Volver a amar | VKOOK|

Cap. 23

Sus pasos eran lentos, vaya día había tenido, de cierta manera se sentía aliviado por lo que acababa de pasar, esa presión sobre él ya no estaba, nadie más estaba involucrado en sus problemas, solo quedaba la parte más difícil, el afrontarlo y aprender a superar por su cuenta el amor que sentía por Kim Taehyung.

Levantó de a poco su vista que había mantenido en el suelo casi todo el camino a su casa y sus ojos se detuvieron en un figura familiar que maniobraba para que las pesadas bolsas que sostenía no cayeran de sus manos.

Rápidamente corrió en su dirección con intención de ayudarla, no podía dejarla ir así como así.

- Abuela Kim, deme esas bolsas, la acompañaré hasta su hogar - la mayor no tardó en reconocerlo y pasó aquellas cosas que cargaba a los brazos ajenos, no iba a renegar, estaba bastante cansada por cargar tanto peso a su edad.

- Jungkookie, que coincidencia encontrarte por aquí - dirigió una de sus arrugadas manos a la cabellera del menor para depositar allí una suave caricia.

- ¿Qué hacía fuera de su casa? Creo recordar que Taehyung me mencionó que estaba enferma - al tiempo de decir eso emprendieron camino a la casa de la abuela Kim, esta no estaba muy lejos y Jungkook podía recordar claramente el camino hasta esta.

- Va, ese muchacho es un exagerado, solo fue un ligero resfriado, no por eso tengo que quedarme en casa encerrada todo el día - Jungkook sonrió un poco al notar la mueca en la cara de la mayor, parecía molestarle en serio que Taehyung se preocupara de esa manera por ella.

- Él solo quiere cuidarla - trató de hacerla entrar en razón, pero la anciana parecía ser tan terca como su nieto.

- Bien, eso no importa ahora, hoy en la mañana hice unas deliciosas galletas, me gustaría que pasaras a probarlas, Taehyunie no vendrá hoy y me siento muy sola en esa casa - son una pequeña sonrisa asintió, si Tae no estaría allí no habría ningún problema, además la abuela Kim le agradaba mucho.

- Claro que probaré sus delicias abuela - al llegar a la casa de la recién nombrada ambos entraron y Jungkook la ayudó a acomodar sus compras, al terminar un gran plato de galletas con un vaso de leche estaban esperando por el en la cocina.

***

- Jimin necesito hablar contigo por favor - el más bajo dejó salir un suspiro de frustración.

- ¿Qué quieres Taehyung?¿crees que ya olvidé lo que ocurrió ayer? - se volteó para quedar frente a frente con su mejor amigo, la tensión en el ambiente era palpable.

-Solo quiero hablar contigo, se que ayer me comporte mal pero... en serio necesito ayuda en algo que... no logro comprender, eres mi mejor amigo a pesar de cualquier cosa y, te necesito ahora - Jimin lo pensó unos segundos antes de asentir con la cabeza, Tae se veía demasiado tímido y vulnerable, no podía simplemente ignorarlo.

- Esta bien, hablemos, pero aquí no, vamos te invito a mi casa - con la sola mención de ese lugar las alarmas del menor se activaron, no quería ir allí o por lo menos no por el momento.

- No creo que sea lo mejor considerando el tema de tu hermano, por qué no mejor vamos a la mía - Jimin lo dudo, pero terminó aceptando, Taehyung tenía razón, no era lo más conveniente llevarlo a su casa si existía la posibilidad de que Jungkook estuviese allí también.

El camino fue corto, casi no notaron cuando ya se encontraban frente a el hogar de los Kim, Tae no tardó en abrir la puerta e ingresar al silencioso lugar.

- Mi padre no esta, desde hace algunos días a comenzado a salir más que de costumbre - ese comentario automáticamente hizo pensar a Jimin en su propio padre a quien comúnmente llamaba omma.

- Esta bien, ¿de que querías hablar? - la mirada de Taehyung se ensombreció tan pronto nombró aquello.

- Yo... algo me esta pasando con una persona y no se como controlarlo, o que demonios es - los ojos de Jimin se abrieron de sobremanera, ¿de eso se trataba?¿Tae estaba teniendo problemas para relacionarse con alguien?

- Podrías decirme que es exactamente lo que te pasa con esa persona, no soy un experto pero podría ayudarte - el menor de ambos se tomó unos segundos para pensar, no podía hallar las palabras correctas para aquello que quería expresar.

- Es solo que... siento que puede comprenderme aunque no lo haga en realidad, sus palabras son capaces de reconfortarme de manera en la que nadie había logrado, el tacto de cuerpo cuando lo abrazó se siente muy cálido y la simple cercanía con él hace que espasmos recorran todo mi cuerpo - Jimin quería intervenir, decirle lo maldito que era al haberlo traído después de lo que le hizo a su hermano solo para decirle que estaba enamorado de alguien más, pero no lo hizo porque Taehyung se veía realmente perdido, como si en serio no tuviese idea de lo que pasaba o... como si no quisiera verlo - se que el me ama, me confesó sus sentimientos y probablemente lo lastimé pero...no sabía que hacer, solo, me dio miedo y lo rechace - ese comentario atrajo su atención por completo - el verlo con otro chico ocupando el lugar que pude haber tenido se sintió como la mierda y no se el por qué, por qué me dolió tanto verlo besando a otra persona, el por que quise con desespero que esa persona desapareciera - Jimin se levantó de golpe al atar todos los cabos sueltos en su mente.

- Tú... estas hablando de Jungkook, estas enamorado de mi hermano - los ojos de Tae se abrieron mucho producto del miedo, lagrimas bajaron por sus mejillas al verse descubierto, no quería reconocerlo pero...ya era muy tarde, su peor pesadilla se estaba cumpliendo, estaba cayendo de nuevo en el juego del amor por alguien, y esa persona no era nadie más que Jeon Jungkook, el chico de la adorable sonrisa.