Capítulo 1.

4 1 0
                                    

Una calurosa mañana de agosto, para ser precisos el día 8 de agosto, domingo. Me disponía a hacer la última maleta y la más grande de las 3 que había preparado de momento. Eran las 10 de la mañana y mi padre estaba al llegar, estaba en una reunión de trabajo en la que le indicaban todo lo que tendríamos que hacer al llegar al aeropuerto de Las Vegas. Sí, Las Vegas.
Ya habíamos ido muchas mas veces, incluso tenemos casa allí, pero esta era la definitiva, ya que a mi padre lo han destinado allí unos 5 años. Él es muy importante en su trabajo porque es periodista de las noticias y esta allí de corresponsal. Él no suele estar aquí en España, en casa por esa razón, pero todos hemos decidido irnos allí a vivir y eso haremos hoy

De repente tocan a la puerta dos veces, me levanto corriendo y me pongo los pantalones mas cercanos a mí. Detrás de la puerta se encuentra un chico de un metro noventa y pico, un poco pálido para estar en el mes de agosto y vestido a medias, esto se debe a que solamente lleva los típicos pantalones grises de Nike, él es César mi hermano mayor . Él es un chico con muchos amigos y muy sociable, nadie sabe como lo hace pero siempre acaba cayendo bien a la gente y si a alguien le cae mal hará lo que sea para caerle bien y esto no me gusta demasiado, no siempre hay que caerle bien a la gente, yo en ese aspecto soy diferente, bastante selectiva con las personas. Él ha tenido ya cuatro o cinco novias, todas las tías de la ciudad van detrás de él. Aunque es normal, su hermano se ha convertido en un chico precioso. En cambio ella en los 18 años de vida que tiene no ha tenido tiempo para pensar en chicos, su vida siempre ha sido un poco atareada por el tema de su padre. Tener que viajar una media de 6 veces al año no es un gusto ni para ella ni para ningún miembro de su familia pero tendrán que convivir con eso ya que es la principal fuentes de ingresos de la familiar Cruz Gómez.

- ¿Qué quieres, César?
-Mamá dice que en 20 minutos tenemos que ir yéndonos... Así que ves dándote prisa guape.- Comenta el con un tono tranquilo mientras observa como su hermana pequeña se está poniendo un poco nerviosa.
-Ostia vale, sal, ahora nos vemos. Victoria cierra la puerta de un portazo y pone el montón de ropa que hay en la cama en la maleta de MUY mala manera. Intenta cerrarla pero le es imposible- MAMAAAAÁ, ¿puedes subir un momento?
Su madre ya esta subiendo por las escaleras antes de que Victoria acabe la oración. Entra al cuarto agotada a la vez que preocupada cuando ve a su hija encima de la maleta intentando cerrarla
-¿Te ayudo?
-Sí. - Le dice su hija un poco angustiada de estar intentándolo una y otra vez. - Por favor.
Acaban con la maleta, su madre sale del cuarto y se viste, cierra las ventanas y se acuesta en su habitación mirando hacía arriba, pensando en todos los momentos que le quedan por vivir en esa ciudad pero que no tendrá otro remedio que dejarlos marchar. Se levanta y cierra las 4 persianas de su habitación, revisa que no se olvida nada, pero cuando llega al escritorio ve el reloj que le compró su hermano en su anterior cumpleaños y se lo pone de inmediato en la muñeca izquierda. Sale por la puerta y se despide de su habitación esperando volver algún día.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 02, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

say hi to Las VegasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora