Preparatoria: amores y dolores.

Domingo de amigos

Se que debería disfrutar del sábado, pero ya quería que fuera domingo. Ya quería estar con Riley. Estuve todo el sábado en mi casa viendo películas, vi "El club de los cinco", "El club de la pelea", "Ritmo perfecto" y una película sobre zombies, no me acuerdo del nombre, todas me parecieron buenas, menos la ultima que trataba de lo mismo de siempre: Apocalipsis zombie. Creo que deberían ser más creativos con esas películas.
También termine el libro que estaba leyendo, me pareció genial. ¿Han odio hablar de Stephen King? Pues estaba leyendo un libro de él. Carrie. Me encanto. El final fue genial. Me acorde de Maara mientras lo leía, pues Carrie White -la chica del libro- también era humillada por todo el mundo.
Al llegar la noche decidí acostarme temprano para así llegar puntual a mi cita con Riley. Bueno, no era una cita, era una salida de amigos.
A las 7:00 AM me levante y me entre a bañar. Al terminar de vestirme baje a desayunar, lave mi plato y rápidamente cogí las llaves del carro de encima de la mesa.
-¿A dónde vas?- dijo mi madre que recién llegaba a la cocina.
-Me voy a donde Riley. Yo te conté antes.
-Si, perdón. ¿Necesitas dinero?
-Si, gracias.- no lo podía creer, mi mamá me estaba dando dinero. Saco su cartera y me dio.
-Gracias ma. Chao.
Salí corriendo hacia el carro y me fui rápido a casa de Riley. Eran las 7:50 AM, la cita era a las 8:00 AM
Llegue a donde Riley a la hora acordada. Hice sonar la bocina y ella se asomó por la ventana.
-Ya bajo.- me asome por la ventana del auto y le afirme con un gesto de la cabeza.
Prendí la radio del auto. Espere por 5 minutos a Riley. Luego ella bajó, se despidió de sus padres desde la puerta y se dirigió al carro. Mientras se subía me saludo y me dio un beso en la mejilla.
-Bueno. Yo te dije que estuvieras hoy conmigo, pero eres tu la que decide que hacer.
-Vale.- dijo ella mientras pensaba a donde ir.
-Entonces...¿qué quieres hacer?
-Parque de diversiones. Hace rato no voy a uno. Quizá desde los 12 años.
-Parque de diversiones...¡allá vamos!

Al llegar al parque había una gran fila. Riley fue al baño mientras yo compraba las boletas. Ella me dio dinero para la de ella, sin embargo metí lo que ella me dio en su bolso a escondidas. No quería que gastara dinero, al fin y al cabo fui yo quien la invito, además es la ultima vez que iba a compartir con ella durante un largo tiempo.
Cuando ya tenía las boletas de entrada me senté al frente del baño de damas esperando a Riley.
-¿Fred?-dijo alguien que salía del baño.
Voltee la cabeza y la incline un poco hacia arriba.
-Hola Mia- me sonroje-¿Qué haces aquí?
-Vine con mi hermano a disfrutar un poco.
-¿Tienes un hermanito? Yo quiero verlo.
-¿Ves a ese grandulón con barba que esta en taquilla comprando los boletos?-dijo mientras sonreía- Él es mi hermanito.
-Oh. Pensé que era...más joven.
Mia se reía mientras yo veía a su hermano.
-¿Fred?-voltee y era Riley.
-¡Riley! Te presento a Mia. Es nueva en la escuela.
-Mucho gusto.-dijo Mia.
-Ella es mi mejor amiga desde siempre.
-Que bien.-dijo Mia- bueno, mi hermano me esta esperando. Chao Fred y un placer conocerte.- le dijo a Riley.
-Igualmente, que estés bien.-dijo Riley.
Luego de que Mia se fuera Riley me cogío de gancho y entramos juntos al parque.
-Eres un conquistador.
-¿De qué hablas?-le respondí a Riley. Pero sabía perfectamente de que hablaba.
-No te hagas el bobo. Se nota que le gustas.
-Apenas si nos conocemos.
-Y a ti te gusta ella. ¿Verdad?
-Bueno... Es bonita...
-Yo sabia- Riley se separó de mi brazo y me miro a la cara mientras decía eso.-Eres muy obvio.
Luego de esto hicimos fila para una montaña rusa. Se llamaba "Thunderbolt" y admito que daba miedo con solo mirarla.
Para no entrar en detalle les voy a decir que fue el mejor día que he tenido. Nunca me había divertido tanto y haber estado con Riley lo hizo mucho más divertido.
-Estoy cansada- dijo Riley al final del día.-¿Vamos?
-De acuerdo.
Salimos del parque y subimos al auto. Durante el viaje a casa de Riley nos pusimos a discutir sobre el día. Ella decía cuanto se había divertido o cuanto se había asustado en cada atracción, especialmente en el castillo del terror. Realmente daba miedo.
Finalmente llegamos a casa de Riley. La acompañe a la puerta de su casa y me despedí.
-Gracias por este día, Fred.
-Gracias a ti por ser mi amiga. Mi mejor amiga.
-Te voy a extrañar.
-Yo más. No sabes cuanto.
Entro a su casa y cerró la puerta. Me estaba devolviendo al carro cuando escuche la puerta de la casa abrirse.
-Te quiero-dijo Riley mientras corría hacia mi y me daba un abrazo con lagrimas en su cara.
-Te quiero- le respondí mientras le daba un beso en su frente-. No llores. Entra a casa. Tu madre me va a matar.
-Ok- dijo Riley mientras se secaba las lagrimas con la manga de su saco-. Descansa.
-Nos vemos el martes. Ya quiero verte graduada.-Riley me sonrió y cerró la puerta de su casa.