Young Hearts Be Free Tonight

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Los alumnos de Seakz vitoreaban sin cesar, los gritos de euforia y los aullidos para animar era lo que más se oía en el campo de béisbol esa tarde del viernes. Hoy se estaba debutando el penúltimo partido de la temporada, si los Dogs SK ganaban este partido, viajarían mañana temprano a Toronto para  jugar la final contra el equipo universitario de la ciudad. Con ese partido se estaría finalizando la temporada de deportes, y con ella, el semestre, dando paso a las esperadas vacaciones de invierno.

Era el turno de batear de Lauren Jauregui, debía admitir que estaba agotada, se podía notar por las gotas de sudor que caían por su rostro algo rojo por el esfuerzo físico. A pesar de su cansancio, debía seguir dando todo en el juego, hasta oír al narrador confirmar que los Dogs SK obtuvieron la victoria. Ambos equipos estaban empatados con el mismo número de carreras hechas, ella era la última en batear. Abel que ya se encontraba capacitado para jugar, estaba posicionado en la tercera base, esperando por el bateo de su mejor amiga y llegar al home.

Habían otros dos chicos en la primera y segunda base. Quedaban 45 segundos de partido, si la ojiverde jugaba con astucia y rapidez, lograría por lo menos la carrera realizada por el moreno, pero ella era ambiciosa. Quería las cuatro carreras que se podían hacer, contándose ella misma.

Dieron el aviso que el pitcher estaba listo para lanzar, Jauregui se colocó en posición, preparada para batear. El pitcher del equipo universitario de Boston lanzó la pesada pelota, la jugadora de béisbol no le quitó la vista en ningún momento. No podía darse el lujo de hacer strikes, no podría perder ni un segundo del tiempo restante.

Al tenerla enfrente, bateó con todas sus fuerzas posibles. Tanto, que logró sacarla del campo, haciendo un home run en el acto. El público quedó alocado con aquello y comenzaron los gritos de aliento hacia los jugadores para que corrieran por todo el diamante, tocando las bases para llegar al home y hacer cuatro carreras más. Lauren ya iba entrando a la tercera base, uno de los jardineros del equipo contrario ya tenía la pelota en sus manos, dispuesto a lanzarla al catcher para evitar que la chica de ojos verdes hiciera la última carrera. Lauren no paró de correr lo poco que le quedaba para llegar al home, viendo en el aire a la pelota lista para aterrizar en la manilla del catcher. Unos metros más, se lanzó contra el suelo, llenándose de tierra al instante, pero tocando con su mano la base del home, mili segundos antes de que la pelota fuese atrapada.

¡Así es, espectadores! ¡Lauren Jauregui ha logrado llegar al home justo a tiempo! quedando el marcador 14-10 ¡los Dogs SK pasan a la final!—anunciaba el narrador del partido por los parlantes del campo—Esta chica sí que ha arrasado con todo en este juego, toda Seakz University te lo agradece, Lauren

El resto de jugadores del equipo corrieron hacia la chica de los tatuajes, alzándola y gritando su nombre, las animadoras y el público también se unieron al canto y ahora todos decían su nombre en una porra. El esfuerzo había válido la pena. 

A lo lejos, vio a Camila con su lindo uniforme de animadora, sus pompones en sus manos y su cabello peinado en listones. Estaba sonriéndole a la distancia, y eso le bastaba a la ojiverde para que su momento de victoria estuviese completo.

...

—¡Bueno, bueno! ¿qué haces allí tirada? ¡Hay que celebrar!—Abel había llegado al departamento bebiendo de una botella de champagne junto con el resto de la manada, viendo a su mejor amiga recostada en el sofá aún con su uniforme del equipo

—Te luciste en ese juego, Laur—Liam le hizo un cumplido mientras la abrazaba

—Tiene razón, eres la número uno, chica—Drake también la acogió en un abrazo—¡Ve y cámbiate, mujer! Halsey nos está esperando fuera para irnos a la fiesta de XOTWOD y celebrar en grande

Remind Me |CAMREN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora