En la bella ciudad Carmín, lugar de puertos y comercio marítimo, se encontraba en su esplendor en el atardecer de aquella tarde de verano, pero no venimos a hablar de eso.Yellow, la sanadora, era conocida junto con otros tres chicos por haber salvado a la región Kanto en varias ocasiones, ella era una chica alegre y rebosante de tierna alegría, estaba enamorada de un chico llamado Red, la razón era simple, Red la salvó de un dratini cuando tenía nueve años de edad, el detalle es que Red no se da cuenta de eso y la pobre rubia empezaba a perder toda esperanza de tener una oportunidad con el. - ¿Será que el hilo rojo se equivoca? ¿Que estoy haciendo mal? -. Eran preguntas que ella se hacía constantemente.
Un día como cualquier otro, la chica decidió de una vez por todas decirle lo que siente, pero esa felicidad se fue cuando vio al chico de sus sueños besarse con su mejor amiga, Blue, ella simplemente se fue de ahí con lágrimas en los ojos, ya tenía sospechas desde que esos dos volvieron de Hoenn y esas sospechas resultaron verdad.
Destrozada, fue al puerto de ciudad Carmín, solo para llorar en silencio, aunque en el fondo sabía que Red merecía ser feliz, sin importar si no era con ella, algo muy maduro a pesar de su edad (18 años).
Green, fue el maestro de Yellow durante un tiempo, y ambos sienten respeto mutuo, es líder de gimnasio y solo pocos han podido hacerle frente, casi nunca sale debido a que a diario vienen retadores, pero esta vez ha tenido un descanso, por alguna razón quería visitar a Yellow, pero al ver que la rubia no estaba en casa, decidió volar en su Charizard y buscarla en cualquier lugar en el que esté la chica. Momentos después la vió en el muelle de ciudad Carmín pescando, cosa normal en ella, pero al acercarse, se percató de que la chica estaba decaída, así que simplemente se sentó junto a ella dándole palmadas en la espalda.
-ya no estés triste Yellow, ¿Qué pasó?-
-G-Green, no nada- decía con la cabeza abajo.
-vamos se que pasó algo, tu eres alegre, ¿Fue Red cierto?
En ese momento Yellow solo abrazó a Green y rompió en llanto, el castaño correspondió el abrazo para consolarla, al igual que le daba palmadas en la espalda para calmarla.
Unos minutos después hubo un silencio, ambos aún seguían abrazados hasta que Yellow habló.
-Green-
-dime pequeña-
-¿Crees que el hilo rojo se equivoca?-
-¿Qué quieres decir?-
-solo digo que, solo quizás, el hilo rojo del destino se equivoca, quizás fui una tonta por no decirle antes a Red lo que sentía por él, soy una idiota-
-vamos no digas eso, esa no es la Yellow que conozco, tu eres alegre y tierna, quizás el hilo si se llega a equivocar, quizás no, el punto es que todos tenemos un destino sellado, y el tuyo es ser amado por alguien, no necesariamente tiene que ser Red-
Al oír esas palabras, Yellow tuvo un leve sonrojo en sus mejillas, esas tiernas palabras de Green la calmaron e hicieron que sonriera de nuevo.
-Green, gracias, era lo único que quería escuchar-
-para eso están los amigos Yellow, por cierto, el atardecer es bastante lindo ¿No?-
-tienes razón, es bastante hermoso-
-Yellow-
-¿Si?-
-responde con sinceridad, ¿Estuviste enamorada de mí alguna vez?
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pokelemmons
RomanceRecopilación de historias pokefílicas para el disfrute del público