The bite.

Capítulo 5

Si pudiera regresar el tiempo atrás, tal vez las cosas podrían ser distintas. Tal vez no se hubiera permitido el ser manipulado por su orgullo, tal vez se hubiera animado a buscarlo y así poder exigir una explicación que se merecía por completo, tal vez si no hubiera sido tan joven e inexperto con las ralaciones amorosas, todo sería distinto con Harry.

Mudarse con él definitivamente fue inesperado, así como también fue inesperado tener una marca en su cuello que gritaba con orgullo "¡Mírame, tengo un alfa, y por favor mírame, huelo en gran parte como él!". Louis estaba un tanto confundido, desde que Harry y él dejaron de verse, de buscarse, él se propuso no buscarlo, no quererlo, no amarlo, él se propuso superar todo lo que sucedió entre ellos, pero no tomó en cuenta a su omega, aquel que gritaba y chillaba cada que en la televisión mencionaban su nombre, incluso prefería no asistir a muchos eventos para evitar un encuentro con el rizado, porque... Definitivamente temía por cómo podía reaccionar ante su mirada, ante su rostro, ante su sonrisa y ante su exquisito aroma. Lo pensó demasiado cuando Zayn le mencionó aquella fiesta en la que era inevitable la presencia del famoso Harry Styles, creyó que una distancia prudente lo salvaría de cualquier reacción que tuviera al verlo, pero el alcohol no lo ayudó y terminó cediendo a las súplicas de su omega interno y bueno, terminó con la marca, viviendo con el alfa y además, con un poco de mala suerte, esperando un cachorro, no pensaba que tener un cachorro como tal era una maldición, lo que si lo era, era el alfa, tenerlo atado a su trasero por aquellos dos hoyos en su cuello y un bebé.

Soltó un suspiro y se permitió calmarse un poco, llevaba viviendo con Harry exactamente dos semanas, él tenía su propia habitación y a un lado estaba la del alfa. En realidad no era tan malo, Harry no lo hostigaba, le daba su espacio y lo trataba muy bien, pero, definitivamente eso no lo calmaba del todo, en ese momento estaba esperando los resultado la prueba de embarazo que se hizo el día anterior, con Niall haciendo y deshaciendo para conseguir total discreción de las pruebas que se le habían realizado.

"Hey, ¿quieres un café?" Salió de sus pensamientos al escuchar la voz del rubio.

"No, gracias. ¿Ya viene Harry?" Recibió un asentimiento en respuesta y comenzó a mover las piernas con desesperación. Porque, ni él mismo tenía la capacidad de comprenderse, a veces quería a Harry lejos de él, sin que le hablara, sin que lo mirara, sin que confundiera a su débil y necesitado corazón, pero otras veces, quería tener a Harry a su lado sin que se moviera un solo segundo, que solamente se mantuviera abrazándolo como solía hacer cuando eran unos adolescentes. Sabía muy bien que habían crecido, que aquel Harry de cabellos rizado, con un aspecto de niño y esa sonrisa que hacía derretir a cualquiera, ahora era un hombre, tenía fama, tenía talento. El chico que había trabajado en una panadería ahora era reconocido por todo el mundo, al igual que él, pero, a veces toda esa fama se volvía una carga gigante, una carga que no los dejaba ser felices, no los dejaba ser ellos.

¿Qué sucedería?

La marca en su cuello era producto del alcohol y sus inútiles lados animales y maldecia el no poder tener el control total de sí mismo, si hubiera nacido beta, no estaría en esa situación, con un alfa atado a su lado por el "desliz" de una noche.

Sin poder contenerlo, una lágrima cayó por su mejilla, su respiración comenzó a fallar y se levantó con rapidez, necesitando aire, no... No necesitaba aire, necesitaba a Harry, su olor, aquel aroma sería capaz de tranquilizarlo, la presencia del alfa siempre fue un balzamo para él, Harry siempre lo protegió, ambos siempre se protegieron y ahora necesitaba de esa protección, necesitaba de él.

"Louis, debes calmarte, pronto vendrá Harry, cálmate" Si, claro que deseaba calmarse, pero simplemente no podía, incluso la voz de Niall se escuchaba lejana, con un extraño eco, comenzaba a ver borroso, no sabía si era por las lágrimas o por la falta de aire. No sabía lo que sucedía, solamente tenía miedo, tenía mucho de no saber cuidar a un bebé, tuvo miedo de ser abandonado otra vez por su alfa, simple y sencillamente, estaba muriendo de miedo.