Novato [Eunhae]

Capítulo 17

Donghae llegó a la prisión justo a tiempo para ver a Hyukjae meterse en un automóvil.

Seong subió después a la parte trasera del auto con el ceño fruncido. Su corta estatura y su cara redonda le recordaban a Donghae a un bulldog.

Baekho cerró la puerta del auto, luego se volvió hacia Donghae mientras se acercaba. "Pensé que nos tendríamos que ir sin ti".

Donghae le ofreció una débil sonrisa. "Ese era el plan".

Baekho echó la cabeza hacia atrás y soltó una carcajada. Su largo cabello flotaba en el viento, azotando su boca. Él farfulló, luego se tocó el cabello con los dedos. "Escuché que has estado mal del estómago durante la última semana".

Donghae hizo una mueca. "Sí, no fue agradable".

"Bueno, tuviste suerte de no estar trabajando. Alguien puso una caballa en el microondas de la oficina y todo el lugar apesta".

Donghae puso una mano sobre su estómago y arrugó su rostro. "Definitivamente es algo en lo que no quiero pensar".

"No vomites en ese abrigo. Parece caro."

Donghae tuvo que llegar a la prisión para darse cuenta que llevaba el abrigo que Hyukjae le había regalado. Era demasiado tarde para regresar y cambiarse, y estaría mintiendo si dijera que no era cálido y cómodo de llevar. Debajo vestía el uniforme de oficial de prisión, la camisa blanca metida en los pantalones, la corbata fija y todos los botones en sus agujeros correctos. Se sentía como un desastre internamente, pero estaba decidido a no mostrarlo.

Baekho se aseguró el cabello en un moño y luego alzó la barbilla hacia el auto. "Hyukjae ha sido un dolor en el culo toda la semana, haciendo golpear las celdas por la noche y provocando desorden durante el día. Tiene suerte de que Kwangsu todavía lo deje ir. El dolor vuelve loco a un hombre."

Donghae se rascó la nuca y cambio el peso de un pie a otro. "No pienses que seré de mucha ayuda si comienza más tarde".

Baekho agitó la mano. "No hemos olvidado ese golpe tuyo. Además, se comportará si estás aquí".

"¿Por qué dices eso?"

"No lo hago, Sooman lo dijo. Dice que Hyukjae se porta mal cuando no estás y se calma cuando estás".

"Sooman habla pura basura", murmuró Donghae.

"Ya veremos. Estás atrás con Seong, parte del pan para un sándwich de Hyukjae ".

Donghae se movió al lado opuesto del auto y abrió la puerta. El costoso traje de Hyukjae llamó la atención de Donghae, supuso que de la misma marca que el abrigo que llevaba. Se había echado el flequillo sobre la cabeza dejando su frente al descubierto. Miraba hacia adelante, aparentemente ajeno a la puerta abierta del auto.

"Bueno, ¿vas a entrar?" Seong gruñó.

Hyukjae lanzó una mirada aburrida en dirección a Donghae, luego hizo una doble toma. Su rostro cambió totalmente, abrió mucho los ojos, se le aflojó la mandíbula y sacudió la cabeza. "No, demonios no".

Donghae tragó torpemente y se balanceó sobre sus talones.

La cara de Hyukjae se retorció de ira y él curvó su labio superior.

Donghae odiaba esa mirada siendo dirigida a él. El recuerdo de su noche en la celda todavía estaba crudo en su mente.

"Oye, cálmate", dijo Seong, agarrando el bíceps de Hyukjae.

Todas las veces que Donghae lo había visto fuera de su celda, las manos de Hyukjae habían estado aseguradas en su espalda, pero en el auto, estaban sobre su regazo. Sus manos estaban cerradas en puños, tan apretados que sus nudillos parecían sobresalir de la piel.