Cap. 15

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Cuando Jungkook entró a su casa lo primero que vio fue a su hermano tirado en el sofá de la sala con un tazón de palomitas a medio comer.

- ¿Donde estabas? - Jimin dirigió su vista a su hermano menor tratando de reprimir una sonrisa, él sabía exactamente donde había estado.

- Acompañe a Tae a casa de la abuela Kim - sus mejillas se colorearon y empezó a jugar con sus dedos para distraerse.

- Esta bien, pero la próxima vez avisame donde vas a ir, estaba preocupado - eso era mentira, solo amaba fastidiar a su hermano.

- Pues esto no hubiese pasado si no hubieses salido sin dejarme las llaves - Jungkook tenía el seño fruncido a la vez que pronunciaba sus palabras.

- Esta bien, reconozco mi error, omma dejó un poco de comida para ti en la cocina, yo estaré en mi habitación - Jimin se estaba levantando para ir a su destino cuando la voz del menor lo interrumpió.

- ¿Donde esta omma? - Jin cada vez estaba menos en casa desde que empezó a ir a terapia, entre sus sesiones en el psicólogo y el trabajo ya casi nunca lo veían.

- Pues, dijo algo de ir a ver a su psicólogo, pero esta bien, vuelve más feliz cada vez que va - solo se restó a asentir con la cabeza mientras se dirigía a la cocina.

En eso Jimin fue a su habitación y se recostó en su cama, dejó salir un suspiro de frustración.

¿Por qué Yoongi siempre lo rechazaba?

Sus manos se dirigieron por si solas a el bulto proviniente de su abdomen.

- Realmente odio ser así, ¿por qué estoy tan malditamente gordo? - con palabras comenzó a arremeter contra él miso.

Se despreciaba, odiaba cada parte de su cuerpo, sus pequeños ojos, sus mejillas regordetas al igual que su cuerpo, su diente chueco.

Muchas personas se empeñaban en decirle lo lindo que era y lo adorable que se veía cuando sonreía, pero para él nada de eso valía la pena, no cuando la única persona que le importaba no se interesaba en él.

Poco a poco las lágrimas fueron abandonando sus ojos y los sollozos aparecieron, solo quería una bonita historia de amor con la persona que el amaba ¿era muy malo querer eso?

La puerta de su habitación se abrió lentamente, más el no lo notó, estaba más concentrado tratando de esconder su rostro en sus brazos.

Una caricia en su cabello lo hizo sobre saltarse y al abrir sus ojos se encontró con el rostro preocupado de su hermano.

- ¿Te ocurre algo hyung? - el menor había logrado escuchar su ligero llanto mientras iba a su cuarto.

- Estoy bien Jungkook, no tienes que preocuparte - su voz se oia forzada y trato de hacer una sonrisa que solo se de formó en una mueca.

- No tienes porque mentirme, se que soy tu hermano menor y siempre tratas de protegerme y hacerme sentir mejor, ¿podrías dejarme ser quien seque tus lágrimas esta vez? - los ojos de Jungkook le transmitían tantas emociones que no pudo hacer más que asentir.

- Creo que me enamoré de la persona equivocada - los ojos del menor se abrieron en demasía al escucharlo.

- ¿Estas enamorado? ¿De quién? - como siempre no pudo contener su curiosidad y preguntó lo primero que se le vino a la mente.

- No quiero hablar de eso Jungkook - a pesar de su curiosidad lo entendió, si no quería decirle el nombre de quien se había enamorado debía de ser por algo.

- Esta bien hyung pero... ¿que te hace pensar que es la persona equivocada? - Jimin soltó un suspiro, no sabía como expresarse correctamente con su hermano, no cuando estaba siendo tan tierno y amable, no cuando él había pensado y dicho cosas malas de él solo por un chico.

- El no me quiere, esta enamorado de otra persona - miro en dirección contraria a su hermano, no quería verlo mientras decía eso - pero después de todo creo que lo entiendo, esa persona es mucho más linda que yo, su cuerpo es mejor y... - un estruendoso golpe en su pared lo interrumpió, dirigió su mirada a su hermano quien lo veía con el seño fruncido y su respiración estaba agitada.

Jungkook se levantó de la cama de su hermano y tomó a este del brazo dirigiéndolo al baño, donde había un gran espejo de cuerpo completo, el mayor casi estaba temblando, era muy rara la vez que se enojaba así.

- Mirate - más que una petición aquello pareció una orden - ¿que es lo que no te gusta de lo que ves aquí? - Jimin comenzó a analizarse y sus manos pronto se dirigieron a aquella grasa localizada en su cuerpo - esta bien ¿que más?

Después de unos minutos Jimin comenzó a señalar una por una las cosas que no le gustaban dejando mudo a su hermano al percatarse que era casi todo su cuerpo.

- Me siento tan miserable a veces - Jungkook no soportó más y envolvió al mayor en un abrazo.

- No tienes porque sentirte así ¿sabes que veo yo aquí? - Jimin lo miró interrogante a la vez que una sonrisa aparecía en el rostro de su hermano - a un chico hermoso, tus mejillas tus ojos todo tu ser es simplemente hermoso, tu sonrisa que es capaz de iluminar hasta el día más nublado, muchos darían lo que fuera por ser un poco como tu eres y si eso no te es suficiente deja de guiarte por algo tan llano como tu apariencia, la belleza tarde o temprano se va, lo que queda es lo que esta dentro, y dejame decirte hermano que eres una de las personas más maravillosas que he conocido, incluso ahora, nuestra situación familiar no es la mejor y aquí estas tu, para apoyarnos y hacernos sentir mejor con tu sola presencia, si alguien no puede ver lo perfecto que eres que se pudra, porque yo te amo y odio verte autodestuirte por algo así, nunca vuelvas a decir que algo malo de ti mismo, todo hasta tus pequeños defectos forman parte de lo que eres, y quienes te amamos, te amamos por lo que eres - ambos dejaron salir sus lágrimas que estaban cargadas de emociones.

Jungkook acompañó a Jimin a su cuarto y le hizo compañía hasta que se durmió, dejó la habitación del mayor y dejó salir un suspiro.

¿Era el amor tan malo como para que todos tuvieran problemas con él?

Volver a amar | VKOOK|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora