-ˢᵘᶰᶠˡᵒʷᵉʳ ಿ-
Taehyung siempre amó la preciosidad de los girasoles, y aunque no lo dijera, siempre le pareció que el castaños de hermosos ojos era tan chillón y brillante como cientos de ellos.
Pero por desgracia la luz que irradia Jeon es una flor...
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Jungkook hizo volver todo a como era antes.
Ya no lo esperaba para caminar juntos, tampoco se sentaba en el pupitre de enfrente, mucho menos cruzaban más palabras que el usual «Buenos días».
Jungkook era bueno disfrazando las cosas, nadie del salón se percató del cambio. Nadie notó que el chico alegre se distanció del extranjero, tampoco hubo alguien que se lo refutará.
Incluso, parecía que a SeokJin le daba gracia. Jungkook era quien se notaba más interesado en TaeHyung, ya no más. Tae era quien ahora soltaba miradas hacia las direcciones en donde el moreno aparecía.
Incluso, se notó cierto cambio cuando iba con Namjoon y Yoongi, el par decía que «se veía más desinteresado de lo normal». Puede que Namjoon bromeara sobre el Hanahaki, algo como «¿Te ha rechazado? Procura no morir de amor», quizá algo más sutil como «¡No mueras!». TaeHyung no lo recordaba, prefería ignorarlo. Como todo.
Por desgracia, para él, hubo algo que no pudo ignorar.
La semana siguiente al incidente, durante la clase de gimnasia, Jungkook apareció con moretones en las piernas y unos terribles rasguños en sus rodillas. Se veía fatal.
Tae intentó ir hacia él pero las amigas del castaño fueron las primeras en alcanzarlo junto otro grupo de chicos.
-¡Jungkook-oppa, ¿qué te ha pasado?! -interrogó una de ellas con genuina preocupación.
Jungkook le regaló una sonrisa.
-Me caí.
-¡¿Eh?! ¿Y cómo es posible que tu hermana no te haya atendido? ¡Mírate! -gritoneó otra de las chicas.
-No sabía que Jeon tenía una hermana-dijo con sorpresa alguno de sus compañeros, Hoseok para ser más específicos.
-¿Al menos es linda? -bromeó alguien más.
Jungkook hizo un mohín y negó.
-¡Es una horrible persona! Cuando me caí me dijo que lo tenía bien merecido.
-Oh, debe ser duro tener una hermana mayor como ella.
Jungkook desvió la mirada y sonrió avergonzado.
-Yo soy el mayor.
-¡¿Eh?!
TaeHyung resopló antes de alejarse por completo, no sin antes echarle un vistazo a las heridas del moreno. Se detuvo a medio camino y regresó sobre sus pasos, atravesó el grupo que rodeaba al menor y lo tomó del brazo.
-Te llevaré a la enfermería-musitó con seriedad, el resto de chicos observaban la escena confundidos.
Jungkookse alejó del agarre de TaeHyung con un poco de recelo.
-Estoy bien, Kim-comentó con dureza a tal punto que las chicas creyeron que comenzaría una pelea. Una de ellas lo tomó del brazo, tranquilizándolo. TaeHyung solo frunció el ceño.
