influyentes o con mucho dinero podían darse el lujo de estudiar aquí.

Son mínimos los becados que tenemos ya que sus calificaciones tanto comportamiento debe ser de excelencia además de que aún así pagan algo de colegiatura. El ejemplo más claro de un becado de excelencia es Khaterine se sabe que ella entro por sus estupendas calificaciones y su buen comportamiento.

Volviendo a Liam cuando lo miré detalladamente no era feo, era todo lo contrario su sonrisa era la más perfecta que había visto tenía unos labios levemente marcados e hinchados sin ser demasiado voluptuoso, su cabello que a pesar de estar ligeramente desordenado le da un toque despreocupado sin verse mal, su complexión es delgada pero da la impresión que se ejercita y finalmente era alto, perfecto para el básquetbol.

Escuché una risita salir de sus labios.

Abrió un ojo mientras sonreía.

—Lo se, soy irresistible Sthander.

Espera un segundo, ¿El sabía que lo estaba mirando ?. De solo imaginarlo me empecé a poner roja.

Se cruzó de brazos y volvió a mirarme

—¿Terminaste de admirarme?— volvió a soltar una risa despreocupada — O ¿Quieres que me acomodé en otra posición?, ya sabes sexy, intrigado. Tu sólo dime como me acomodo.

Quería irme, salir corriendo la vergüenza que sentía era muy notoria estaba más roja que un jitomate en ensalada.

Voy a recurrir a la vieja confiable, la negación.

—¿De qué hablas ahora Liam?, se te fundió la única neurona inteligente.— dije tratando de sonar lo más normal posible.

Niegas estarme mirando en plan niño de cinco años sin comer mirando un helado.

— No, no niego haberte mirado, ¿la verdad?,es que te estaba examinando, como es que alguien puede ser tan idiota y listo a la vez— le respondí imitando su posición.

—No te creo nada Sthander, todas las chicas que conozco siempre terminan enamoradas de mi, tranquila no eres la primera.— dijo chasqueando la lengua y haciendo un guiño.

—Muy bien seré la primera en no enamorarse de ti entonces— dije levantando una ceja.

El empezó a caminar hacía mi, se inclino muy cerca de mi oído con un mínimo espacio entre los dos para luego susurrar :

— Tu vas a ser el niño de cinco años.

Su colonia me llegó al instante, olía demasiado bien una combinación suave como el olor a vainilla pero un toque anís con nuez y un débil toque a lavanda.

Involuntariamente cerré los ojos para poder dejar entrar el olor de su colonia. Pero el no se quedó callado y continúo.

— y yo voy a hacer tu helado prohibido— abrí los ojos con brusquedad empujándolo lejos de mi.

— Cállate ya Liam ahora no tengo tiempo para tus tonterías, tengo que ir a la biblioteca— lo último lo dije con un tono de fastidio.

— y yo a él gimnacio.— dijo dudoso mientras sacaba un papel arrugado de la bolsa derecha de su pantalón.