Rogers Fantasy

Mapache

La mañana llegó y con ella los rayitos de luz que se colaban por el enorme ventanal, FRIDAY tan eficiente abría las persianas lo justo para que entrara la luz necesaria.

El único que se despertó fue Steve, quien recibió el saludo de la IA.

–Buenos días Capitán– Habló la robótica voz en tono bajo para no despertar al bello durmiente, Tony. Steve correspondió el saludo estirándose en la cama, se sentó a la orilla de esta con el más minucioso cuidado.

Una pantalla se desplegó delante de él informándole la hora, la temperatura, el clima actual y por supuesto las noticias matutinas.

Steve con sus sentidos alerta y nada adormilado revisó todo rápidamente y se levantó, alcanzó a escuchar un gemido de Tony, pero sabía que no era lo suficiente como para despertarse.

Desnudito como se quedó a dormir la noche anterior cogió una toalla pequeña de una repisa y se dirigió al baño, se lavó el rostro y meditó muy bien si tomar una ducha antes o después de su rutina de entrenamiento. Realmente no le apetecía ni un poco entrenar ese día. Cogió un cepillo de dientes y tan afanado estaba en su labor de cepillado y pensamientos absurdos de la noche anterior que poco le importaba seguir desnudo frente al lavabo del baño hasta que escucho a FRIDAY, tan amable como siempre:

–Podría sugerirle un conjunto de ropa deportiva si gusta, capitán.

Steve por poco y se traga el cepillo de dientes al sentirse observado por la IA.

FRIDAY lo sabía, o al menos parecía saber la vergüenza de Steve de andar desnudo y sentirse observado por una máquina, quizás y solo quizás esa IA disfrutaba hacer bromas pesadas. Si tan solo Tony hubiera instalado un modulador se risa, Steve estaba seguro de que la escucharía en ese momento.

Tosió un poco y solamente negó con la cabeza ante la amable oferta de la IA.

Terminó con su tarea en el lavabo y se anotó mentalmente pedirle a Tony no tener a FRIDAY hasta en el baño, pero desecho la idea al imaginarse la respuesta diciendo algo como: "¿Qué pasaría si te resbalas y te golpeas la cabeza en la losa? FRI sería la única que podría salvarte."

Suspiró y se apresuró a buscar un cambio de ropa interior y ropa de entrenamiento. Una camiseta blanca y un pantalón deportivo gris fueron suficientes, además de las zapatillas.

Se acercó a Tony y besó la cabellera castaña, sabía que con eso tampoco despertaría.

Bajó a la cocina y el café ya estaba listo en la cafetera, además de jugo recién exprimido en el extractor, las tostadas estaban a punto de salir y Steve agradeció infinitamente tener una casa inteligente.

Untó una tostada de pan con un poco de mantequilla sin sal y se sirvió un vaso de jugo de naranja, el café era para Tony, más que para él.

Tomó el periódico matutino y revisó nuevamente las noticias del día.

–Capitán, tiene una visita– Lo interrumpió FRIDAY.

– ¿Yo? – dijo Steve hablándole al cielo raso donde juraba él que estaba FRI.

–El señor, Soldado Mapache. – Anunció la femenina voz.

Steve suspiró sabiendo exactamente de quién se trataba y por supuesto sabiendo que Tony seguía sin poder tolerar del todo a Bucky.

–FRIDAY, déjalo pasar y por favor, cambia el nombre a Bucky Barnes.

–Clave de confirmación para cambio de comando: nombre, por favor. – Respondió FRIDAY con su fría voz.