TXT ❥Es mejor si te evito【 YeonHyun/ YeonTae🎔】

❅Capítulo 44❅

—Y desde ese entonces comencé a odiar mis fotos de cuando era niño. ¡Hey! ¡Taehyun! ¿No me escuchaste? ¡No te repetiré la historia de nuevo!

Dejé de recordar y volví al tiempo actual. Miré a Hueningkai y él me miraba raro, ¿Había dicho algo muy importante y me lo perdí?

—¿Podrías repetir lo que me contaste?

—No.

—Lo siento, estaba recordando algunas cosas y me dejé llevar.

Tomé de mi bebida desviando la mirada, lo hice porque no me dejaba de ver y no quería que arruinara el momento con sus suposiciones.

—¿Pensabas en Yeon?

—¡Kai! —le dirigí mi mirada—. ¿Acaso me veo como si acabara de pensar en él? —estaba a punto de responder, pero lo interrumpí—. No me respondas.

—Ya no quiero seguir en esta cafetería, es muy aburrida y ya terminé de colorear las hojas que nos dieron, ya no es divertido. Quisiera ir allí.

Apuntó el lugar que estaba enfrente de la cafetería. Era un lindo lugar, pero no sabía de qué era y temía por el dinero de mi cartera.

—¿De qué es?

—Tu solo acompáñame.

Se levantó de su asiento y salió como si nada del lugar, claro, como yo era quien pagaba no le importó. Dejé el dinero en la mesa y salí del lugar. Él ya se encontraba enfrente del lugar y al verme entró. Entré junto con él. Al entrar muchos recuerdos me invadieron.

"Tranquilo, solo es un lugar de juegos"

"Entremos a la sala de disparos, Tae"

"¿¡Que!?"

"Los disparos son de mentira, miedoso"

"Bueno, entonces te lo regalo. Cuida de nuestro hijo Yeonhy"

—¿A-aquí? ¿No podemos ir a otro lugar?

—¡Aaaah! ¡Yo siempre he querido ir aquí!

—Solo porque tú quieres...—suspiré.

—Si no quieres entonces vayamos a otro lugar, yo entiendo.

—No es eso, es que me da miedo los lugares muy oscuros.

No quería contarle la verdadera razón así que solo di una excusa, pero no me esperaba que él me creyera tan fácilmente.

—¿Te da miedo la oscuridad? —dijo en tono de burla para luego echarse a reír con su risa "delicada".

Ignoré su estúpida pregunta. Me formé en la pequeña fila para poder comprar las tarjetas de acceso y esperé mi turno. Cuando ya era nuestro turno saqué el dinero y se lo entregué al chico, luego de eso me entregó las tarjetas. Las tarjetas ya no conservaban el mismo diseño que las anteriores, cosa que me hizo sentir triste al darme cuenta que pasaron varios meses de la vez en la que fui con Yeonjun.