Te Prometo... 💞📗 LIBRO 1 y 2

Capítulo 2.

Iván estaba atento a la lectura de su libro, después de haber entregado su tarea se puso a leer. Su libro se titulaba "25 razones para ser optimista", él estaba en el capítulo trece que hablaba sobre una de las razones más importantes por lo que las personas deben ser optimista, "la familia", y para él, esto era lo más importante, su familia era todo para él, en especial su prima, Vanesa, que, aunque a veces ella lo molestaba, él la quería...

- Oye Iván, mira quién está saliendo de clases – dijo Andrei, señalando a Isabel cuando salía del aula con el profesor.

- ¿Qué tiene? – dijo, marcando el lugar donde se quedó en el libro.

- No te preguntas ¿por qué el profesor la llevó donde el director?

- Seguro se metió en problemas o algo así, ¿No notaste que no hizo sus deberes? – mencionó, poco interesado por el tema– de todas formas, no me interesa, hay muchas razones por las que podría ir a la dirección.

- Tienes razón – dijo el amigo pelirrojo algo decepcionado volviendo a sus quehaceres.

Iván miró de reojo una vez más la puerta, de todas las virtudes y defectos de Iván, ser curioso era su principal característica y ahora su amigo le metió la curiosidad en la cabeza. Eso le pasa por ser tan curioso, pero aun así se preguntaba, ¿por qué fue donde el director?

Muchos minutos después, casi al finalizar el horario de la materia, Isabel vuelve al salón, Iván notó que ella estaba triste y con la mirada perdida; ver eso, a Iván le provocó más curiosidad por saber qué le pasó a esa chica, sin embargo, pensaba que nunca sabría la respuesta.

Pasaron las clases y llegó el recreo, Iván y Andrei salieron del aula, y en el pasillo se encontraron con una amiga del curso del frente, ella era Katherine, ambos chicos fueron a saludarla.

- ¡Hola Katherine! – saludó Iván con su optimismo típico.

- Hola loca – saludó Andrei, que siempre molestaba a Katherine por sus gustos extravagantes y exóticos.

- Hola Iván – saludó calmadamente, luego se acercó a Andrei y con fuerza lo pellizcó – hola mocoso, ¡¿cuántas veces te dije que no me llamaras "loca"?!

- Treinta y cinco... – mencionó retorciéndose de dolor por el pellizco.

- Y ¡¿cuándo dejarás de decirme "loca"?! – dijo apretando más el pellizco en el brazo del pelirrojo.

- Ya basta chicos – dijo Iván interrumpiendo la escena entre Andrei y Katherine.

- Ella comenzó – dijo Andrei escudándose detrás de Iván – está loca.

- Quieres otro pellizco, ¿verdad? – le respondió Katherine fulminándolo con la mirada.

- Bueno, bueno, mejor vamos a comer – Iván separó a ambos poniéndose él en medio de ellos.

Los tres jóvenes bajaron las escaleras hasta el patio donde estaban todos jugando y haciendo diversas actividades, al frente del patio había una sala grande de paredes de cristal de gran espesor, era una estructura magnífica y por dentro el suelo y las mesas eran de madera de pino, este era el comedor. Los tres amigos entraron y se sentaron en una mesa.

- Bueno chicos, ¿qué trajeron de comer? – preguntó Iván sacando su lonchera que contenía un sándwich de pollo y una manzana.

- Yo traje una bebida de soda y un sándwich de atún – dijo el pelirrojo emocionado.