Capítulo 13

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Suspiró de alivio al tomar la cintura del chico, no hubiera sido lindo el fuerte golpe en la cabeza que se hubiera dado, lo miró y este estaba sonrojado mirando de una manera extraña sus labios, él inevitablemente imitó la acción también, estaba realmente agradecido por la situación a la que habían llegado, contemplar esos labios era una cosa maravillosa ,llegaban a ser casi tan rojos como una manzana y él quería probarlos, sintió como el chico se sostenía de uno de sus brazos y esa era su señal para detenerse, con cuidado lo bajó al suelo.

- Regresemos adentro, él puede venir en cualquier momento.

Mientras entraban a la casa él se arrepentía más por haberlo alejado , quería morder aquellos labios, pero mentalmente se repetía que hizo lo correcto , no sería bueno meterse sentimentalmente con la persona que secuestraste, miró al chico y este estaba decaído quizá porque su pequeña libertad había terminado.

- Bien, me encerraré arriba, supongo.

No quería verlo, no después de que lo rechazara olímpicamente, se había sentido asustado por desear con tanta intensidad que aquellos labios rosaran los suyos, había deseado tanto el ser besado que no vio que el otro no quería besarlo, quizá se había equivocado y aquel chico era heterosexual, estaba decepcionado de sí mismo, decepcionado y avergonzado, ahora mismo prefería estar encerrado en esas cuatro paredes que con aquel chico grande y bonitos labios.

- No te vayas , es decir ¿ puedes ayudarme a limpiar?

- Creí que en cualquier momento vendría tu padre.

- Ya pensaremos en algo cuando venga.

Dudando asintió.


___

Nunca creyó que limpiar sería tan divertido, el chico grande había tropezado por el piso mojado y se llevó el balde lleno de agua con él inundando todo el piso y ahora burbujas llenaban la habitación, aún riéndose se acercó al chico grande y le ofreció su mano para levantarse.

- Eres demasiado torpe.

- Lo dice  el que atoró su pie en el balde.

Ambos rompieron en carcajadas y se pusieron a limpiar el nuevo desastre, dos horas más de arduo aseo los había dejado con hambre y lo único que su padre había comprado eran paquetes de ramen. 


Hay una tormenta

Que no se nota desde afuera

Sé que por dentro estás en guerra

Aunque en las fotos no se ve

Si hay una manera

De apagar todos tus miedos...


Se paró en el umbral de la puerta en silencio, había regresado de ordenar los útiles de aseo, no quería interrumpir, el chico grande tenía una hermosa voz , sintió que su estúpido apego a él estaba incrementándose y algo cosquillaba su estómago, se dijo que era por la imagen de un chico guapo cocinando y cantando tan natural como si se encontrara en su habitad, se dijo que solo era porque era algo digno de ver, pero entonces cual era la excusa para que él deseara ser apresado en aquellos brazos y dormirse escuchando aquella hermosa voz.

- ¿No has pensado en convertirte en cantante?

Casi río por el respingo que dio, y un nuevo adjetivo para aquel chico se le formulaba, adorable.

- Es mi sueño, pero como ves es imposible, ya sabes, mi padre...

- Al diablo lo que piense tu padre , eres demasiado bueno cantando.

- Gracias, supongo.

La comida transcurrió en un silencio cómodo, ambos estaban muy hambrientos como para decir cualquier cosa, y así hubiesen querido hablar no tenían ningún tema de conversación, prácticamente habían hablado de sus vidas y lo que pasó en ellas durante su estadía en aquel horrible sótano.

___

Un estruendo en la puerta fue lo que le hizo saltar de la cama, se preguntaba si alguna vez su padre dejaría de tratar así a la pobre puerta, miró al chico a su costado, este le sonreía nervioso, si su padre llegaba tres minutos antes los habría encontrado lavando platos, pudo escuchar el grito que su padre le había dado y sin más se encaminó hacia abajo.

- Tómale unas fotos al chico, quieren pruebas de que este bien.

Alzó sus manos rápidamente para poder atrapar la cámara que su padre le había tirado, subió las escaleras casi corriendo, el chico se paró al verlo.

- Quieren fotos tuyas.

El chico solo asintió, en cuanto vio la cámara apuntarle sonrió e hizo un signo de paz con la manos, hubiera reído en estruendosas carcajadas de no ser porque su padre lo esperaba abajo, negando con la cabeza le sonrió al chico.

- Eres imposible.

- Lo sé.

La foto se imprimió, pero estaba de más decir que no le daría a su padre una foto del chico viéndose extremadamente cómodo, el otro pareció comprender y se puso serio, Hyunwoo le tomó una foto de perfil izquierdo y derecho y otra frontal, cuando terminó el chico le estaba sonriendo nuevamente.

- Me siento como un ladrón.

Hyunwoo solo se encogió de hombros y salió de la habitación, antes de bajar las gradas se guardó la foto del chico sonriente en el bolsillo, después la guardaría en la pequeña caja de recuerdos que tenía, estaba por pisar el primer escalón cuando escuchó la voz de su padre.

- No salió como quería...él quería pagarme menos de lo que ofreció tuve que matarlo...aún puedo sacarle provecho al mocoso Yoo... aún si maté a su padre... sabes que no entro en esas mierdas sentimentales...de todos modos aquel señor no era un santo...bueno mandar a secuestrar a tu propio hijo no es una acción que te lleve al cielo...ya te dije que no fue por la mierda sentimental...Hyunwoo no hará nada...él me tiene demasiado miedo...

No queriendo escuchar más bajó las gradas pisando estas con demasiada fuerza.







★彡𝙏𝙝𝙚 𝙡𝙞𝙛𝙚 𝙞𝙨 𝙖 𝙠𝙞𝙙 彡★[SHOWKI]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora