— ¡Ow! — Gemí.Un dolor agudo aguijoneó en mis... ¿codos? ¿Qué demonios? Abrí los ojos y miré a mi alrededor, presa del pánico y completamente aterrorizada. No me encontraba en el callejón, no había ningún arma apuntándome. Alcé la mano para tocarme el cuello, -nadie me agarraba la garganta. Bajé la mirada hacia mi pie, -desnudo e ileso. Estaba tendida en el suelo de mi dormitorio, al lado de la cama. Los pálidos rayos azules se colaban por el hueco de las cortinas que cubrían las ventanas.
Después de un largo, total y absolutamente desconcertante minuto me di cuenta: ¡Estaba soñando! Oh Dios mío. Estaba. Soñando. Debía de estar tan atemorizada que me había caído de la cama y golpeado contra el suelo. Los codos absorbieron el impacto, eso explicaba por qué me dolían.
Un minuto. Si estaba soñando, eso significaba que me había dormido. ¡No! Me estoy volviendo descuidada. No puedo dejar que eso vuelva a pasar. No puedo permitírmelo porque tengo esas jodidas pesadillas. Había tenido un sueño dentro de otro. No, podía asegurar que me había despertado en el, cuando Peter me llamó para ir al trabajo. Pero estuve dormida durante todo el tiempo. Eso explicaba toda la confusión que me había rodeado dentro de la pesadilla.
Pero el disparo y el miedo no estaban borrosos. Los sentía ahora mismo atravesándome, tan real como cuando mis padres habían muerto. Estando sola y desamparada, teniendo un arma apuntándome, disparándome -había sido la peor pesadilla que había tenido hasta el momento.
Débilmente me enderecé y encogí abrazándome, juntándome las rodillas al pecho. Oh Dios mío, creo que estoy temblando. Lo había sentido tan real, horripilante, tan aterrador. Restregué mi mano por la cara sintiéndola húmeda. Estaba llorando y me acababa de dar cuenta de ello. Las lágrimas seguían recorriendo mi rostro mientras recuperaba el control de la realidad.
Mi teléfono empezó a sonar desde la mesilla de noche. Me sobresalté y reuniendo la energía suficiente, lo cogí y contesté.
— ¿H- hola? — Dije temblorosa, sin molestarme en mirar el identificador de llamadas.
— Soy yo. — Respondió al otro lado Jason McCann. Se detuvo por un segundo. — ¿Estás bien, pequeña?
Un sentimiento oscuro me recorrió por dentro y creo que sollocé mas fuerte. Mierda, soy un desastre. — No. No lo estoy. — Conseguí contestar entrecortadamente.
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BANGERZ · J.B | •Spanish Version•
Fanfiction"Quiero un chico malo que sea bueno, solo conmigo. Un chico parecido a un huracán, impredecible, temperamental, vicioso, con la oleadas de ferocidad danzando en sus ojos fogosos pero que de repente, ese oleaje parase al verme, volviendo a la calma d...