A mi llámame...

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¿Sabes como iniciar una gran historia? Empieza con un "Mi nombre es..., pero me gustaría que me llamen ..." 

Aún pienso en ese día, como si fuera ayer, aunque pensándolo, solo han pasado dos días, aún me pregunto ¿Por qué debió pasar un viernes? ¿Acaso no es suficiente con el caos de ser en especifico un viernes? ¿Por qué elegir ese día para presentarse? Sabiendo bien que ya llevamos medio año en clases ya. Difícil de comprender. ¿Por que llevaba ese raro abrigo, estando en pleno verano? ¿Y ese desastre de trenzas? Digo, no le quedan nada mal, es más, ¿Por que un par de trenzas mal hechas se le ve tan bien? Es que no logro comprender, además, ¿Por que llegó con la cara sucia de tierra? Y me parece que sonreía de la forma donde demuestra su inocencia. ¿Acaso no sabia que tenia la cara sucia? 

¡Rayos! ¿Y si no lo sabía? Y yo me quede sentado, callado, detallando cada aspecto de ella, y viendo su cara sucia de tierra, y no dije nada, soy una mala persona, aquí viendo el techo de mi habitación, pensando en algo que pasó hace dos días, y es que no logro hallar respuesta a eso, ¿Por que me intriga tanto? No creo ser capaz de seguir en un club como ese, no se mismo ni porque me inscribí.

Ninguno de mis compañeros esta conmigo, estoy alrededor de 20 personas que en mi vida había visto su rostro. Solo me llamó la atención que era sobre un proyecto de química, y pues nunca esta demás probar cosas nuevas, y mientras más me llama la atención, más me intriga, y cada vez quiero saber más y más, supongo que en la próxima vez que nos reunamos y me toque presentar eso diré. ¡Decidido! Eso diré, voy a procurar no olvidar mi terrible justificativo de la típica pregunta de "¿Por que decidiste entrar en este proyecto?" Que tedioso dar explicaciones de lo cual no tengo uso de razón aparente, o antes no tenía una razón por la cual entrar, la respuesta sencilla que daría sería "Entre porque si" y ya. 

Fui con el pensamiento de pasar el tiempo y tener mis calificaciones, sin hacer mucho, pero una vez que entre me di cuenta de varias cosas:

1. Mayoría de quienes estábamos ahí entramos "porque si" 

2. Ni el profesor estaba capacitado para el proyecto de "ciencias"

3. Entre con el pensamiento de estar ahí y no hacer nada.

4. Mayoría de quienes estábamos ahí, pertenecemos al circulo social de los "raros" 

5. No íbamos a aprender nada en ese proyecto. Lo cual me hace pensar que tendré mucho tiempo libre.

6. Tendría que pasar ese año compartiendo ese espacio con desconocidos, lo cual me obliga a al menos saludar así sea al principio de la clase. 

7. Salí de la clase, llegue a mi casa y hallé una razón por las cuales motivarme a asistir con un poquito de entusiasmo. 

8. Nunca me había intrigado tanto una persona.

9. Todo mi espacio alrededor se detuvo, para poner mi absoluta atención en la presentación de la niña con trenzas raras y la cara sucia de tierra. 

10. No recuerdo su nombre. 

Y es que el no recordar su nombre, pero el recordar como vestía e incluso como se presentó, me da la impresión que su presencia me distrajo, de lo que se supone, que era esencial en esa clase en particular. 

Su nombre. Su nombre. Su nombre. 

Asistiré el próximo viernes, haré mi presentación como lo he ensayado, e intentaré oír sutilmente si alguien la llama, así sabré su nombre. No se, ni porque pongo tanto esfuerzo en dar una buena presentación. ¿Por qué quiero hacer eso? Ah, las buenas impresiones, un definitivo fastidio. Me pregunto como les fue a mis demás compañeros en sus clases, creo que bien. Al final, cada quien escogió junto con sus amigos, y tal, con el típico "Para no sentirme solo/a"  

¿Quién se distrae viendo una presentación donde lo que menos haces es escuchar? ¡Ni su nombre! Es muy curioso. Nunca antes había visto a esa niña en mi vida, pero, no es tan raro, casi no presto atención a mi alrededor. Suelo salir al recreo, con dos compañeros, que son lo más parecido a forjar una amistad, ellos me dicen que soy su amigo, sin embargo, no lo siento así. Cada día me presentan a personas que son amigos de ellos, para "pasar juntos el recreo" en grupo, pero mi atención está en otros pensamientos, como "Ya quiero ir a mi casa" "¿Hice la tarea de Literatura?" "¿Por qué siento que me miran?""¿Se ríen de mí?" Y cosas que desquician mi mente, mis compañeros se han acostumbrado a que no preste atención a las conversaciones, a tal punto que se limitan con las preguntas sobre que opino con respecto a los problemas o chismes del colegio. Las pocas veces que preguntan mi opinión, ellos han sabido atinar a temas de mi interés. A pesar, de yo no tener temas en especifico, solo si me llama la atención, presto atención y dejo de lado el torturarme por tantas preguntas sin respuestas. 

Y cuando menos me di cuenta, me encontraba en el techo de mi casa, junto con mi hermano, acostados, sin importar la suciedad que nos invadía en cada poro de nuestra piel y en cada centímetro de nuestra ropa, nada importaba. Nada más importante que observar el cielo.

- ¿Es la osa mayor? ...

Continuará...




Para "Pequeño Hobbit" 

Si el cielo alguna vez hablara, diría toda la verdad, y dejarían de llamarnos "enfermos". Tú oíste, por ti sigo enferma y no quiero hallar la cura para esto, toda mi dolencia me permite amarte de la forma más pura y sacrificada que existe, te diré todos mis pecados, entregándote mi vida entera, somos únicamente seres de luz radiante, somos el mar intranquilo, naufragamos en cada palabra, en cada beso, te tengo en un santuario de tantos pensamientos dedicados hacia ti, no quiero curarme, si eso significa seguir amándote, es aquí cuando el ritual empieza, un desafío agrio y dulce, debemos dejar este escenario terrenal triste, y en décadas conseguir la paz, sigo construyendo este santuario llamado "Tú". Permíteme entregarte mi vida entera, y ser tu fiel creyente de cada palabra proveniente de tus dulces labios.

¿POR QUÉ TU BAILE ES MEJOR QUE EL MIO?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora