TXT ❥Es mejor si te evito【 YeonHyun/ YeonTae🎔】

❅Capítulo 29❅

—Tienes mucha razón, Tae.

—¿Qué? Yo no he dicho nada —a pesar de que me encontraba escribiendo había prestado atención a la conversación que tenía Kai consigo mismo.

—Voy a dejar de hacerle cariñitos a Soobin para que así se dé cuenta que soy importante para él —dijo con una sonrisa mientras se agarraba la barbilla. Yo asentí como aprobación y cuando apenas iba a opinar volvió a hablar—. Mientras tanto le seguiré diciendo mi esposo para que él no sienta tan feo mi falta de cariño.

—¿Estas menso o qué? —negué con la cabeza como desaprobación y él solo sonreía inocentemente.

Beomgyu y él otro chico al cual se me había olvidado su nombre caminaron hacia nosotros para después sentarse a lado.

—¿De qué tanto te habla Kai? —preguntó Beomgyu.

—Oh, de nada —respondí mientras seguía escribiendo. Pude sentir la presencia de alguien así que me volteé y era el otro chico—. ¿Puedo ayudarte en algo? —pregunté viéndolo a los ojos para saber si realmente estaba viendo lo que yo hacía y pude sentir sus nervios.

—¿Eh? ¿Yo? —negó con la cabeza sonriendo nerviosamente.

—¿Qué tienes en la mano? —ahora él que preguntaba era Kai.

—¡Yo no fui! —sus nervios eran más que los de hace rato. Sentí como ponía algo adentro del bolsillo de mi suéter tratando de que nadie además de mí se diese cuenta—. Debo ir al salón. Nos vemos Beomgyu —se despidió para luego salir corriendo.

—Qué extraño —volteé a ver a Beom y noté como descaradamente estaba viendo lo que escribía.

—¡Eres un metiche! —agarré la hoja de papel y la acerqué demasiado a mí para que nadie pudiese verla.

—Eres un cursi...Yeonjun es demasiado suertudo al tenerte —dijo lo último murmurando y desviando la mirada.

—¡Ah! ¿Qué es lo que te dejó en el suéter, Tae? —«¿Cómo podía tener la vista tan perfecta como para ver algo que sucedió tan rápido?».

—Nada. No hay nada en mi suéter porque nadie me puso nada —negué y guardé más lo que se encontraba en mi bolsillo.

【⚝⚝⚝】

Estaba en la clase de canto. No ponía atención y no porque no quisiera ponerla si no porque me encontraba pensando en él; Sus cachetes, su suave pelo, sus hermosos y chiquitos ojitos y su sonrisa que con solo verla te alegraba completamente el día por más triste que haya sido.

Me acordaba en la primera vez en que me habló. Recordaba cuando me había dicho que podía ser la persona que siempre estaría a mi lado. Con solo pensar en todo eso me hacía suspirar y sonreír de una manera que me avergonzaría si me estuvieran observando.

Ese día pensaba que era un asaltante y que robaría mi celular, pero solo había sido para tenerme entre sus contactos.

De repente llegó ese pensamiento...

"¿Qué? ¡No!, qué asco a mí no me podría gustar un chico"

Fue ahí cuando dejé de estar en mis ridiculeces y presté atención a la clase.