Una larga historia.

107 4 14
                                    

《KAT》

Apenas podía respirar. No sabía que me pasaba, todo resultaba muy confuso para mi en este momento. Ser impulsiva no estaba en mi carácter y menos cuando involucraba a otra persona, quien en este caso resultaba ser el actor más problemático y polémico de la industria cinematográfica ¿Cómo fue que todo esto terminó así? ¿En realidad existía el destino? ¿Estamos destinados a algo o alguien irremediablemente? No lo sabía pero mi cabeza me daba millones de ideas y respuestas tan rápidas que no podía elegir ninguna de ellas como la correcta.

Sonaba hasta un poco cliché, pero mi vida hasta ahora no había sido de las que llamaría demasiado relevante. Me dediqué a estudiar y trabajar por mi cuenta, no tenía una familia directa a la cual recurrir en mis momentos de dudas o tristezas, ser huérfana hizo que fuera criada por familias amables que me habían regalado un espacio temporal en sus vidas. Haber recurrido a la caridad de personas que ni siquiera conocía fue mi rutina diaria desde que tenía memoria, hasta que un día cualquiera en la escuela había conocido a una niña nueva y llamativa llamada Amy con quien rápidamente y sin preámbulos pude congeniar y quien luego tras muchos meses de amistad en los recesos y parques me habia introducido finalmente a su reducida pero muy unida familia; me abrieron las puertas de su casa sin pensarlo. Nos habíamos hecho mejores amigas conforme pasaba el tiempo y como debía pasar luego, fuimos inseparables. Lidiar con su fuerte carácter, con la de su hermano, incluso con la de su padre, había sido uno de los mayores desafíos que pude haber atravesado. Con sorpresa me di cuenta que casi de inmediato me habían tomado cariño y eso conllevaba a que quisiesen lo mejor para mi, aún más después de haber conocido mi pasado solitario confinada en albergues y hogares de paso, pero sabía que todo en exceso no siempre es sano, ya que a veces era demasiada presión para mi tanta atención de su parte.

Apreciaba a los hermanos de una forma que no podía dimensionar, agradecía lo que habían hecho por mí desde que nos conocimos, por eso creia que sucumbía involuntariamente a sus decisiones y en algunos casos a sus caprichos. Siempre se encontraban cerca de mi vigilando cada movimiento que hacía como un reflejo de hermandad que significaba nuestro relacionamiento. Me sentía protegida sí, pero a veces necesitaba respirar, necesitaba decir "Esto es lo que quiero y ustedes no están en mis planes" pero eran simples fantasías que se me cruzaban por la mente, no tenía esa fuerza de voluntad suficiente para decir o hacer cualquier cosa que no los incluyera. Odiaba tener ese carácter, odiaba no ser más fuerte y decidida como Amy o seguro y metódico como Oliver; hasta suena estúpido que siga comportándome como adolescente reprimida y sin personalidad después de tanto tiempo, más aún convertida ya en una adulta quien estaba a punto de terminar su exitosa carrera universitaria.

Amaba a mi mejor amiga, admito que no podría haber hecho sin ella muchas de las cosas de las cuales hoy estoy orgullosa, el apoyo que recibía de ella era tal que no podría realizar una insignificante acción sin voltear primero esperarando una simple reacción como aprobación, no sé si suena hasta enfermizo pero ella conocía cada parte de mi vida y de mi pasado y querer esa misma aprobación en estos momentos era lo que necesitaba para mi ya, atormentada mente.

Ansiaba que todo fuera como antes, que llegaríamos a la casa después de un largo día en la universidad o en alguna guardia del hospital; nos sentaríamos despreocupadas en la sala con una botella de cerveza en las manos, mientras compartimos las anécdotas de nuestra ardua jornada. Pero sé muy en el fondo que no pasaría en este mismo momento, no hoy, no después de haber sido testigo del tremendo odio que ella y su hermano profesaban hacia Robert.

 Pero sé muy en el fondo que no pasaría en este mismo momento, no hoy, no después de haber sido testigo del tremendo odio que ella y su hermano profesaban hacia Robert

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
I love you 3000Donde viven las historias. Descúbrelo ahora