[To The End]

[Capitulo 20]

2 meses después.

-Y es asi, que nuestra segunda sucursal de "The Climb" es abierta – Jack corto el listón rojo y todos aplaudian.

Despues de ese vergonzoso susceso, mi vida cambio demasiado y más con Jack, me he hecho algo cercana a él y no se si sea bueno o malo. En fin, hemos hecho negocios con muchas disqueras y prodcutoras del mundo, y esta es la segunda sucursal de musica de Londres. Y si, he dicho hemos, o sea de los dos, por que tambien yo he estado colaborando un poco con mi imagen, y me gusta.

Por supuesto que he seguido con la revista, jamas la dejaria. Pero ha cambiado demasiado, en las entrevistas coopero cuando es necesario, mis citas con los chicos ya no las hago yo, me distancie mucho de ellos, y duele.

-Felicitaciones señor Ospreay, señorita Hardy – Oscar, uno de los socios se acerco con nostros – veo que a la gente les agrada el lugar.

-Eso se lo debo a Velvet – respondio Jack – ella se encargo de la decoracion y el acomodo de cada cosa del lugar – sonrió.

-Tiene muy buena vista, señorita Velvet – me miro Oscar y levanto un poco su copa de vino.

-Bueno, es una combinacion entre las disqueras de Estados Unidos y las de aquí, fue sencillo – reí un poco.

Pasaban de las 7 de la noche y apenas iba lllegando a casa, note que en la puerta habia una canasta envuelta en papel de regalo, pero si aún faltan 3 dias para mi cumpleaños.

Entre y de una patada cerre la puerta, fui directo a la cocina para desenvolver la canasta, dentro de ella habia una botella de mi vino favorito, un six pack de cerveza, y unos quesos ¿quién podra ser? Tambien habia un pequeño sobre que contenia una nota:

"Para el queso mas apestoso del mundo, te extraño Velvita.

Alex"

Reí solo con leer la nota, creo que fui un poco dura tambien con Alex al perder cualquier comunicación con él, mi enojo era grande que lo desate con todo mundo.

Tome mi telefono y marque su numero, es el unico que se me de memoria.

-¿Aló? – su voz grave atendio el telefono.

-Gracias por la canasta, mono – le dije y escuche una pequeña risa de él.

-Sabia que te gustaria, y no me agradezcas, lo hago por tu cumpleaños – me respondio Alex.

-Pero si aún faltan dias, cabron. No me quieras hacer vieja antes de lo debido – reí.

-Lo se, pero te dare pequeños regalos, así que tu te callas – solto una risa e hizo una pausa – te extrañe mucho, pequeña.

-Y yo a ti, Alex – respondí – perdoname, no debi desquitar todo esto contigo cuando fuiste el unico que trataba de ayudarme – mi voz se empezaba a quebrar.

-No tienes por que pedirme perdon, Velvet – respondio – se como te sentias y como te sientes aún. Pero era lo mejor para ti, que te despegaras un poco de nosotros, incluso de mi. Pero no pasa nada, Velvita, todo esta bien – su voz me daba tanto alivio.

-Te quiero Alex, eres el mejor – una lagrima rodó por mi mejilla.

-Y yo a ti, pequeña – contesto – Pero basta de ponerte sentimental, me aburres cuando estas asi – solto una carcajada.

Nos pasamos horas platicando, jamas tocamos aquel tema, todo fue anécdota tras anécdota, risas y todo el paquete Alex James que te puede dar cuando estas mal. Es mi mejor amigo, no me puedo apartar de él.

-¿Entonces tenemos todo bajo control? – cheque mi lista recorriendo el gran salón.

-Al parecer si, Velvet – me contesto Sara, una de las organizadoras – estara todo listo para esta noche.