Break The Distance (Samuel De Luque Y Tú)

Capítulo 9 ~Demasiado bueno para ser verdad~

-¿A Luzu se le olvidó que yo también voy con ustedes o qué? –Dijo ____ mirándome confundida.

-Qué. –Le respondí haciéndome el gracioso. Le sonreí. –Hoy es tu última noche aquí, ¿no quieres grabar un vídeo con Willy y conmigo?

*____ P.O.V*

 

Abrí los ojos como platos. Nunca pensé que me ofrecería algo así, pensé que sería una subscriptora más con suerte, pero más que suerte, esto… No creo que haya hecho lo mismo con algún otro u otra fan. Estaba en shock, no sabía qué decir, sólo me quedé mirándolo fijamente como boba hasta que logré decir:

-¡Sí, claro que sí! –Sonreí y le di un fuerte abrazo.

-Tranquila, fiera. Que no es que te esté pidiendo matrimonio ni nada… -¡DIOH, MIO, QUÉ MOLESTO ES AVECES! Pensé. Pero no pude enojarme ni nada por el estilo, estaba muy feliz.

Luzu y Lana no podrían llevarnos a casa, pero nos dejarían cerca y caminaríamos hasta allí. Nos bajamos de la parte trasera de la camioneta, nos despedimos de Luzu y Lanita y les dimos las gracias por traernos.

Comenzamos a caminar, cuando escucho el sonido de mi celular como cuando me llaman, revisé, y justo era una llamada, pero de un número sin identificar.

Al sacar el móvil, frené un poco el paso, más no dejé de caminar, por lo que los chicos se me adelantaron un poco. Contesté: -¿Aló? –Nada se escuchaba. -¿Aló? –Volví a intentar, pero esta vez sólo oí algo imposible de entender, murmullos, y de repente sentí como si la línea fuera a cortarse. Todo dejó de escucharse.

“Mira arriba, abajo, estoy en todos lados, niña. Cuida tu espalda, pero no dejes de mirar al frente.” –Se escuchó una voz escalofriante, nada parecida a la de un humano, pero sí podría decir que era algo femenina. Me heló los huesos, las piernas se me paralizaron, lágrimas salieron de mis ojos, pero yo no hacía ruido alguno, no podría. Veía todo borroso, pero aun así distinguía la imagen de los chicos alejándose.

Al cabo de un momento, podía moverme fácilmente.  “Samuel” Dije en un soplido, intentando gritar, nadie me escuchó. -¡Samuel! –Volví a intentarlo, esta vez sí funcionó. Miró hacia atrás y se dio cuenta que me había dejado bastante lejos. Me hizo una seña con la mano para apresurarme, pero antes de ir hacia él, debía asegurarme que este sentimiento de que alguien me observaba era en vano.

Miré hacia la derecha, luego a la izquierda, y pude ver una sombra extraña, la misma que había visto la otra vez. Antes de poder distinguirlo todo mejor para quedarme paralizada de nuevo, agaché la cabeza, cerré los ojos con fuerza y salí corriendo con todas las ganas, con tantas, que ni siquiera pensaba en parar en algún momento, aunque tendría que hacerlo. Y así fue, de manera involuntaria, fui detenida, y no había manera de que pudiese querer seguir huyendo.

Luego de haber sido helada y paralizada, este chico, inconscientemente, espantaba en mí toda preocupación. Sabía que había aterrizado en los brazos de Samuel, y no quería que ese momento acabara por nada en el mundo, quería parar el tiempo, congelar la escena, porque probablemente nunca habría “otra vez”. Sin pensar en cualquier otra cosa, cerré mis ojos, y dejé que en mí recorrieran todos esos sentimientos, dejé llevarme por los pensamientos, y sin darme cuenta empecé a llorar.

Caí en la realidad, y me preguntaba por qué Samuel no había dicho nada, por qué no me había separado de él. Pero no me preocuparía por eso ahora, aunque fueran 5 segundos, los aprovecharía.

Era demasiado bueno para ser verdad, aunque lo era, lo estaba viviendo. Pero no podría ser para siempre. Samu me tomó de los brazos, luego de la barbilla y subió mi cabeza para mirarnos a los ojos.

-¿Estás bien? –Me preguntó. Cerré un poco los ojos e intenté girar la cabeza hacia un lado, con lágrimas en las mejillas.

-Todo lo contrario. Aunque esté feliz por haberlos conocido, me deprime por completo el que después de mañana no los volveré a ver más, y… -No me dejó terminar.

-Tal vez no nos vuelvas a ver en persona, pero sí a través de una pantalla y nos tendrás en tu mente. Además, nunca digas nunca. –Volví mi mirada hacia él. Hizo una pausa. –El poco tiempo que hemos estado conociéndonos, me he dado cuenta que eres una persona a la que vale la pena darle su apoyo, una persona con la que se puede contar, una gran persona, alguien especial… para mí. –Con cada palabra que salía de su boca, rodaba una lágrima por mis mejillas, y cada lágrima era secada por él antes que cayera. -. Te quiero, ____. –Abrí los ojos como platos. ¿En serio había dicho eso? No lo podía creer. Esto era… demasiado bueno para ser verdad. Ni siquiera terminé de pensar, no me dejó, cuando se estaban uniendo nuestros labios en un tierno beso.

Sí, sé que he subido este cap muy seguido del otro y es más largo, pero tenía muchas ganas de hacerlo. :3 Además, se los debo. Espero les guste, no olviden apoyarme con una estrellita o comentario, eso me motiva bastante. ^-^ LAS QUIERO Z4