Momentos en el tiempo

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Naruto miró a Itachi por el rabillo del ojo. El Uchiha parecía estar perdido en sus pensamientos. Naruto notó que había estado haciendo eso últimamente. Silenciosamente sacó el brócoli de su plato e intentó ponerlo sutilmente en su bolsillo, confiando en que podría salirse con la suya.

"Naruto"

"¿Sí papi?" Era la imagen de la dulce inocencia.

Itachi se giró para mirarlo y sonrió divertido. "Buen intento. Pero tienes que comer tus verduras".

Hizo un puchero y volvió a poner la verdura desagradable en su plato. "Pero sabe tan asqueroso". Arrugó la nariz con disgusto y era demasiado lindo.

"No importa, son buenos para ti. Y no tienen un sabor desagradable".

"Ellos si." Naruto parecía absolutamente convencido de su creencia. "Lo intentas."

"Ya me comí el mío". Le dijo al niño pacientemente.

"Uh-huh, seguro que lo hiciste", él entrecerró los ojos sospechosamente.

Itachi dudó por un segundo. Tomó la bandeja de Naruto y se comió el brócoli. "¿Allí, feliz?"

"¿Qué pasa con el apio?"

"¿Te refieres al apio?" Itachi preguntó con una sonrisa.

Naruto asintió, "Sí, apio, a eso me refería".

Durante los siguientes minutos hizo que Itachi probara la mayoría de las verduras por asco. Cuando casi todos los verdes fueron retirados de su plato, Naruto lo retiró con una sonrisa de satisfacción. Itachi lo vio terminar su comida con una pequeña sonrisa en su rostro.

Itachi sabía que Naruto lo había "manipulado" para que comiera la mayoría de sus verduras. Pero simplemente no podía obligarse a aplastar las esperanzas del niño al dejar que supiera lo que el niño estaba pensando.

Nunca dejé que Sasuke me empujara tanto. Itachi se rio en voz baja para sí mismo. Miró a Naruto empujando alegremente la comida en su boca, haciendo que sus mejillas se vieran extremadamente hinchadas. Era demasiado adorable. Sin duda lo extrañaré mucho cuando se haya ido.

Itachi mantuvo un exterior fresco, poco dispuesto a alertar a su hijo de su tristeza. Seguramente traería lágrimas a los ojos del niño. Era un niño sensible. Y una cosa que Itachi había descubierto era que no podía soportar la vista de Naruto llorando. Hizo que su interior se torciera incómodamente.

Naruto comenzó a parlotear una vez que terminó. Itachi salió de su humor huraño y silencioso y le dio a su hijo la atención que tanto amaba de su padre.

¡Chapoteo!

Itachi observó a Naruto correr y saltar en otro charco, sonriendo divertido.

¡Chapoteo!

Naruto rio encantado. Le encantaba el sonido que se hacía cuando saltaba a un charco. ¡Fue tan divertido!

¡Chapoteo!

"Papi, vamos, tú también", Naruto corrió hacia él y le agarró la mano.

Itachi sacudió la cabeza, "No, Naruto, estoy bien. Sigue adelante".

"Aw, bonita por favor?" Hizo sus adorables ojos de cachorro sabiendo muy bien que era la debilidad del hombre.

Itachi parecía ligeramente tenso. Miró discretamente a su alrededor para asegurarse de que no había nadie allí. Puede que sea un malvado villano disfrazado, pero todavía tenía su orgullo, muchas gracias. Sin mencionar a los otros miembros de Akatsuki, su reputación iba a sufrir inmensamente si lo veían saltar en charcos, jugar con un niño pequeño, incluso si era su deber cuidarlo y mantenerlo entretenido.

Estaban en las afueras de la aldea donde a los Akatsuki a menudo les gustaba entrenar sin ser bombardeados constantemente en una lluvia. Itachi se despidió en silencio de parte de su dignidad y aceptó: "Está bien, vámonos".

"¡Si!" Naruto sonrió y lo llevó a otro charco.

Aquí va nada. Saltó al charco con su hijo risueño.