La Fruta más Dulce - Taekook

Capítulo 13

"El ser humano es muy complejo" me lo decía Jimin, un dia estás bien, en la neutralidad de la paz, y otro día llega inesperadamente: el amor.

- Si pero necesito que sea por la noche, necesito que los... Nooo, entiendo que no trabaje de noche, pero...Maldito imbécil. - Dije mientras colgaba el teléfono.

- Nadie aceptará lo que les pides si no les muestras primero la plata. - Dijo Jimin mientras jugaba videojuegos. - Además te has hecho muy grosero últimamente.

Yo buscaba en el directorio algún servicio de mudanza.

- Necesito llevarme todos los costales, a penas cabemos en tu casa. - Dije en voz alta para que me escuchara entre las torres de costales.

- Y aun tienes de sobra en la pizzeria. No entiendo porque mi jefe te ama.

Estaba a punto de marcar otro número de teléfono y mi celular vibró indicándome que tenía una notificación. Abrí la aplicación de Facebook.

"Hola"

Mi corazón dio un brinco y no pude evitar la sonrisa que se formó en mis labios. No había borrado la publicación del último día que estuve con Jungkook.

"pero no lo borres, es tierno, yo lo comentaré" recordé las palabras de Jungkook.

- Un poco tarde, ¿No, Jungkook? - dije para mi mismo con una sonrisa.

Jimin se puso de pie y tomó su chaqueta. Supuse que iba a salir porque miraba el reloj, ya era muy tarde.

-Eh... eh ¿A dónde vas? - Pregunté curioso.

- A hacer cosas de alta categoría. - Dijo mientras se colocaba unas gafas y me miraba seriamente. Lo hizo para hacerme reír.

-Son casi las 11 p m.

- Adiós. - Dijo cerrando la puerta detrás de él.

Deje el directorio y me levanté de la mesa y corrí entre las torres de costales hasta la puerta. La abrí y miré a Jimin tomando el ascensor, me apresuré corriendo y a penas pude entrar con él en el ascensor.

Jimin suspiró .

- ¿Puedo ir? - Pregunté con una sonrisilla.

-Ya qué. Solo no molestes. - Dijo aún con las gafas puestas.

- ¿Y a dónde vamos?

- Verás, yo... no soy un humano, cada semana necesito buscar la sangre de un inocente para mantenerme con vida en este mundo. - Dijo quitándose los lentes y guardandolos en su bolsa del pantalón. - ¿Por qué me los traje? - Dijo más para él mismo.

- ¿Qué? ¿Mataremos a alguien? - Dije escandalizado.

- Tú no lo harás, solo verás. Relajate ¿Quieres?

- Quiero regresar. - Pedí desconcertado pero seguro.

- Te juro que llamaré a la policía si matas a alguien frente a mi - Dije amenazante.

- Todo lo quieres arreglar con la policía, niño. ¿De qué realidad vienes? - Dijo en tono de fastidio.

- Es un delit...

- Ay que aburrido eres, es obvio que es broma.

La puerta del ascensor se abrió.

- Entonces... ¿A donde iremos? - pregunté curioso.

Jimin tenía una libreta de bolsillo y comenzó a hojear y pareciendo ignorarme por fin respondió.

- Solo observaremos.