C U A R E N T A I O C H O

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Cuando cruzamos el pasillo y estábamos alejados de Sabaa halé mi brazo con fuerza para liberarme del agarre que el doctor estaba ejerciendo. No podía creer lo que había hecho, realmente había armado una escena en medio del hospital.

“¿Qué te sucede? Suéltame”  le dije para luego dar un par de pasos para alejarme de él. “No soy un juguete que arrastras detrás de ti cada vez que tienes una rabieta, Shawn. Así que si quiere que sigamos siendo civilizados el uno con el otro te agradecería que me respetaras y te abstuvieras de tocarme sin mi permiso”

Mis palabras sonaban duras, y esa era precisamente mi intención. Si pensaba que porque ya no sentía la necesidad de rodar los ojos cada vez que me dirigía la palabra le daba el derecho a tratarme de esta manera en frente de otros adjuntos del hospital estaba equivocado.

Sin pensarlo mucho y en medio de mi enojo me di la vuelta y me dirigí nuevamente al área común
Con mi humor realmente no podía ver a Thomas, así que con pasos rápidos entré a uno de los gimnasios terapéuticos y comencé a acomodar las pelotas de Bobath y a ordenar las pesas según su tamaño. En el proceso aplasté un par de mis dedos accidentalmente, pero el resultado fue algo con lo que me sentí satisfecha.

Mire la hora en mi celular y me di cuenta que ya era hora de irse, así que intentando evitar a todos fui a la sala de descanso a buscar mis cosas, quizás iría a buscar a Ares a su ala del hospital y lo invitaría a la nueva pastelería que estaba a un par de calles de nuestro apartamento.

Pero cuando abrí mi casillero y el olor a galletas inundó mis fosas nasales me di cuenta que debía comer algo antes de ir por mi amigo, asi que tomé la bolsa de papel que ya estaba algo arrugada y me senté en una de las mesas de la habitación para después sacar mi celular y entrar en la aplicación de lectura que Avyanna me había recomendado.

Perfecto, había una nueva actualización de uno de los libros que estaba leyendo. Solo este capítulo y me iré.

Fijé mi atención en las palabras que estaban en la pantalla de mi teléfono mientras mordía una galleta, sintiendo como se deshacía en mi boca y el sabor a chocolate era liberado. Esto era vida.

Pero mi paz fue interrumpida cuando escuché un pequeño toque en la mesa, haciendo que elevara la mirada y notara que el doctor Mendes estaba frente a mí sosteniendo dos vasos de la cafetería que estaba frente al hospital.

“Te traje un café para que tomes mientras comes las galletas que trajiste. Recuerdo que te gustaba mucho hacer esa combinación”  dijo algo tímido “Yo—lo siento mucho por lo que hice temprano. De alguna forma cuando se trata de ti siempre consigo una forma de empeorar las cosas” confesó mientras dejaba uno de los vasos frente a mí, junto a la bolsa de galletas.

“Está bien. Solo no vuelvas a hacerlo” respondí restándole un poco de importancia y volviendo a mi lectura.

El tiempo que estuve por mi cuenta mientras organizaba las cosas en el gimnasio me di cuenta que realmente no podía dejar que las cosas que él hiciera me afectaran tanto, si quería tener algo de paz durante estos meses debía aprender a dejar ir.

Miré al doctor y aún seguía en mismo lugar de antes, así que solo suspiré para luego señalar la silla junto a él. “Siéntate” dije

“¿Ah?”

“También tienes un café en la mano y yo tengo suficientes galletas para los dos. Recuerdo que a ti también te gustaba esa combinación” agregué moviendo la bolsa  de galletas para que él también pudiera tomar algunas.

Mendes dudó para luego sentarse. No sé por qué de una forma u otra siempre terminábamos sentados en esta misma mesa, él dudando y yo intentando mantener a raya mis emociones.

How To Save a Life || Shawn Mendes AU  [St. Yves #1] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora