I need you bts (omegaverse )

Capitulo 12

Pov Suga

Iba de camino a juntarme con Hoseok, es tan raro porque a pesar de que voy solo no tengo miedo, será porque estoy completamente seguro de que no es como todos los alfas o porque lo veo como algo más que un simple alfa, hace ya un par de días que estas ideas andan dando vueltas en mi cabeza, no lo entiendo muy bien, lo conozco hace solo un par de meses, pero me siento a gusto hablando con él, luego de lo que paso en casa de Lisa me dejo claro que sus intenciones no son malas y que está a disposición para cuando lo necesite. Eso me hace sentir seguro y cómodo con él, incluso cuando me abraza, toma mi mano o acaricia mi cabeza no me da miedo, tampoco me ha dado motivos para pensar mal de él, es que incluso su olor a hierbas silvestres y canela es tan relajante. Es tan fácil para mi hablar con él, entretenido, de cualquier tema que quiera hablar, él sabe algo o me escucha atentamente como si le estuviera diciendo que descubrí la cura al cáncer, cuando solo le estoy hablando de la poesía azteca.

Pero si hay algo que me asusta, porque después de todo él es mi psicólogo y sabe la locura que hay en mi cabeza, lo complicado que sería estar con una persona como yo, sí algún día me animara a estar con alguien, lo cual no lo veía ciertamente posible, pero en el remoto caso en que me animara a estar con alguien. ¿A quién le gustaría estar con alguien al que tiene que tener cuidado incluso con tocarlo? 

Jamás pensé que algún día me estaría planteando algo como esto, ósea es obvio que nadie me había parecido tan interesante en mi vida, me gustaría que alguien pudiera aconsejarme, pero no sabía a quién podría contárselo, es que a Lisa no le podría pedir consejo por el simple hecho de que no me entendería, al igual que Kook y Jimin, que llevan años en sus relaciones, Jin tampoco era una opción ya que se pondría en modo super sobre protector y no conseguiría un buen consejo que pueda utilizar de su parte debido a que no tiene más experiencias amorosas que yo. Evidentemente a Hoseok no se lo diré, pasaría demasiada vergüenza ya que no creo que él sienta lo mismo que yo y la comodidad de hablar con él se iría a la mierda. En este momento es cuando deseo que Mina no se hubiera ido o poder confiar en más personas.
Cuando llegué al parque él se encontraba sentado en un banco, mirando a unos pequeños jugando, saltando, corriendo, demasiados ruidosos, igual que Mini y Kooki a esa edad, eran tan adorables sin todos esos problemas de la adolescencia.

_Hola. - Le digo para que se percate de que ya había llegado.

Él me sonríe. - Justo a tiempo. - Se para y me hace una señal para que lo siga. - Vamos, tengo una sorpresa.

_ ¿Qué sorpresa? - Digo con tono de desagrado. - No me gustan las sorpresas. - No solo no me gustan, las odio.

_ Confía en mí, no es nada malo.
A regañadientes lo seguí, no es que no quisiera confiar en él, solo no podía evitar el disgusto y ansiedad. Por suerte no tuve que esperar mucho y para mi sorpresa llegamos a una de las fundaciones de su familia.

_ ¿Qué hacemos aquí?

_ Pensé en que me podías ayudar.

_ ¿En qué específicamente necesitas de mi ayuda? No soy bueno relacionándome con otras personas, creí que ya lo sabías, por eso es que eres mi psicólogo.

Él suelta una de esas risitas que me tranquilizan. _ Pues sé que no eres muy sociable, pero si eres bueno con la escritura y las historias. En esta fundación hay un grupo de diez niños de entre tres y cinco años y creí que podrías ayudar a hacer una obra de teatro apta para ellos.

_ No soy bueno con los niños.

_ ¿Podrías al menos intentarlo? - Me pide sonriendo.

_ No te garantizo que saldrá algo bueno de esto, pero lo intentaré.