Ophelia (Yoonmin)

6.

Capítulo 6.

Año de 1956.

Corea del Sur, Seúl.

Últimamente los hermanos Min iban mucho al bar, Jungkook acompañaba a sus hermanos por compromiso de que no hicieran una tontería, aparte de que desde que Yoongi hablo con él ahora le interesaba averiguar el origen real de Ophelia, pero para la mala suerte de Yoongi y Jungkook, esa noche no lo vieron por ningún lado.

—¿Por qué no estaba? —Pregunto Jungkook, Soobin lo miro y aunque supiera poco del tema, podía ayudar a su hermano con un poco de información.

—No pude conseguir mucho, pero lo poco que pude averiguar con Guni fue que algo había pasado en la tarde, porque un tal Ho es hermano de Ophelia en el bar y se había ido después de que el bar tender Monster le dijera algo. —Yoongi freno su paso por la acera y miro a Soobin.

—¿Un hermano? —Pregunto confundido y Soobin asintió.

—Al parecer no está solo Hyung, tiene alguien vigilándolo dentro del bar y por lo visto, vigilan a todos los chicos. Por eso Guni no puede estar más de diez minutos conmigo. —Informo Soobin y Yoongi suspiro.

—Necesito que te informes adecuadamente que es lo que pasa en ese bar y por qué vigilan tanto a todos. La seguridad se ve desde que pisas un pie dentro del lugar, la chica del mostrador que nos atiende tiene un arma escondida bajo la mesa, puedes notarlo porque siempre mantiene la mano abajo cuando entramos. —Dijo Yoongi mientras daba vueltas en la acera.

—Haber, tranquilos, no es como si esto fuera un secuestro o algo similar. Tú dijiste que eran personas comunes y corrientes fuera de esos antifaces y pelucas. —Dijo Jungkook y Yoongi miro a su hermano.

—Y si, pero eso no evita que puedan estar tratando con ellos. La única forma de averiguar esto y quien puede hacerlo eres tú Jungkook. —El mencionado miro a su hermano mayor y empezó a negar.

—Oh no, ni lo sueñes Min Yoongi. —Empezó a negar y Yoongi lo tomo del abrigo.

—Tú tienes a Taehyung escondido, tienes que sacarle lo que puedas de ese lugar Jungkook. —Jungkook suspiro mientras se liberaba de su hermano y asentía rendido.

Volvieron a caminar hasta casas en completo silencio, a una cuadra antes de llegar a su residencia se encontraron con una escuadra de militares, pero los reconocían y dejaban ir en completa tranquilidad.

Yoongi entro a su recamara tenso, nervioso, molesto de cierta manera, esa tarde no había podido regresarle a Park Jimin su ocarina, aparte de que no lo había visto en todo el día y no sabía nada del chico, estuvo alrededor de una hora buscándolo por la escuela, pero no encontró rastro del menor, empezaba a inquietarse respecto a ello, había averiguado el taller al que pertenecía Jimin, pero no los horarios.

Ophelia, Jimin.

—No sé si eres la misma persona, porque me confundes tanto. —Susurro entre la oscuridad de su recamara y se acostó en su cama confundido.

Esa noche no pudo dormir mucho, alrededor de las cuatro de la mañana bajo a la cocina y se preparó un café cargado, algunas veces el insomnio hacía de las suyas y eso le molestaba.

—¿Yoongi? —Preguntaron a sus espaldas y este se giró ligeramente encontrando a su padre vestido y listo para irse al trabajo.

—Padre, buenos días ¿Cómo esta? —Pregunto y su padre le sonrió mientras se disponía a caminar hacia la estufa para prepararse un café.

—Bien, no he podido verlos, he estado un poco ocupado con los cateos, ¿Cómo estas tú, tus hermanos? —Pregunto mientras bebía de su café, Yoongi sonrió hacia él.