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Abrí mis ojos para encontrarme con el techo de mi habitación. Los fuertes rayos del sol entraban por la gran ventana. Giré sobre la cama y estaba sola. Me senté en la cama y tomé con firmeza las sábanas.
-¿Taehyung?- Le llamé.
Nadie contestó a mis llamadas. Lentamente, me puse de pie. Abrí la puerta de la habitación y asomé mi cabeza. No había nadie en la cocina. Y tampoco en el salón y el baño. ¿Dónde está Taehyung? Volví a la habitación. Me senté en la cama para pensar un poco. ¿Se habrá ido? ¿No volveré a verle? Mis ojos se llenaron de lágrimas.
-Se fue- Susurré y miré hacia la ventana.
Cerré los ojos con fuerza y recordé la noche más maravillosa de toda mi vida. Una noche inolvidable. Sus besos, sus caricias, su respiración mezclándose con la mía. Sentí un gran mareo y unas tremendas ganas de vomitar. Corrí al baño. Es como si algo me hubiese sentado mal. me puse de pie y me lavé los dientes. Me miré en el espejo. Toda una vida por delante, pero ahora no puedo seguir sin él. ¿Qué ha hecho conmigo? Otra vez ese mareo. Cerré los ojos y me apoyé en el lavabo. Cuando al fin el mareo pasó, me centré bien. No podía hacer nada, solo esperar a que él volviese. Jimin entró al apartamento. Me tiré a sus brazos en busca de un poco de consuelo.
-¿Qué ha pasado?- Preguntó preocupado.
-Solo necesito que me abraces- Dije rompiendo en llanto.
-Carina...-Contestó extrañada- Tranquila, no voy a dejarte sola- Dijo abrazándome más fuerte.
[...]
Me dejé caer en la cama. Mi vida había vuelto a ser la de antes. Bueno, no del todo. Volví al trabajo, a la rutina y a los problemas. Pero ni rastro de él. Hay a veces en las que creo que estoy completamente loca y que él fue fruto de mi imaginación. Tres largas semanas han pasado desde que se fue. Sentí una lágrima cayendo por mi mejilla. No he dejado de llorar. Siempre que estoy sola, llora.
Jimin quiso volver a vivir conmigo, pero me negué. Dice que teme por mi salud. Es un poco extremista. Pero desde que Taehyung se fue, no he dejado de estar enferma. Tengo náuseas, vómitos, dolores de cabeza muy fuertes, mareos y hasta un poco de fiebre. No quiero ir al médico, es solo perder el tiempo. Me puse de pie y salí de la habitación para buscar un vaso de agua. Un profundo escalofrío, recorrió mi cuerpo. Detuve mis pasos en la puerta. Era la misma sensación de...
-Lo siento...-Dijo provocando que mi corazón casi se me saliera de su lugar.
-Suga- Dije sin poder creerlo.
-Solo necesito saber una cosa- Dijo poniendo una mano sobre mi barriga. Le miré extrañada.
-¿Dónde está Taehyung?- Pregunté rápidamente.
-No puedo decírtelo- Dijo. Sus ojos se humedecieron.
-Por favor Suga, necesito verle. Necesito saber de él- Dije mientras un nudo se formaba en mí.
Se alejó perturbado de mí. Le miré bien ¿Qué hacía aquí? ¿Dónde está Taehyung? Me miró fijamente a los ojos, provocando más frío en mí. Dijo algo que no entendí. Creo que era otro idioma.
-¿Qué?- Pregunté.
-Jin quiere tu vida, por la eternidad de Taehyung- Dijo. Le miré sorprendida.
-¿A qué te refieres?- Pregunté con la voz temblorosa.
-Jin quiere tu vida a cambio de la de Taehyung.
-¿Va a morir?- Pregunté mientras las lágrimas empezaban a formarse en sus ojos.
-Si no hacemos lo que él quiere, creo que sí...
Esto no podía estar pasando. No era posible. Yo no puedo permitir que Taehyung muera, no, no puedo permitirlo. Si Dios quiere mi vida por la de Taehyung, no voy a negarme. Mi vida no vale nada, sin Kim Taehyung no vale nada.
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