1.

22.3K 894 1.1K
                                    

Día 1
16 de diciembre del 2011

•HARRY•

—¿Que mierda?— susurra la persona con la que me tropecé. Es hombre aunque debo admitir que su voz es bastante aguda.

—P-perdón n-no te vi.— murmuro. Y la verdad es que no veo NADA. —¿Quien eres y donde estamos?— pregunto asustado.

—¿Quien eres tú y que hago yo aquí?— Voltea a verme y lo único que logro ver son sus ojos color azul intenso.

—Soy Harry y no tengo ni la menor idea de donde estamos. No recuerdo nada.

—Espera. Yo si.— Dice mientras se para. —Ayer estaba saliendo de mi trabajo y mientras me dirigía a mi auto alguien llegó y- ¡ESTAMOS SECUESTRADOS! ¡HARRY ESTAMOS SECUESTRADOS MALDITA SEA!

En eso se abre una puerta, revelando un poco de luz. Me cega un poco así que pongo mi brazo sobre mis ojos.

—Veo que ya despertaron.— Entra un hombre -supongo que de unos 45 años- a la habitación donde estábamos yo y el chico que no me ha dicho su nombre aún. —Esto va a ser su hogar mientras sus queridos padres me paguen algunas cositas.— El viejo trae una estupida sonrisa sarcástica.

¿Como mis padres van a pagarle algo a este señor si apenas tienen para mantenerme a mi y a mi hermana?

—No les voy a hacer nada chicos no se asusten,— ríe —claro, amenos que hagan algo que no deben como la estupidez de tratar de escapar.— Alza su tono de voz.

—¿Tienen alguna pregunta?

Negamos con la cabeza.

—Esta bien. En 5 minutos empezará a amanecer, así tendrán luz. Hay un cuarto a lado de este con dos mujeres. No los puse a todos juntos porque no quería que hicieran cosas desagradables en esta casa.- hace una mueca.

—No hay reloj pero a las 7 de la mañana, 3 de la tarde y 8 de la noche les pasaran por esta puerta su alimento diario y créanme que me da lo mismo si les gusta o no. Enseguida les traerán cosas de aseo personal porque no quiero que apesten el lugar. Por esa misma razón hay una cubeta donde podrán orinar y otra cubeta la cual llenaran de agua para poderse lavar. Me retiro.— Y se va, cerrando la puerta detrás de el.

Me siento frustrado. ¿Como carajos voy a salir de este lugar? Aparte estoy con un tipo que ni si quiera se su maldito nombre.

—¿Como te llamas?— pregunto algo estresado.

—Louis y por favor no me hables.

Lo que me faltaba. Este tal Louis no es amigable.

—Ni que quisiera hablarte.

La luz comenzó a salir y así logré ver mejor el basurero en el que estoy.

No hay camas, solo UNA cobija. Eso significa que tendré que compartirla si es que no quiero pasar frío.

Comienzo a caminar por la habitación. Louis esta sentado con las piernas dobladas y las manos en su cara, codos en las rodillas. Veo las cubetas a las que se refería el secuestrador. Trato de buscar alguna salida pero no hay, lo único que hay es una ventana mas pequeña que mi cara, por ahí se filtra la luz y esta cubierta con una rejilla. No. No podré salir de aquí.

De pronto se abre la pequeña puerta que estaba en la parte inferior de la puerta normal y dejan dos platos con alguna fruta. Mínimo me gusta la fruta. Me acerco y tomo uno de los dos.

—Oye ya dejaron tu desayuno por si querías saber.

Louis me voltea a ver y se para por su plato. Comimos los dos en silencio. Al acabar trato de abrir la puerta por la cual nos dieron la fruta minutos antes pero no se puedo abrir. Supongo que solo se abre del otro lado. Dejo el plato en el suelo y me voy a acostar en la cobija.

¿Que voy a hacer ahora?

***

—Ey despiértate trajeron la comida.— escucho decir a Louis.

Dios, ¿cuando me dormí? Abro los ojos y ahí esta parado con los dos platos en la mano. Wow me lo trajo. Le agradezco y lo agarro. Por lo menos me despertó.

—Como sea,— se va hasta la otra esquina y comienza a comer.

Ruedo los ojos y miro mi plato, son fideos. Los pruebo sin ganas y de pronto recuerdo.

Gracias por todo Barbara, nos vemos mañana.

Salí de la panadería donde trabajo y me dirigí a mi casa. No tenía carro y para ser honesto no necesitaba uno. Mi casa estaba cerca de mi escuela y mi trabajo, con eso tengo.

Seguí caminando ya estaba oscureciendo. En eso sentí como alguien me tocaba el hombro voltee y recibí un puñetazo en mi abdomen seguido de un pañuelo colocado en mi nariz haciéndome caer en un profundo sueño.

Dejo caer el plato de fideos y me pongo a llorar como niña. Me acuesto de nuevo en la cobija y dejo que salgan todas mis lágrimas. Me da igual que el idiota de Louis me vea. Estoy harto y solo llevo un puto día aquí encerrado.

¿Como estarán mis papás? Mierda. Mi mamá a de estar destrozada. Toco el bolsillo de mi pantalón y afirmo que mi celular no esta. Dejo salir un grito frustrado. Necesito salir de aquí ahora.

Me paro rápidamente y me dirijo hacia la ventana. Empiezo a jalar con todas mis fuerzas la estupida reja pero no se mueve nada. ABSOLUTAMENTE NADA.

Si me iban a secuestrar mínimo me hubiera tocado alguien con quien pudiera hablar no con un idiota amargado. Si Louis es un idiota y sé que no llevo ni un día con el pero es demasiado desagradable para mi gusto.

—¿Solo llevamos un día aquí y te pones así? No te voy a aguantar ni una semana entonces..

No, no acaba de decir eso el idota ese. Lo volteo a ver incrédulo —¡¿Perdón?!—

—Si. No se tú pero mi padre tiene bastante dinero y no creo que me deje aquí mucho tiempo.

—Eres un idiota ¿sabias? Un I-DIO-TA con i mayúscula. ¡Ya veo porque eres así maldito millonario engreído!

Se para y camina hacía mi. —Llámame como quieras niño pobre. Quien se va a quedar en este basurero hasta morir eres tú, no yo.— da medía vuelta y se va.

Idiota maldito Louis idiota. Idiota idiota idiota. Las lagrimas no dejan de salir de desesperación.

Así pasaron las horas, yo llorando y Louis no sé y no me importa lo que estuvo haciendo.

Se abre por tercera vez en el día la mini puerta y dejan nuestra cena. La voy a coger al igual que él. Nos volteamos a ver con disgusto y nos sentamos cada quien en su esquina sin dirigirnos ni una sola palabra.

Por fin llega la noche, no espero ni un minuto más y me voy a acostar sobre la fría y pequeña cobija.

Me estaba quedando dormido cuando volvieron a abrir la mini puerta. Con la poca luz que se filtro logro ver una cesta con artículos de aseo personal. Louis va por ellos y regresa al otro extremo del cuarto.

Que idiota quepor no compartir cobija conmigo se muera de frío.

----

1er capitulo listo!
Tengo muchas ideas planeadas para esta fan fic espero que les gusten tanto como a mi!! Voten(:

Secuestro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora