Just Friends (JiCheol)

VII

A la mañana siguiente un rico aroma a huevos y tocino hicieron que SeungCheol se removiera en la cama, estiró su cuerpo sintiendo la cama inmensamente grande.

Jihoon ya no estaba a su lado.

Se levantó para ir a buscarlo algo somnoliento.

— Buenos días — Dijo el pelinegro, acomodando ligeramente su cabello entre bostezos — Huele muy bien.

— Buenos días SeungCheol, Gracias, es lo único que encontré en tu refrigerador que no tuviera una notita — dijo algo irónico, meneando con ayuda de una pala, los huevos en la sartén.

— Mañana llega el catálogo del súper, dejaré que escojas mi despensa. Así podrás cocinar lo que quieras — Depósito un beso en la mejilla de Jihoon, alejándose para entrar al baño y cepillarse.

Sonrojando al chico que preparaba los huevos revueltos como todo un profesional.

— Tonto, no dije que volvería a cocinar para ti — Musitó para el mismo, tratando de ignorar los latidos intensos de su corazón.

El desayuno estába listo.

Todo se veía delicioso, unos huevos revueltos acompañados de tocino, como postre unas tostadas con mermelada de fresa y un jugo de naranja.

Comieron en total silencio, SeungCheol mirando a Jihoon, sin perder lujo de detalle. Mientras que el último mencionado trataba de ignorar su mirada.

Caminaban juntos hasta la escuela, nadie sospecharía, ya que la mayor parte del tiempo lo hacían. Eran amigos.

Ni siquiera era necesario enviarle un mensaje a sus padres, ellos sabían perfectamente que cuando no llegaba a casa se queda a estudiando hasta tarde con SeungCheol, eso significaba que no llegaría a dormir y no les molestaba en absoluto.

Aunque todo era un mentira.

Al entrar al instituto tomaron caminos diferentes. Ya que Soonyoung tomó la mano del castaño alejándolo de SeungCheol.

— Hola bebé — dijo el rubio, besando la mejilla del chico.

— Hola

— Hoy nos iremos juntos — Rodeó el cuello del bajito, apegándolo a su cuerpo para caminar de esa forma hasta los casilleros — Así que te esperaré.

— Soonyoung ¿Quién es el chico con el que te besabas ayer? — Jihoon volvió levemente su rostro, mirando intensamente al rubio.

El mencionado deshizo el agarre, mirando a su novio con una sonrisa ladina.

— Se llama Minghao.

— Entonces ¿Por qué no me dejas en paz? — Protestó, llamando la atención de algunos alumnos que se encontraban a su alrededor.

El rubio mordió su labio inferior, desvió la mirada metiendo sus manos a los bolsillos.

— ¡¿Me vas a ignorar?! ¿Por qué diablos no me dejas en paz?

— ¿Realmente quieres saberlo? - Masculló sin mirarlo, pero si mirando a las personas a su alrededor, logrando que se disiparan — Tú papá me obliga a salir contigo.

Jihoon arrugó su entrecejo, sorprendido por la respuesta del rubio. Sus brazos volvieron a posición de firme, sintiendo como su corazón comenzaba apretujarse.

— ¿M-Mi papá?

— Lo siento Jihoonie, yo sabía que me terminarías cuando descubriste que te engañaba y te aseguro que yo no iba a replicar — Inclinó la cabeza cohibido, sintiéndose culpable por haber hecho que el de baja estatura se sintiera de esa forma — Yo tengo un problema con, con... — Soonyoung comenzó a sentirse nervioso, jugando con sus dedos dentro del bolsillo de su pantalón.

—Espera. ¿Mí papá te chantajeó? — El rubio asintió — No puede ser — El bajito dio unos pasos hacia atrás, la confesión de Soonyoung, era fuerte, era muy triste y decepcionante, se detuvo al chocar levemente con los casilleros, apoyándose de ellos para no caer.

— Yo-Yo, consumo...

— Lo se — Confesó el de baja estatura — ahora lo se, sabía que ese aroma impregnado en tu ropa no era solo de cigarrillos.

— ¿Te diste cuenta? — Se volvió hacia Jihoon, sorprendido, mirándolo a los ojos — ¿Nunca me reclamaste, ni dijiste nada?

— Bueno, yo...

— Bueno, eso no importa ahora. Tu padre lo supo y también sabía que te engañaba, está tan obsesionado con el buen empleo que mi padre le dio en la compañía, que cuando se enteró que me terminarías, el me obligó a retenerte a mi lado — Su voz se mantenía baja, solo para que Jihoon escuchara.

El de baja estatura se acercó un poco más, sintiendo como su brazo chocaba con el del rubio. Sin saber que un celoso SeungCheol los observaba apretando sus puños.