Sólo canciones

🥀8- Wave~ Ateez🥀

Al día siguiente no tenía nada de ganas de pisar la universidad, ni siquiera de verla de lejos. Me sentía fatal después de todo el numerito de ayer y no quería enfrentarme a una conversación seria con Lisa.
La muy....lista (por no decir zorra) conseguía llevarme al huerto con facilidad y llevar la conversación hasta el punto donde a ella le convenía y yo, que de buena me paso a tonta, pues me callo y lo dejo estar. Es mi amiga después de todo.
Al final, por seguirme un poco la contraria, fui a clases e intenté no cruzarme con nadie hasta la comida. Misión imposible.

- Buenos días Larajin- dijo Momo agarrada al brazo de un Jungkook más o menos...¿Alegre?

- Hola- contesté simple.

Hice una reverencia a modo de disculpa y me fui de allí como alma que llevaba el diablo. Una vez en clase nos dijeron que la profesora correspondiente había faltado debido a un pequeño imprevisto así que teníamos una hora libre y como no quería ver a nadie me fui a la biblioteca, lugar de paz y de cosas bonitas.

El único inconveniente en este caso fue mi estúpido pero justo karma, allí me encontré con Jeon, devolviendo algunos libros y sentándose en una de las mesas. Cuando me vio cruzar las puertas me hizo un gesto con la mano así que sin más remedio me senté con él.

Así empezaba bien el día.

Antes de sentarme cogí un par de libros sobre arte, me acerqué a la mesa de mala gana y sucumbí al encantador de serpientes.

- ¿Qué te trae por aquí?- susurró.

Es tío era imbécil, estoy en una biblioteca para jugar al fútbol no te jode.

Lo miré incrédula y con cara de pocos amigos y él se echó a reír por lo bajo.

- Era una broma mujer- volvió a susurrar.

Negué con la cabeza siguiéndole el rollo y después me centré en el libro que tenía entre manos.

A veces levantaba la cabeza y lo veía en lo mismo, centrado en sus hojas de papel, perdido en las letras de un libro o atrapado con la mirada puesta en mi.
Quería hablar conmigo, se le notaba desde kilómetros y yo....de buena me paso a tonta, ya os lo dije.

Le hice un gesto para que nos sentamos en los bancos de fuera y así poder hablar y él, muy feliz, me siguió.

- ¿Qué te pasa?- pregunté dejándome caer en los bancos de madera.

- Me encantaría que nos llevasemos mejor- dijo como si de chiste se tratara la cosa.

- ¿Perdón?- esto era surealista

- Perdonada- dijo con una risa- A ver, déjame explicarme qué así parezco un demente-

Tomo aire varias veces y se se sentó en el lado contrario de la mesa encarándome de frente.

- Eres una chica fantástica por lo que me han contado- le interrumpí.

- ¿Has hablado de mí con alguien?- pregunté sin llegar a creérmelo del todo.

- Si, pero esa no es la cuestión ahora- dijo quitándole importancia- La cosa es que hemos empezado con mal pie y no quiero eso, tenemos amigos en común y no quiero que haya malos rollos, además, me encantaría ser alguien con quien pudieses hablar al igual que yo contigo, no digo de los que quedan a merendar e ir de tiendas pero si buenos amigos.- habló muy deprisa pero conseguí captar la idea.

Jeon y yo amigos.

¿Encajaba eso en el universo? ¿Estaría gastándome una broma?

- Jeon, puedes ser sincero conmigo....¿Te has fumado algo raro?- dije tomando una postura más relajada.