100 años. |Joel Pimentel.| Terminada.✔|

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 36: ᴊᴏᴇʀɪᴄᴋ ᴇʀᴀ ʀᴇᴀʟ ᴀɴᴛᴇs ᴅᴇ ǫᴜᴇ ᴛᴜ ʟʟᴇɢᴀʀᴀs

Narra Joel:

Al escucharla decir que si una sonrisa apareció en mi rostro.

- Quieres bailar? -Susurre en su oido, ella sonrió mientras asentía.

La tome de la mano mientras nos colocabamos en el centro y comenzamos a bailar.

- Te amo tanto -Pegue mi frente con la de ella.-

- Te amo mucho más -Respondió y me beso.

Le sonreí y tome de su mano para poder dejar un beso en ella, ella sonrió y salimos de la pista para poder caminar hasta la mesa.

- Me siento tan feliz que al fin seas mi novia - Llame su atención con una sonrisa.

- Yo también estoy muy feliz -Me volteo a ver y sonrió.

Llego un mesero y nos sirvió la cena, cenamos entre risas y anécdotas, ya se estaba haciendo de noche así que entramos a la cabaña.

- Bueno yo los dejo, iré a bañarme babys -Ella sonrió mientras caminaba a la habitación donde dormiriamos.

Me quede un rato con los chicos, hasta que entre a la habitación y ella se encontraba acostada.

- ¿No puedes dormir? -Dije observando como se movía, ella abrió los ojos y se sentó en la cama.

- No -Hizo un pequeño puchero.

- Iré a bañarme, ahorita regreso -Me acerque a ella y bese su frente.

- Quedate así, quiero que ya te acuestes conmigo y que me abraces.

- Ahorita vengo, no tardaré lo prometo -Le sonreí y ella asintió con un puchero, entre al baño y me duche coloque un short y sali, ella me miro y bostezo.

Sacudi mi cabello y me acoste a lado de ella, ella se acostó en mi pecho y sonrió.

- Buenas noches mi amor -Susurro.

- Buenas noches princesa -Bese su cabeza y comencé a acariciar su cabello, espere que ella se durmiera después de unos minutos su respiración se volvió tranquila señal que ya se había quedado dormida.

Cerre mis ojos y caí en un profundo sueño.

Narra Romina:

Desperté por los rayos del sol y a mi lado estaba vacío, busque a Joel con la mirada pero no lo encontré.

¿Quizás fue un sueño? Suspire un poco y camine hasta el baño, me duche y coloque un short blanco con una blusa verde y mis tenis blancos, cepille mi cabello y segundos después entra Joel.

- Buenos días mi amor -Se acerco a mi con una pequeña sonrisa y besa mis labios.

- Buenos días mi vida ¿Donde estabas? -Saque mi labio inferior.

- Fui a comprar el desayuno, ya sabes nadie aquí sabe cocinar. -Beso mi hombro.

- Yo ya estoy aprendiendo

- Pues, echarle mucha sal, o no echarle  nada de sal o dejar la carne cruda eso es aprender? -Alzó una ceja.

- ¡Hey! -Entre cerre los ojos.- no dudes de mi talento como chef. -Puse una mano en mi en mi pecho haciendome la indignada.