Ophelia (Yoonmin)

7.

Capítulo 7.

Año de 1956.

Corea del Sur, Seúl.

Las dudas comenzaban a correr entre la mente de los tres hermanos Min. Park Jimin se encontraba en la oficina de correos llenando su cuarta entrega del día, desde que había visitado la oficina de Min Yoongi no había dejado de pensar en el chico de mirada gatuna.

—¿Terminaste de entregar todo? —Pregunto Seokjin mientras le extendía una libreta de registros.

—No, falta una entrega más y listo. Debo de apurarme antes de que oscurezca y salgan los militares a dar sus rondas nocturnas. —Informo Park mientras tomaba su bicicleta y las últimas cartas del día.

Seokjin había notado a Jimin ido hacia otro planeta cuando regreso de la segunda entrega, no quiso preguntar, pero sabía que algo pasaba y lo averiguaría.

—¿Qué sucede Seokjin? —Pregunto su pareja al ver que se encontraba distraído mirando por donde se había ido el menor de los Park.

—¿Crees que Jimin termine con el mismo destino de Taehyung? —La pregunta le sorprendió a Namjoon, por lo que miro a su pareja directamente a los ojos.

—No, no lo digas de esa manera, mi hermano cometió errores Seokjin, pero Jimin no tiene por qué pagar por ellos o incluso tener un destino igual al de él. —Dijo seriamente y su pareja asintió.

Seokjin sabia lo difícil que es para Namjoon hablar de Taehyung, el menor de los Kim era la adoración del mayor, Namjoon lo había criado solo y no habia sido fácil, habían pasado por tanto pero cuando Min Jungkook apareció en la vida del menor, todo se fue en picada demasiado rápido y al poco tiempo su preciado hermano desapareció.

Namjoon habia intentado encontrarlo, habia buscado y gastado dinero, demasiado pero no había rastro de él, algo dentro del mayor le latía que su hermano estaba con vida y cerca de él, sabia de las influencias de los Min, solo Park Jimin lo entendía, entendía aquel dolor, por que juntos habían buscado a Taehyung a espalda de todos los demás.

Kim Namjoon conocía a Min Jungkook, sabía que el de en medio de los Min tenía la capacidad para poder esconder a quien quiera y una de esas personas era Kim Taehyung. Lo habia estado vigilando por mucho tiempo y vaya que el Min sabia esconderse y los puntos ciegos de las calles.

Namjoon regreso a su escritorio y siguió trabajando con las listas de cartas que se entregaron, Seokjin se sentó en el escritorio de alado y sin decirle alguna palabra se puso a trabajar. Pasaron alrededor de una hora y media más; y el menor de los Park no regresaba, Namjoon miro por las ventanas del local y no lo vio acercándose en su bicicleta.

—¿Dónde está Jiminie? —Preguntó en voz alta Minho y los presentes se giraron a verlo.

—La noche está entrando en su punto perfecto, Minho. —Dijo Namjoon y el mayor de los Park asintió mientras tomaba su abrigo.

Ambos salieron del local preocupados, tenían una hora y media para encontrar a Jiminie antes de que el toque de queda comenzara. Empezaron a caminar por las calles preocupados, los faroles de las calles casi vacías alumbraban las aceras.

—¿Cuál era la ruta? —Pregunto Namjoon a Minho y este intento recordar.

—La calle de las oficinas que pertenecen al sector del gobierno y los conglomerados de estos mismos. —Dijo y Namjoon suspiro.

Corrieron por las calles en busca de Jimin, cerca de los conglomerados encontraron la bicicleta de Jimin tirada en la acera, el corazón de ambos chicos comenzó a bombear aún más rápido y sintiendo que en cualquier momento su corazón haría un clic y dejaría de funcionar.