The bite.

Capítulo 3

No podía, por más que pasara esa idea por su mente, no podía. Quería un cachorro, lo había deseado incluso cuando era aún más joven, incluso, hace un tiempo atrás, pensó en la posibilidad de una inseminación artificial o en adoptar a un cachorrito que lo amara tanto como él lo haría.

Tenía miedo.

No tenía miedo de que un cachorro creciera en su interior, tampoco le temía a tenerlo, cuidarlo y adorarlo. Temía de que el padre de su bebé no lo quisiera, temía que rechazaran a su cachorro, temía tanto que su cuerpo tembló. No le importó la mirada del alfa en él, tampoco la del rubio, él colocó sus manos en su vientre y movió sus pulgares en una caricia ligera.

"¿Louis?" Escuchó la voz del alfa intentar sacarlo de sus pensamientos, pero no le hizo caso e intentó seguir pensando en la mejor solución sin terminar dañando a su cachorro, si en realidad había uno ahí. "Louis, si no deseas un cachorro, yo jamás te obligaría a que lo tuvieras. Si no lo quieres, te apoyaré en todo lo que necesites para no tenerlo, tu eres dueño de tu cuerpo." Lo pudo tranquilizar el escuchar el apoyo de Harry, lo calmó las feromonas que este expulsó para que él estuviera en paz y se dejó hacer, dejó que lo envolvieran y las aspiró con placer.

"El lazo se romperá, pero si estoy esperando un cachorro, lo quiero tener" Abrió los ojos y miró alternadamente a ambos y escuchó una risa salir del otro omega.

"Louis, eres un omega con un talento enorme, pero eres demasiado ingenuo" Negó y se acercó un poco más a él. "Tener un lazo roto ya es lo suficientemente malo para nosotros, ahora, a eso agrégale un cachorro."

"¿Y cuál es tu maravilloso plan, Niall?" Definitivamente ya se había desesperado, lo alteraba el hecho de que un alfa que no lo amaba, se quedara con él únicamente por el compromiso de una marca que se hizo en estado de ebriedad y por un completo error. Se negaba a no tener el amor que su madre tenía con padre, se negaba a abandonar su sueño de tener una familia, pero no podía obligar a quitarle a ese alfa la oportunidad de encontrar a la persona que realmente podría amar. "¿Obligar a Harry a que se quede conmigo por un jodido error? ¿Quieres que se amarre a la responsabilidad de un hijo que no planeó? Porque, que yo lo quiera no significa que él también."

"Louis, si decidiste tenerlo, tendrás mi apoyo incondicional y te prometo que le daré todo mi amor, tanto a ti, como a mi cachorro. Y te prometo que seré un buen padre, pero necesito que confíes en mí y que hagamos bien las cosas. Necesito que me dejes protegerte." Louis tembló ante esa palabra, sonaba tentador recibir protección del alfa que lo hacía sentir tan débil como jamás antes se sintió. Recibir protección, pensó en cómo se sentiría tranquilizarse mientras alguien más lo cuidaba, pensó en lo sensacional que sería despertarse por la madrugada con un llanto melodioso de un pequeño bebé, pensó en lo magnífico que sería escuchar en un "me toca cuidarlo, cielo", pensó en lo que sería sentirse amado, en lo que sería tener una familia tan bonita como en la que creció, pero temía, temía tanto que lo estaba ahogando.

"¿Estás seguro de lo que dices, Harry?" La pregunta salió dudosa mientras miraba sus pies y sus manos se cerraban en puños, el alfa no pudo evitarlo y se acercó tanto al omega que fue inevitable acariciar su mejilla con lentitud mientras una sonrisa sincera se hacía presente en su rostro.

"Claro que lo estoy, te protegeré porque eres mi omega y protegeré a nuestro cachorrito si es que hay uno ahí" Dijo tocando delicadamente su vientre, sacándole una lágrima al castaño. "Entonces... Dime lo que quieres hacer y eso será" Louis tragó saliva, tenía varias opciones pero absolutamente todas lo decepcionaban y lo dejaban deprimido y al borde de la muerte, porque sabía muy bien lo que pasaría con él si deshacía el lazo. A fin de cuentas, se trataba de Harry, estaba lo suficientemente seguro de que ese alfa lo trataría con respeto y cumpliría cada una de sus palabras, así que después de meditarlo un poco, suspiró y miró al alfa frente a él con duda.

"Supongo que podríamos funcionar" Respondió bajo, casi intentando que su voz no fuera escuchada. "No sabemos si hay un bebé, pero yo quiero tener uno, así que... Podríamos empezar a convivir en secreto hasta saber si seremos padres y si lo seremos, nos quedamos juntos y si no, podemos romper el lazo, veremos cómo nos las arreglaremos. Pero por ahora debemos pensar qué hacer con la prensa, siempre buscan la forma de averiguar absolutamente todo, si en dado caso se llegan a enterar de que tengo una marca y además, es tuya, se verá muy extraño que jamás nos hayan visto juntos..."

"Estoy de acuerdo" Intervino el rubio y puso una mando en su barbilla, pensando en una solución mientras suspiraba. "Creo que lo mejor sería que vivan juntos, claro, se hará todo lo posible porque nadie lo sepa y se mostrarán en público poco a poco, así si en algún momento, alguien ve tu marca, muchos no podrán decir nada malo porque ya vivirán juntos y se les veía juntos en ciertos lugares. También podríamos decir que llevaban mucho tiempo tratándose pero jamás lo quisieron hacer público porque era su vida privada" Louis y Harry intercambiaron miradas, podían respaldar esa historia, hace un tiempo ese "error" no hubiera representado un problema real para ninguno de los dos.

"Creo que es una excelente idea. Pero solamente se hará lo que Louis quiera, él tomará la decisión con la que se sienta cómodo, yo solamente planeo apoyarlo" El castaño mordió su labio inferior y movió su cabeza lentamente, dando una respuesta afirmativa ante la idea.

"Creo que es lo mejor, solamente falta decidir si viviremos aquí o en tu casa"

"No me gusta la seguridad que hay aquí, si estas de acuerdo, me gustaría que vinieras a mí casa, hay unas cuántas habitaciones, así que cada quién podría tener la suya, incluso el cachorro" Mostró una pequeña mueca que aparentaba ser una sonrisa tímida, le hacía un poco de gracia que Harry estuviera contemplando la habitación de un cachorro que no estaban seguros de que siquiera existiera.

"Vale. Entonces, ¿cuándo debo mudarme?" Niall sacó su teléfono para revisar la hora y la fecha, pensó un momento y miró a ambos. "Mañana tenemos tiempo libre, así que mañana vendremos por tu ropa para que te instales en la casa de Harry. Sé que es muy pronto, pero este chico" Señaló a Harry con fastidio "Debe comenzar a grabar los vídeos de sus canciones, además de comenzar a organizar las fechas de sus conciertos" Guardó su teléfono y se cruzó de brazos. "Mañana será el único día que podremos, lo siento."

"¿Puedes mañana, Louis?" El rizado le sonrió y él simplemente pudo regañarse por la ternura que ese gesto le había dado.

"Si, claro... Solamente díganme la hora y estaré listo."

"Bien, me tengo que ir, seguramente mi padre comenzará a regañarme en cualquier momento por la hora, Harry, tienes este día libre, así que puedes hacer lo que quieras, adiós y un gusto Louis" El rubio le mostró una radiante sonrisa y después decidió marcharse con rapidez, dejando un tanto incómodo y nervioso silencio entre la pareja.

El escalofrío que le recorrió la piel ante el inevitable deseo que sintió por el olor del que ahora era su alfa, lo enloqueció, y solamente pudo cerrar los ojos para intentar tranquilizarse, para despejar su mente y evitar el saltar hacia el cuerpo del mayor y enroscar sus piernas a su cadera para besarlo tan salvajemente que lo obligaría a recordarle todo lo que habían hecho la noche anterior.

Negó con rapidez.

¿De verdad estaba pensando en eso? Definitivamente había enloquecido y eso era obra de ese majestuoso hombre.

Cualquier error, por favor díganme:)

Espero que les esté gustando, si quieren agregar algo, por favor, pueden comentarlo, con gusto lo leeré y tomaré en cuenta.

¡Mil besos!

-MARA B.