Las chicas se fueron corriendo a donde se escuchó el grito.
Al llegar a la sala donde se encontraba la fuente del grito, ellas también gritaron.
Una vieja con una cara tan arrugada que no se veían sus ojos, y un pelo que en vez de gris era blanco, yacía tirada en el suelo de la sala de baile.
- ¿Quién es? – Dijo Mariana
- No puede ser... - Dijo Emma tirándose de rodillas al suelo. Con sus pequeñas manos agarró esa cabeza. – Esa nariz solo puede ser de alguien- Hizo una pausa y se giró a Mariana, que tenía cara de "¿Quién es?". Luego, se giró a la vieja -.Responde, responde, soy yo, tu Gugga – Guggi.... – Se puso a llorar – Por *snif* favor, responde... *snif*
Mariana se dio cuenta de quién era, y se fue corriendo a pedir ayuda... La Sra. Waylas se veía de 123... Pero, ¿Cómo?
Cuando vio a Lucía, le dijo que viniera, le explico y luego la llevo.
Al llegar al cuarto, Lucía agarró en brazos a la débil mujer. Mariana la siguió, pero Emma se quedó atrás. Cuando Mariana se dio cuenta, se dio la vuelta y fue con su amiga.
- Emma... ¿Por qué no vienes? – Dijo, preocupada, Mariana
- Yo... Es que... Veras, es que... ¡Estoy en shock!
- Bues, si quieres venir no te vas a morir... ¿Sabes?
Emma no respondió, solo fue con la mirada baja a afuera del cuarto, lo que sorprendió a Mariana.
Más tarde, la Sra. Waylas despertó y pidió que le trajeran a su Gugga – Guggi, lo que emociono a Emma. Mariana acompaño a su amiga y se sorprendió de como peleaban con una sonrisa en los labios....
Más tarde, Emma pareció volver a ser la de siempre.... Pero no les puedo mentir a lectores, así que les diré que Emma estaba 99% mejor... Había un triste y lejano 1% que seguía siendo la chica triste en shock... Pero Mariana no se daba cuenta, así que no dudó en seguir la investigación enseguida.
- Emma, siento que casi ya podemos descubrir el ladrón... Preciso tu ayuda – Le dijo Mariana por la tarde
- ¿Casi ya? Yo creo que es Ya casi....
- Oye, sé que puedo llegar a hablar raro... Pero debemos hacer esto antes de pasado mañana, así que o lo resolvemos ya o no sé qué hare.
- Oh, sí, claro, debemos resolver esto...
Así que ambas recordaron lo que cada uno de los sospechosos dijo.
Emma confirmo la coartada de César, Geo y Wendy porque cenó muchísimo dado que le trajeron 25 platillos diferentes, y se notaba que llevo mucho tiempo hacerse.
La coartada de Fransuá se confirmó sola, dado que llego un hombre preguntando si la carta que le enviaron la escribió una bestia, dado que estaba escrito baile con v.
Lo de Marisol se confirmó cuando uno de los que trabajaba en la cocina dijo que
Marisol de seguro había lavado porque todo estaba reluciendo por la mañana.
Solo faltaba la 1º en la lista de sospechas: Lucía.
Era difícil lo de su cuartada, dado que nadie la vio limpiar y era imposible decir si paso o no.... Bueno, si tienes como amiga a una rarita, es fácil todo.
Mariana no sabía que hacer.... Hasta que Emma le dijo
-En uno de mis cumpleaños, quería descubrir que sucio podría estar un mueble si no se lo limpiaba en una semana, así que pedí para mi cumpleaños esos aparatos que apretabas un botón, escaneaba el suelo y te decía que sucio podía estar. Mi abuela me lo regalo y.... Nunca lo llegue a usar dado que la gente siempre está limpiando mi cuarto... Pero si mi maquina nos muestra que este suelo está sucio, desmiente la coartada de Lucía
- Emma, eres rara y tienes cosas que otros ni saben cómo funciona.... ¡Eres súper genial! – Dijo entre risas Mariana, y Emma le respondió con más risas aún.
Luego de que Emma trajo su aparato, descubrieron que ese suelo definitivamente no fue limpiado en meses.... Lucía debía ser la ladrona.
TAN TAN TAN... Igual no se ilusionen eh?
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EL MISTERIO DEL TÍTERE QUE ESTABA EN EL SÓTANO DE LA SRA. WAYLAS
General FictionLuego de que una tormenta derribe el trabajo de su madre, Mariana acompaña a su madre a su nuevo trabajo: Limpiar la mansión de la mujer más vieja del pueblo: La mansión de la Sra. Waylas. Ahí, la chica conoce a Emma, la nieta de la viejecita que vi...