• Koala •

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Matilde:
m, de madre;
a, de amor;
t, de tierna;
i, de inspiración;
l, de leal,
d, de diamante;
e, de esperanza.

Madre,
raíz de planta,
fortaleza de piedra,
pureza de vino;
madre,
de la que nace de la tierra
y perdura en la eternidad
de mi memoria;
sé que me amas,
pero más te amo yo,
que te lo expreso
en una risa a carcajadas,
carcajadas en cuyo
crecimiento amanece,
en cuyo invierno estalla
la luz de los bondadosos
y sinceros de corazón.

En este nombre, tu nombre,
corren mares y océanos
como jamás los habíamos visto,
rodeados por campanas silenciosas,
y esas letras,
las letras de tu nombre,
son el agua de un río vivo,
que desemboca
en mi corazón calcinado.

Porque la vida eres tú
cuando sonríes,
y eres feliz en ese momento
que te pertenece.

Tienes a un ejército
al coro de tu nombre.

La vida muchas veces
no es eso que quiero que sea,
pero tú haces que valga la pena
vivir una vida a tu lado.

Que todos los caminos
me llevan a ti,
mujer incansable,
mujer con corazón roto,
y alma eterna.

No te has ido aún,
y ya te echo de menos,
madre.

Invádeme siempre
con tu cálida voz abrasadora,
indágame, si quieres,
con tus ojos nocturnos,
pero en tu nombre,
déjame navegar,
y yo te dejo dormir
cual koala en libertad.

Mayo: MilagroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora