Prólogo

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¡Hola! Bueno antes que nada permítanme presentarme, mi nombre es Oh Sehun, y llevo una vida que no muchos envidiarían, pero ¡No me malinterpreten! Mi vida no es mala, es solo que es una eterna rutina… y nunca me había molestado, pero cuando tienes 17 años y todo en tu vida es monótono ahí nace el problema.

Vivo en una casa grande y acomodada, no soy rico, pero mi padre gana bien y nos manda dinero a mi madre y a mí; mi casa está en Seúl, ahí vivo con mi madre, porque mi padre trabaja en EE.UU. La empresa para la que trabaja decidió que deberían enviarlo a una sucursal más grande por su buen desempeño.

Hace seis meses que se fue; a veces mi madre llora por los rincones de la casa y luego me busca y me abraza para sentirse acompañada.

Estoy en último año de escuela, en seis meses me gradúo y voy a la universidad… eso me asusta, aun no se qué estudiare… ¡Bah! Aun tengo tiempo.

Mi vida como ya lo dije es… ¡Muy aburrida! Amo pasar tiempo con mi madre, y en la escuela tengo buenos amigos… se los describiré.

Jongin, es el tipo apuesto, deportista, conquistador, buen bailarín… blah blah blah… ¡Es perfecto! Lo único malo es que es distraído y se la pasa jugando, no se toma la vida enserio; le gusta que le digan Kai, aun no sé porque, pero bueno… así me agrada. Su piel es bronceada, tiene buen físico, es alto, tiene un rostro lindo, con ojos oscuros, labios gruesos y su cabello es castaño oscuro… es perfecto como ya dije.

Chanyeol, es un idiota de estatura descomunal y ojos de caricatura; siempre anda con una sonrisa demasiado alegre en el rostro y se parte de la risa con casi todo, es bueno tocando batería y muy poco le interesa la escuela. Es alto, de piel blanca, rostro de caricatura, ojos grandes y oscuros, sonrisa amplia y llena de dientes, orejas elficas (muy tiernas), y su cabello es negro.

Jongdae, él le sigue la corriente a Kai y a Yeol, siempre se la pasan jugando en clase, molestando, ¡Argh! ¡Son irritantes cuando están juntos en sus juegos! Jongdae está en el coro de la escuela, creo que solo cantando se vuelve serio y dedicado, (así como Kai bailando o Yeol tocando batería). Su piel es blanca, espalda ancha, no es muy alto, con sonrisa traviesa y labios definidos; su rostro es definido, sus ojos parecen oscuras medias lunas y su cabello es castaño oscuro.

Yixing, él es todo distracción, es divertido ver su expresión perdida; hace dos años vino desde China, desde entonces somos amigos. Su coreano aun es algo torpe, es divertido escucharlo hablar. Solo cuando baila su mirada perdida se vuelve firme y determinada. No es muy alto, tiene buen físico y su piel es blanca en contraste con sus ojos oscuros, su cabello es castaño claro y tiene una sonrisa tímida con hoyuelo en su mejilla derecha.

Tao, vino junto con Yixing desde China… y bueno, él es… ¡Tierno! ¡Es muy tierno! Es bastante callado al igual que Yixing y tiene una gran habilidad para las artes marciales, sin embargo no es más rudo que un osito panda. Su piel es un poco morena, es alto y fuerte, lleva el cabello negro, sus ojos son oscuros también y tiene ojeras debajo de ellos.

Se preguntaran por mí, ¿no? Bueno yo soy un tipo muy normal, alto, delgado, blanco y de ojos y cabello castaños; me gusta bailar, soy un estudiante promedio y soy algo reservado… tímido si así lo prefieren, la verdad no soy bueno tratando con desconocidos. Ese soy yo.

Kai, Yixing y yo descubrimos que nos entendemos bien bailando, así que asistimos cada fin de semana a una pequeña academia cerca de la escuela; en ocasiones Tao practica con nosotros y Yeol y Jongdae se hacen los idiotas y nos molestan durante las prácticas, es divertido.

Bueno… mi vida no es tan molesta, es solo que la rutina es aburrida, y sumado a eso a diferencia de Kai o Jongdae… nunca he tenido novia, así que eso me hace sentir un tanto extraño; he besado a algunas chicas en fiestas y así pero, no lo sé, no se me da formar compromisos… no quiero atarme a nadie. Yeol me apoya, Tao y Yixing no se preocupan mucho por el tema, pero Jongdae y Kai se la pasan todo el tiempo molestando con mi situación… a mi no me hace gracia, pero ese par son incorregibles. No se… quizás aún no llega la adecuada.

A veces cuando me pongo a pensar en cómo va mi vida, me pregunto… ¿Algún día va a cambiar?... ¡Nah! Con mi suerte las cosas se volverían peores… o eso creo.

El Peor Día De Mi VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora