Mommy's moments

Caos de pensamientos

¿Qué he hecho?

   Repetía una y otra vez la misma oración en mi mente, tratando de buscarle un sentido lógico y racional a lo que había hecho. 

   Me terminé de acostar en la cama y me cubrí con las mantas, viendo como todas las imágenes pasaban delante de mí como pequeños destellos de recuerdos. Todo había pasado en menos de cinco minutos, el beso, la cara sorprendida de Margareth, su inesperado "Buenas noches" y terminando por completo con mi ilusión cuando apagó la luz de mi habitación y cerró la puerta al salir, mientras yo veía como su sombra de alejaba paulatinamente de donde estaba yo. 

¿Tan mal había sido? ¿En verdad solo me dijo "Buenas noches"?

   Realmente este momento quedaría marcado como la noche más patética d emi vida, donde no sabía si gritar, llorar o desaparecer completamente del mundo. Me arrepentía de lo que había hecho, y mi mente era un caos de pensamientos, donde lo único que me preguntaba era qué estaría pensando Margareth...

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        Margareth entró a su habitación y cerró la puerta lentamente, sintiendo una presión en el pecho de la que realmente no le apetecía hablar. Vió como Greta se entretenía felizmente viendo un programa de televisión mientras ella se sentaba en la cama, revisando el celular ante los mensajes que tenía sobre los nuevos proyectos de trabajo. 

- ¡Marggie, mira eso! - dijo eufóricamente Greta mientras veía con picardía la televisión - Un hombre así es lo que necesitamos. 

     Margareth no pudo evitar reír ante ese comentario, viendo al hombre "Guapo es poco" que salía semidesnudo en el programa de televisión. Sabía que estaba mal la sexualización dirigida al cuerpo masculino; es decir, ella misma se molestaba cuando sexualizaban los cuerpos femeninos de manera continua, pero quién podía explicarle eso a Greta que veía a aquel hombre como si se lo fuera a comer. 

    En seguida, Greta miró a su amiga con una sonrisa de complicidad, riéndose estruendosamente al ver la reacción de Margareth.

- Bueno, bueno. No generalizare - dijo Greta mientras ninguna de las dos abandonaba la sonrisa - Un hombre así es lo que yo necesito. 

- ¿Y Phill? - preguntó Margareth con intriga sin dejar de ver el cuerpo estructural del actor.

- Ay amiga, no nombres a ese espanto - dijo Greta seriamente mientras su amiga reía. 

- Phill era un buen tipo - dijo Margareth al recordar lo muy atento y respetuoso que era él con Greta. 

- Sí - dijo Greta seriamente para después agregar con atrevimiento - Pero yo no quiero a un buen hombre, yo quiero a alguien que me trate mal. 

      Nuevamente  Margareth no pudo evitar soltar una carcajada, notando levemente como una sombra se creaba debajo de la puerta y desaparecía rápidamente. Tessa debía estar por el pasillo. 

- Volverás con él. Te conozco - dijo Margareth tranquilamente mientras Greta asentía.

- Sí, es cierto. Pero primero tengo que comprobar que esta criatura que estoy esperando es realmente de él - dijo Greta con seriedad - ¿Te imaginas que no lo sea? ¡Él me mataría!