Todos los días de mi vida.

5

La noche caía y con ella una fuerte lluvia.

Wei Wuxian permanecía en silencio mientras Lan WanJi se encargaba de limpiar las heridas de su rostro.

Sentía los suaves toques de una pequeña bola de algodón paseándose por sus mejillas y labio inferior.

Desde el momento en que ambos habían entrado al departamento de Lan WanJi ninguno había dicho una palabra, y eso estaba poniendo nervioso a el chico menor no sabía si debía decir algo.

-¿Lan Zhan? -susurró a duras penas inaudible.

Escuchó como el mencionado suspiró pero aún así no dijo nada.

-Lan Zhan -volvió a intentar ¿Están tan mal?

Luego de unos minutos sin respuestas, Wei Ying se rindió.

Tal vez le era una molestia para él, Lan WanJi no estaba acostumbrado a tratar con personas ciegas, así que pensaba que no era de su agrado tener que lidear con ese tipo de cosas, a pesar de ser su novio no lo quería.

-¿Que ocurrió? -dijo Lan WanJi por fin.

Wei Ying sonrió levemente a pesar de su dolor.

-Fue una larga historia

-Quiero escucharla -demando.

-Estaba en la salida de la universidad esperando a Jiang Cheng, de pronto sólo escuché voces y pasos -suspiró- lo siguiente que supe fue que rodé por las escaleras, alguien me empujó

Lan WanJi apretó sus puños con impotencia, su malhumor había empeorado con las palabras de Wei Ying.

-Luego de eso sólo me levanté y me fui antes de que llegará Jiang Cheng -prosiguió- Lan Zhan no te preocupes, no es la primera vez que ocurre pero tenía miedo de la reacción de mi hermano

-¿Cuantas veces a ocurrido?

Wei Ying se encogió de hombros. No era que no fuese importante para él, pero ya se había acostumbrado a ese tipo de situaciones. Como le había dicho una vez a Lan WanJi existían muchas personas que se aprovechaban de la desventaja visual que él tenía, desde que tenía pequeño muchos niños lo molestan y eran tan crueles que habían llegado al punto de agredirlo.

Jiang Cheng lo defendía al igual que Yanli, pero en muchas ocasiones no podían interferir e igual resultaba lastimado.

-Wei Ying -susurró Lan WanJi- ¿Cuantas veces a ocurrido?

-Lan Zhan, no tiene importancia -le dijo tratando se acercarse a su novio, logrando rodear su cuello con sus brazos- Porque no simplemente me cuidas y eres mi sexy enfermero

-Debo hacer algo, no se puede quedar así

Wei Ying negó rápidamente.

-No Lan Zhan, no dejaré que hagas nada estúpido, se lo prohíbo a Jiang Cheng y tú no serás la excepción, no soportaría si algo te ocurriera

-Pero Wei Ying

-Escuchame Lan Zhan, miralo de esta manera estoy bien y estoy aquí contigo, no me importa nada más

Lan WanJi dudó.

En su interior comenzaba a crearse un debate, no quería que nada le ocurriera a Wei Wuxian, y mucho menos cuando él podía evitarlo.

Se prometió que nadie le haría más daño pero sólo terminó suspirando ante las palabras de su amado.

Wei Ying sonrió y se adelanto a darle un suave beso en los labios, ahora el otro problema sería explicarle todo lo que ocurrió a Jiang Cheng.