Premiados [Bnior]

Premio #6

Premio #6- Primer Trimestre: Fake Family.

El resto de la tarde pasó como un borrón para el omega.

Después de una buena sesion de caricias y besos en el baño que lo habían llevado a él y a su compañero al orgasmo, Jaebeom se puso de mejor humor. Probablemente porque ambos apestaban a la esencia del otro y eso dejaba muy en claro que eran pareja para cualquiera que sintiera su olor.

Claro, que a nadie le quedaría la menor duda después de que en el restaurante Jinyoung había estado tan pegajoso con Jaebeom que parecía que se quería sumergir en la piel del otro. Jaebeom lo había dejado, le acarició el cabello, los brazos, lo abrazó y besó cuando el omega se lo pidió y estuvo a punto de sentarlo en su regazo y darle de comer pero sus amigos se habían quejado de lo mimosos que podían llegar a ser. Jinyoung ya no supo de que fue la conversación con ellos.

Después, fueron con sus padres, aunque Jinyoung no quería. El omega había asegurado que con un mensaje de texto estaba bien,Jinyoung no era tan apegado a sus padres, mucho menos a su madre, por una razón específica, su madre estaba igual o mas enamorada de Jaebeom que él y al omega realmente le molestaba cuando su madre la hacía cumplidos y lo llenaba de comida.

Jinyoung se la había pasado rodando los ojos mientras el mayor sonreía a sus padres, diciéndoles la feliz noticia. Su padre se había puesto feliz y su madre casi empezó a llorar cuando lo escucho, y cuando Jaebeom le aseguro que amaría a Jinyoung para siempre, lloro todavía más fuerte la señora exagerada. Jinyoung se burló de ella, con aires de superioridad antes de besar a su alfa frente a sus padres.

Cuando por fin salieron de ahí, Jinyoung tuvo que despegar—literalmente—a su madre del brazo de su alfa. Jinyoung quería fingir que la visita a su viejo hogar no le había gustado pero fue bueno ver a sus padres, ver sus antiguas cosas y besar a su alfa dentro de la habitación que lo acompañó en las noches solitarias mientras pensaba en su amor unilateral. Había un aire nostálgico en eso. Haberse acurrucado a dormir un rato con el culpable de esa soledad adolescente, se sintió como mágico.

Claro, que ahora las cosas eran diferentes.

Jinyoung había conocido a los padres de Jaebeom hace mucho tiempo, poco después de que ambos se hicieran cercanos. La señora Lim siempre ha sido amable, amable y buena cocinera sin duda. Le había dado algunos consejos a Jinyoung y siempre le cocinaba algo cuando se veían. Sus citas eran muy extrañas, eran más para informarle como estaba Jaebeom que para otra cosa, a Jinyoung nunca le molesto. Sabía que el mayor prefería mantener el contacto por teléfono con su madre y la verdad es que eso era mejor para todos. La señora Lim nunca trato mal al omega, ella no era grosera, a menos que su marido estuviera en el mismo cuarto, eso es una historia diferente. 

Jaebeom suspiro de nuevo cuando detuvo su auto frente a la puerta de la casa de sus padres. No quería hacer esto. Sentía que estaba poniendo en peligro a su omega. Sabía conscientemente que nadie le haría daño físicamente, pero el sentimiento estaba ahí, instalado en su pecho, diciéndole que no debía dejar que el omega pusiera un solo pie en ese lugar.

–Te diria que no tenemos que hacerlo, pero sé que realmente quieres hacerlo Jae–Jinyoung volteo a ver a su alfa, tomando su mano fuertemente, dejando suaves caricias para relajarlo.

El alfa respiro profundamente, tratando de inhalar toda la esencia de su pareja, intentando tranquilizarse lo más que podía. Había estado bien durante todo el dia, su mal humor había desaparecido por completo un rato después de lo que había sucedido en la cafetería, había estado presumiendo a su maravilloso y fuerte omega, a pesar que todos con los que había hablado ya lo conocían, él nunca se cansaría de alargarlo y admirarlo. Pero ahora, el gruñido estaba tan cerca de salir como nunca antes, no podía relajar su ceño, la preocupación por su omega no se iba y aun no entraban a esa casa, siquiera se habían bajado del coche –Jinyoung...–el nombre del omega salió como un suspiro de el pecho del alfa. Jinyoung sonrió complacido, a pesar de la situación, se sentía necesitado por su alfa, y la satisfacción que venia con eso no se lo quita ni el estúpido del señor Lim.