"Acaba conmigo" [GiyuuShino]

Capítulo I

Era una cálida tarde en medio de la finca cuando el cuervo de Oyakata-Sama se posó en la ventana de la enfermería con un simple mensaje. De forma urgente el maestro solicitaba su presencia para poder enviarle a una misión en particular.

Kochou Shinobu encomendó la atención de los cazadores que esa mañana habían llegado heridos en las manos de Aoi y dejando todo de lado se marchó velozmente camino a donde el ave le había indicado.

- ¿Me necesitaba, maestro? - dijo al llegar frente a él, reverenciándolo.

- Exactamente Kochou-san, por favor toma asiento - con su mano le indicó unos cojines que se encontraban frente a ella y sin demorar, obedeció - me he sentido muy preocupado últimamente ya que hace días he dejado de recibir los reportes de Tomioka-san -.

- ¿Él se marchó hace una semana verdad? - preguntó con el único motivo de fingir duda, ella tenía bastante clara la fecha en que su compañero había partido.

- Así es, y ya han pasado dos días sin que reciba noticias de él - suspiró lentamente - si hoy cae la noche y el panorama no cambia ya sería el tercero. No es una característica suya actuar de esta forma -.

- Si su cuervo no ha notificado nada significa que está vivo ¿verdad? - aunque quisiera ocultarlo Shinobu estaba preocupada por la suerte que este pudiera haber corrido.

- Es lo lógico, aunque no se si tendrás en conocimiento que el cuervo de Tomioka-san es el más antiguo del grupo, muchas veces se pierde o entrega los mensajes de forma errónea.. -.

«Me parece que es un cuervo que va bastante a juego con su dueño...»

- Oyakata-Sama... Según ese dato no puedo evitar sospechar que quizás simplemente los reportes se han perdido en el camino -.

- Aún así no podemos correr riesgos, te encargaré el ir por mi a asegurarte de que todo se encuentra en orden Kochou-San - mencionó el maestro mientras se colocaba de pie - para mi siempre será más importante la seguridad de ustedes antes que cualquier suposición -.

- Recibido, maestro -.

Al igual que el hombre Shinobu se coloco de pie esperando las órdenes para emprender viaje.

- Estos son los últimos escritos recibidos, espero te puedan ser de utilidad para dar con su paradero. No te exigiré que salgas ya mismo, pero mi deseo es que sea lo mas pronto posible -.

La pilar extendió su mano y guardó los informes que Oyakata-Sama le extendía.

- Los revisaré y partiré en breve... Maestro, no se preocupe por Tomioka-san, de seguro se encuentra bien -.

Lo último iba tanto para el hombre como para ella misma, no podía evitar temer el haber perdido un compañero más, peor aún si se trataba del Pilar al cual ella, por alguna inexplicable razón, tanto disfrutaba molestar.

Inclinando su cabeza por última vez frente al hombre se retiró y volvió a la finca.

[ × × × ×]

«La caligrafía de Tomioka-san es muy fina y delicada..»

Shinobu guardó las notas en su bolsillo y siguió corriendo. Después de un día de viaje finalmente se estaba acercando a las coordenadas que estaban establecidas en el último reporte entregado por el cazador.

Había transitado velozmente por pequeños pueblos en la montaña mientras aprovechaba de buscarle por si este había regresado para descansar en alguna posada, pero nada.

Y para su sorpresa, a medida que más se acercaba a las coordenadas entregadas, se encontraba aún más en medio de la nada.

- Ne~ Tomioka-san ¿por qué enviaste tu reporte desde acá? - susurró al llegar a un gran árbol que coincidía con las referencias - ¿este es el último lugar donde anduviste? -.